De Puerto Madryn al mundo. Un central que se inició en Racing Club y debutó allí en 2007, que ganó el Mundial Sub 20 con la Selección Argentina en Canadá y que, tras pelear temporadas enteras por la permanencia en La Academia, en 2010 pasó a Estudiantes de La Plata, donde ganó el Apertura de ése año, y en 2012, cuando River superó el año más difícil de su historia, llegó al Millonario, a cambio de 850.000 dólares. Pocos iban a pensar que el central devenido a lateral iba a entrar en la historia grande del Club.
Debutó ante Belgrano, en el Inicial 2012, de la mano de Matías Almeyda. Se ganó el lugar rápidamente, con la dorsal 25 en la espalda. Sin embargo, el equipo no se la hacía fácil y Gaby no logró destacarse en su primer semestre que fue de adaptación. Cuando llegó Ramón Díaz, el chubutense continuó dentro del equipo, afianzado en su rol como 4, sin mucho ataque, pero con buena marca. Su primer gol se daría recién en el Inicial 2013, ante Arsenal de Sarandí (1-1). Pocos días después, volvió a anotar, ante Lanús (victoria millonaria 1-0 en La Fortaleza), aunque el torneo fue realmente para el olvido.
En 2014, fue el año tan esperado para River, donde volvieron las alegrías y los triunfos memorables. Mercado fue gran protagonista en el Final ´14, sobre todo en las últimas dos fechas: en la 18°, ante Argentinos Juniors en La Paternal, abrió a cuenta (fue 2-0 final), y en la 19°, la final ante Quilmes en el Monumental, marcó el 2-0 transitorio (terminó 5-0) y fiesta, campeón. Una semana después, ganó la Copa Campeonato, e incluso estuvo en la lista de 30 preseleccionados para el Mundial 2014 (Alejando Sabella, quien lo dirigió en el Pincha, lo incluyó, pero no estuvo dentro de los 23 que viajaron a Brasil).
Llegó Marcelo Gallardo y siguió Mercado firme en el lateral, sin nadie que le haga sombra. Tomó mucho más protagonismo en las acciones de ataque, contando con un socio ideal: Carlos Sánchez, el 8 que volvía tras su paso por Puebla. Y en el Transición 2014, volvió a dejar su sello en la red, en un disparo de afuera del área ante Vélez, en el Amalfitani (1-1). Sin embargo, donde la rompió fue en la Copa Sudamericana. Convirtió ante Libertad de Paraguay, en la vuelta de los octavos de final (2-0), fue clave en la serie histórica ante Boca en la semifinal (neutralizó a Andrés Chávez) y en la final, ante Atlético Nacional, aprovechó el gran centro de Leonardo Pisculichi para batir, de cabeza, a Franco Armani y desatar la locura en el Monumental (terminó 2-0). Primer título internacional, y vendrían más.
Mercado en River: 145 PJ, 11 goles, 6 títulos, lugar ganado en la Selección Argentina.
En 2015, se mantuvo la base campeona del año anterior, y en febrero, se levantó la Recopa Sudamericana, con una buena tarea de Mercado. En el Campeonato, el Muñeco apostaba a un mix y lo mejor a la Copa Libertadores, la obsesión. Claro está que Mercado formaba parte de la munición pesada, y en la fase de grupos, anotó ante Juan Aurich, en el Monumental, partido donde insólitamente, los peruanos lograron empatar, tras infinitas oportunidades perdidas del local, y la clasificación hipotecada. Se logró el pase a octavos, pero Gaby no pudo jugar, debido a una agresión verbal en el empate 2-2 ante Tigres en Monterrey, por lo que no jugó ante Boca. Sí lo hizo ante Cruzeiro en cuartos, y ante Guaraní en la semi, donde volvió a ser protagonista, en la ida, anotando el primer gol ante los paraguayos, tras un centro de Gonzalo Martínez (fue 2-0). Se perdió la vuelta de la final ante Tigres, ya que en el primer partido, quedó suspendido por acumulación de tarjetas. Jugó Camilo Mayada de 4, y lo hizo excelente, para lo que fue goleada riverplatense 3-0. Mercado no jugó ésos 90 minutos, pero fue fundamental en ésa conquista que tanto anhelaban por Núñez. Un jugador nacido para triunfar.
Otro gol en River fue en Japón, ante Gamba Osaka, por la Suruga Bank, tan sólo seis días después del partido contra Tigres. Marcó de cabeza, y fue 3-0 final para el Millo, que sumaba otra Copa más a sus vitrinas.
Durante finales de 2015 y el primer semestre de 2016, pocos pudieron destacarse, ya que llegó el relajo tras ganar tantos títulos, y Mercado no pudo sostener al equipo, que se fue cayendo a pedazos, sin poder defender la Sudamericana, ni la Libertadores, quedando novenos en el Campeonato ´15 y el Transición ´16, y haciendo un papel menor al esperado en el Mundial de Clubes. A pesar de eso, Gaby ya se había ganado un nombre y, merecidamente, formó parte de los planes para Gerardo Martino, que lo convocó en las Eliminatorias para la Selección, donde disputó tres partidos y anotó dos goles (a Chile y Bolivia), y hoy por hoy es titular en la Albiceleste, y fue subcampeón de Copa América Centenario, con la dorsal 4.
España, su próximo destino. Volverá a tirar paredes con Matías Kranevitter, en Sevilla. Tenía todo acordado con Rayados de Monterrey, pero el defensor prefirió esperar una oferta de Europa, y la aprovechó. Por sólo dos millones de dólares, una cifra mucho menor a la que vale un defensor de ésa talla, de Selección. Pero es la cifra que acordó para renovar su contrato (y no irse libre, como muchos de sus excompañeros).
Tras cuatro exitosos años en Núñez, llegó su hora de dar el salto económico y por la puerta grande. Fue referente, y dio todo por la camiseta. Sus goles, desbordes, centros y cruces quedarán eternizados. Gaby Mercado, el de Puerto Madryn que quedó para la historia. Su último partido, ante Sportivo Rivadavia por a Copa Argentina. Penal, gol y despedida. Adiós, y gracias por tanto.