Tras la partida de Carlos Tevez al fútbol chino, Boca Juniors decidió ir en busca de un jugador desequilibrante de similares características al ídolo xeneize. Aunque se barajaron muchos nombres, finalmente la dirigencia llegó a un acuerdo con el Sporting Braga para hacerse con los servicios de Oscar Junior Benítez. Confeso hincha de Boca y viejo conocido de Guillermo Barros Schelotto, el ex volante de Lanús debutó con el pie derecho en el conjunto de la Ribera, donde marcó su primer gol la derrota por 3-1 ante Aldosivi.

El jugador nacido en Adrogué, en la Zona Sur del Gran Buenos Aires, recordó su pasado como un hincha más. Ese tiempo donde no era reconocido y pasaba sus domingos alentando al club de sus amores: "Me gustaba ir al sector de La Doce, así que solía ir ahí", contó el ex Lanús, quien está ansioso por tener su primer partido con la casaca azul y oro: "Me tocó jugar en la Bombonera con Lanús, pero no va a ser igual que jugar con la de Boca en un torneo. Ojalá eso pase pronto".

Como todo hincha, el nuevo refuerzo xeneize cantaba las canciones cada vez que iba a ver a su equipo, pero aseguró no tener una favorita. "Las canciones de Boca son todas lindas", afirmó sin titubear. Sin embargo, a la hora de buscar un ídolo azul y oro, el volante no dudó: "Román. Siempre me gustó Román. También Guillermo, lógico. Palermo... Pero mi ídolo fue siempre Riquelme. Fue el más grande de todos y lo admiro mucho".

Precisamente, Juan Román Riquelme había dicho hace un tiempo que Junior era uno de los jugadores que más le gustaban. Sobre esto, el ex Lanús afirmó que nunca tuvo la chance de hablar con él "ni tampoco de cambiar camisetas". "Lo que dijo fue muy lindo, no lo podía creer. Fue una sorpresa y una alegría inmensa", añadió.

Su amor por el Xeneize viene del lado paterno de la familia, así lo contó el propio jugador en un diálogo con Olé: "Mi viejo es hincha de Boca y nos hizo fanáticos a todos. En casa somos todos bosteros, no hay ningún gallina. Cuando mi papá era más joven venía mucho a la cancha con mis hermanos, y yo me quedaba en casa porque era chiquito. Después crecí y empecé a venir solo".

Ya metiéndose de lleno en lo que respecta a su nuevo equipo, el volante confesó: "Me sorprendió todo. La gente, el periodismo, la repercusión... Es algo increíble y nuevo para mí".

Benítez conoce a los Mellizos Barros Schelotto de su paso por el Granate y se mostró muy agradecido con ellos por brindarle la chance de vestir la camiseta del equipo de sus amores: "Me puse muy contento, obvio. Es una alegría enorme que Guillermo vuelva a depositar su confianza en mí y espero aprovecharla al máximo. El sabía que yo soy hincha, así que le estoy doblemente agradecido, aunque para ganarme un lugar voy a tener que demostrar como todos mis compañeros. Voy a tener que pelearla".

Sobre su paso por Lanús y dónde lo podría utilizar el Melli, Junior afirmó: "En Lanús terminé jugando como extremo por la izquierda, en esa posición jugué la final con San Lorenzo (4-0, él metió el primero, de cabeza) y lo hice bien. Pero también he jugado mucho tiempo como volante, así que puedo hacer el recorrido que hoy se les pide a los jugadores de mis características". Y luego añadió: "Es la posición (wing) en la que me utilizó en la mayoría de los partidos. Algunas veces más retrasado y otras más cerca del 9, pero él ya me conoce y sabe que puede contar conmigo en distintas posiciones".

Junior Benítez sabe que no la tendrá fácil para hacerse con un lugar en el once inicial, ya que Ricardo Centurión y Cristian Pavón fueron una fija para Guille en el último torneo. Sin embargo, el volante se tiene fe y, lejos de achicarse, salió a bancar la parada: "Uno siempre trata de ganarse el puesto, aunque sé que la voy a tener difícil. Pero si estoy acá es por algo, ¿no? Algo habrá visto el cuerpo técnico".

El volante todavía no cae en que debutó con un gol (descontó de cabeza en la derrota ante Aldosivi por 3-1) y no duda de que está cumpliendo uno de sus mayores anhelos. "Todavía no puedo creer dónde estoy parado. El sueño de todo hincha es ser jugador del club que uno ama y yo lo estoy cumpliendo. Trato de tomármelo con calma porque, si no, toda esta emoción puede jugarme en contra y perjudicarme a la hora de jugar. Tengo que ir de a poco, aunque siempre con las ganas de jugar. Ser hincha tiene que ser un plus, pero después tengo que trabajar con seriedad como todos", confesó Benítez.

El oriundo de Adrogué contó que no se arrepiente de haber gritado el gol que le convirtió a Boca en la Bombonera, ya que "si ganábamos quedábamos muy cerca del título y, además, teníamos que jugar la final de la Sudamericana". Sin embargo, afirmó que lo vivió "mitad y mitad: un poco contento y un poco no, porque enfrente estaba mi equipo". "Son situaciones que uno va pasando. Quizás muchos me conocieron a partir de ese gol, también", añadió. 

Para finalizar, Junior habló acerca de sus tatuajes y dijo: "Me gustaron siempre. No llevo la cuenta, pero son muchísimos. Tengo en los brazos, las manos, la espalda, los muslos... No todos tienen un significado. Si veo un diseño que me atraiga, me lo hago. Me los hago para mí, me gusta mirarlos". Pese a su gran fanatismo, el volante no tiene ningún tatuaje del Xeneize, pero afirmó que "el próximo puede ser".