Pasaron los primeros tres partidos del Torneo Julio Grondona y, el Cele, en su vuelta a primera demostró que puede estar preparado para enfrentar a todos los equipos y enfrentarlos de igual a igual. Esto se debe en gran parte por la importante gestión del presidente Hernán Lewin y todo su equipo de trabajo que día a día hace crecer al club.

El pope Celeste dialogó con el programa radial El Show de Temperley, y empezó recordando el trabajo hecho para mantener la localía en Turdera: "No fue fácil mantener la localía en un partido tan importante como Boca, más siendo el primer partido del año, pero la peleamos mucho, charlamos mucho con el Aprevide y hoy el Beranger, dentro de nuestras limitaciones, está a la altura de las circunstancias".

Por otra parte, remarcó el sentimiento de la gente (10 mil socios en poco tiempo) y lo que Temperley está alcanzando: "Están pasando cosas inéditas, que me parece que no pasan hoy en otro club. El día de la presentación de la camiseta fue emocionante, la gente está muy identificada con el equipo, con los jugadores, con el técnico y lógico con el club. La gente más grande lo está volviendo a ver en Primera después de mucho tiempo, cada partido es una fiesta y eso quizá en otros clubes no pasa. Estamos en un volver a resurgir y mostrando que Temperley está a la altura de los más grandes, no nos ha pasado por arriba siquiera Boca".

Luego, repasó los proyectos que tiene pensado realizar en caso de poder mantener la categoría: "Hay dos proyectos, tanto hacer la nueva tribuna como hacer una segunda bandeja de plateas. Enla CD cada uno tiene su opinión y estamos evaluando todas, en mi caso voto por una nueva popular porque siento que está quedando muy chica la cancha hasta para los socios. Pero se votará en su momento por mayoría, la idea es que si podemos mantener la categoría y se duplican los ingresos de AFA ahí destinaríamos una parte a seguir mejorando la infraestructura".

Finalizando, a pesar del gran trabajo, dejó en duda su intento de reelección en junio del 2016: "Un poco lo que me pasa es que a veces se me juntan cosas familiares con las exigencias del club, tuve a mi nene internado... y a veces uno por brindarle un trato personalizado a cada socio o escuchar todas las críticas tanto las justas como las injustas, en algún momento te sobrepasa, pero estoy contento porque todo lo que se hizo es valorado por la gente. Es una función desgastante, tenés que estar en todo, no es fácil. Veremos en su momento".