9 de mayo de 2010, domingo; en simultáneo jugaban Argentinos y Estudiantes, los dos que peleaban por el título, contra Independiente y Rosario Central respectivamente. Los dirigidos por Claudio Borghi recibían a un equipo de Avellaneda que se jugaba su última chance de llegar a la última fecha con posibilidades matemáticas de campeonar.

La Paternal vivía algo que hace 25 años no vivía: luchar un torneo (luego viviría ser campeón), y los vecinos e hinchas del Bicho se congregaron en el Diego Armando Maradona para ver a su equipo en una tarde soleada y fresca. El partido empezó con el cielo azul en el horizonte de la calle San Blas, Argentinos e Independiente comenzaban un partido que está en la memoria y en el corazón de cada hincha del Bicho.

Los titulares ese día fueron: Nicolás Peric; Juan Sabia, Matías Caruzzo, Santiago Gentiletti; Gustavo Oberman, Néstor Ortigoza, Juan Ignacio Mercier, Gonzalo Prósperi; Santiago Raymonda; José Luis Calderón y Nicolás Pavlovich.

Argentinos Juniors 3-4-1-2 football formation

A los 26 minutos se abrió el marcador en los pies de Nicolás Pavlovich, rematando una pelota que le quedaba en el pie luego de cruzar toda el área y con el arquero rendido. La Paternal explotaba en el sentimiento rojo y blanco de ser hincha de Argentinos Juniors, y Pavlovich festejava moviendo los brazos como alas, fiel a su apodo de Buitre luego de convertir en el arco de la calle Juan Agustín García. Pero al minuto, el delantero Leonel Núñez, surgido de Argentinos, convertía un gol olímpico y pedía perdón a un estadio entero del que se destacaba disonante el grito de gol de la hinchada visitante (sí, había hinchas visitantes).

Ya en el segundo tiempo, a los 2 minutos, caía sobre el estadio Diego Armando Maradona un baldazo de agua fría. Darío Gandín hacía el segundo gol de Independiente rematando de cabeza tras un centro. Exactos 20 minutos después, nuevamente Núñez ponía el 3 a 1, pidiendo perdón como en el primer gol, pero a nadie le importaba el perdón de Leonel Núñez, porque Argentinos comenzaba a despedirse del campeonato que se cerraba entre el equipo dirigido por el Tolo Gallego y los platenses de Juan Sebastián Verón.

El mundo se vino abajo, pero algo en el estadio Diego Armando Maradona anunciaba que todavía quedaba mucho tiempo, que algo podía pasar y que el equipo de La Paternal tenía camino por recorrer. Argentinos reacciona y convierte, a los 27 minutos, el segundo gol, en la cabeza de Pavlovich. Ahora faltaban más de 15 y se abría una posibilidad.

43 minutos, tiro libre apenas más adelante de la mitad de la cancha para el Bicho, centro de Federico Domínguez, cabezaso en el área, mil rebotes y GOOOOOL de Juan Sabia. Argentinos empataba y la gente empezaba a emocionarse, empezaba a entender que ser de Argentinos no es conformarse, y por eso todos van al medio de la cancha, quedaban 2 minutos por jugarse más el tiempo adicional.

47 minutos, segundo minuto de adición, aparece Matías Caruzzo, remata, se desvía en un defensor y GOOOOL, GOOOOOL de Argentinos Juniors. Argentinos Juniors 4-3 Indepentiende. Argentinos Juniors único puntero del Torneo Clausura 2010 porque Estudiantes empató con Rosario Central.

Una semana después, 16 de mayo, Argentinos iba con sus 4 estrellas a Parque Patricios a enfrentar a Huracán, y volvía con la tan ansiada 5ta estrella.

Quien siente la gloriosa camiseta del Semillero del Mundo, del Bicho, del Tifón de Boyacá, recuerda que ese día, fue el día que entendió que ser hincha de Argentinos Juniors es no abandonar nunca, aunque falten 2 minutos. La canción que todavía resuena por el barrio: “Son los Bichitos, fútbol y toque, los Globetrotters de La Paternal”.