El 14 de junio de 2000 Boca empató 2 a 2 con Palmeiras en La Bombonera. Los hinchas y los jugadores se fueron cabizbajos, con sabor a derrota. La primera final de la Copa Libertadores había dejado mal parado al Xeneize, que tenía que definir el título en Brasil. Siete días más tarde, cuando para casi todos el Verdao ya era campeón de América, Boca aguantó el partido en el Morumbí y Oscar Córdoba se hizo grande en los penales, atajando dos de los cuatro remates del Palmeiras. Esa consagración internacional fue el puntapié inicial de un equipo que se eternizaría en el recuerdo cinco meses después al derrotar al Real Madrid en Japón. 

El Merengue atravesaba la primera etapa Galáctica, un periodo que se había iniciado con la contratación de Luis Figo. Además del portugués, en el plantel había jugadores de la talla de Guti, Roberto Carlos, Raúl, Fernando Hierro y Claude Makelele. El técnico era Vicente Del Bosque, y para la opinión pública el Real Madrid era el gran candidato a quedarse con el título intercontinental. 

Por su parte, Boca llegaba como puntero del Torneo Apertura (se consagraría en la última fecha ante Estudiantes), con un equipo consolidado y con la sobria, pero sabía conducción de Carlos Bianchi. La figura indiscutida era Juan Román Riquelme, pero lo secundaban Bermúdez, Battaglia, Serna, Palermo y Delgado, entre otros. 

En la víspera del encuentro Bianchi analizó todas las variantes y armó el equipo que enfrentaría al Real Madrid pensando al detalle. Allí tomó una decisión que sería dolorosa pero que también resultaría una de las claves del posterior triunfo: sacó del equipo a Daniel Fagiani, que había sido titular durante todo el proceso previo, y en su lugar incluyó a Aníbal Matellán, que se encargaría de la marca personal de Figo. 

El 28 de noviembre Boca se presentó en la cancha y primerió a su rival desde el inicio. Palermo tuvo una ocasión clara a los tres minutos de juego y no perdonó y a los seis amplió la ventaja. Así, Boca, antes de los diez, ganaba 2-0. Un escenario inesperado para todos los hinchas, pero en particular para aquellos que se pusieron frente al televisor con cierto retraso. Real Madrid descontó a los 12, a través de Roberto Carlos. A partir de la ventaja, Boca controló el partido con cierta tranquilidad. Riquelme se hizo dueño de la pelota y en el recuerdo quedaron sus gambetas a Makelele y a Geremi. Sobre el final del primer tiempo, Palermo tuvo, de cabeza, la oportunidad de estirar la ventaja, pero la pelota se fue por encima del travesaño. 

“Quédate tranquilo –le dijo Bianchi a un Palermo que seguía lamentándose en el entretiempo-. Nosotros no hacemos el 3-1 pero ellos tampoco nos empatan”. La predicción del Virrey se cumplió y Boca fue campeón del mundo por segunda vez en su historia (antes lo había conseguido en 1978). Luego daría varias vueltas olímpicas más y volvería a la cima del mundo, pero esa es otra historia. Esta, la de la Intercontinental 2000, es la Génesis de todo.

Formacion de los Equipos:

Boca Juniors: DT Carlos Bianchi Real Madrid: DT Vicente Del Bosque
Córdoba Casillas
Ibarra Geremi
Bermúdez Hierro
Traverso Karanka
Matellán Roberto Carlos
Battaglia Figo
Serna Makelele
Basualdo Helguera
Riquelme McManaman
Palermo  Guti
Delgado Raúl