En el marco de un nuevo partido, Wilmar Barrios fue el jugador más correcto en la victoria de Boca Juniors ante Newell’s Old Boys de Rosario por 1 a 0, donde logró llevarse los aplausos del público, que le agradece la entrega que hace minuto a minuto.

Desde el principio, Boca tuvo con Wilmar el control del mediocampo, donde cortó el nexo entre Mauro Formica, Maximiliano Rodríguez e Ignacio Scocco en más de una vez y siempre fue un central más cada vez que tiraban un centro, es decir, tiene todo para ser un cinco a la medida de Boca. Siempre al suelo, metió uno o los dos pies si era necesario pero siempre se quedó con el balón. No tuvo inconvenientes en ningún momento, salvo para los volantes ofensivos de la Lepra que no sabían como cuidar la pelota ante el mediocampista.

El colombiano no sólo interceptó en más de una ocasión el balón de los rivales sino que esta vez se animó a manejar el plano ofensivo junto a Fernando Gago. Y mal no le fue porque de él salió el primer gol: una corrida desde mitad de cancha suya fue el comienzo y después la claridad para dejarle la pelota donde Darío Benedetto deseaba para que éste se perfile y concrete la única conquista del domingo.

Por todo esto, Barrios se ganó la figura y seguramente la titularidad debido a que el Mellizo Guillermo Barros Schelotto habrá visto que el colombiano merece estar dentro de la cancha y no fuera de ella.