El histórico goleador xeneize, Martín Palermo, escribió las páginas de su período en la Selección Argentina en tan sólo 15 encuentros, en los cuales se lo puede dividir en dos etapas.

La primer etapa del Titán fue cuando Marcelo Bielsa era el entrenador y, al ver un buen rendimiento en Boca, en febrero de 1999 decide convocarlo para jugar un amistoso contra Venezuela, partido que la Albiceleste le ganó a la Vinotinto por 2-0. Luego jugó dos amistosos más contra México y Lituania, donde claramente se ganó la confianza del Loco y tuvo su lugar en la plantilla final que disputaría la Copa América del año 1999 en Paraguay. El goleador, pese a tener una buena performance con 3 goles (dos a Ecuador y uno a Uruguay) en 4 partidos, nunca pudo olvidarse de la noche fatídica en el cotejo contra Colombia, donde erró 3 penales (uno atajado, otro al travesaño y uno desviado), partido que terminó 3 a 0 a favor del conjunto cafetero y, de esa manera, Martín cerró su primera período en el seleccionado.

El segundo ciclo vino años después, con un Martín Palermo más experimentado y que tenía un gran nivel en Boca, lo cual llamó la atención de Diego Armando Maradona, que lo llevó a la Selección para que esté en el banco contra Brasil y Paraguay, ingresando ante éste último 59 minutos donde no pudo cambiar el rumbo y cayó derrotado por 1 a 0. Días más tarde, Pelusa decidió mandarlo de titular contra Ghana en un combinado argentino plagado de jugadores que se desempeñaban en el torneo de Primera División Argentino, encuentro en el cual metió los dos goles de la victoria.

Luego tuvo una noche soñada en el Monumental, donde en un partido donde a Argentina le empataban el partido en tiempo de descuento y se le complicaban las chances de ir al Mundial de Sudáfrica, apareció él, el hombre de la película, que tras un centro por debajo de Federico Insúa, tocó la pelota y desato el delirio de sus compañeros, del Diego y de todos los hinchas presentes y no presentes en la cancha.

Pero cuando parecía que no tenía más tinta para escribir, Maradona luego de este heroíco partido tomó la decisión de llevarlo al Mundial, donde sólo disputo el último partido de la Fase de Grupos contra Grecia, partido que culminó 2 a 0 con el sello del Titán, que con 13 minutos en cancha mandó al fondo de la red una pelota que le quedó servida y, una vez más, hacía gritar al pueblo argentino. De esta manera, culmina su participación en Argentina.

Sus números:

Palermo disputó 15 partidos marcando 9 goles (un promedio de gol de 0,6). De esos 15 partidos 7 fueron en torneos oficiales donde hizo 5 goles (0,71 de promedio) y 8 encuentros amistosos en los cuales hizo 4 goles (0,5 de promedio).