No iba a ser un partido más en el once inicial para Banfield, la salida de Jesús Datolo, ingreso de Kalinski y exclusión de Bertolo sobre la hora por disputas con el cuerpo técnico, marcaba la base de los retoques para el comienzo.

En lo táctico de Julio César Falcioni se vio claramente un 4-4-2 al ataque con Mouche de punta junto a Darío Cvitanich, pero la variante se ve en lo defensivo, ya que la línea de 4 defensores no se toca pero Eric Remedi da unos pasos hacia atrás, alejándose del mediocampo para ser un punto clave para ser rueda de auxilio cuando la pelota supere la línea de cuatro mediocampistas como fueron Mouche, Álvarez, Kalinski y Sperdutti. Así lo ejemplificamos gráficamente: 

Banfield le dio un buen uso a la pelota, persistiendo e insistiendo por momentos con mucha tranquilidad, circulando y buscando espacios, con descargas ante imposibilidades ofensivas con los centrales y la lateralización ocurrente de juego con Mouche, Sperdutti y Álvarez, y la centralización con Kalinski, Remedi y Civelli cuando rompía líneas con escaladas en su carril.

A modo de opinión, vale destacar que fue el mejor partido para Banfield con la posesión a su favor, y dejando en claro sobre la estadística que cuando el Bolso tuvo el control, generó peligro, y fueron en pocos lapsos de tiempo del encuentro. Aquí tenemos el promedio de pases y de la cantidad por tiempo.

Nuevamente, Banfield sufre por desatenciones dentro del área, como hace tiempo. A veces terminan en gol, a veces remates desviados o con peligro, pero la desatención o desconexión de la jugada por parte de los defensores de JCF son persistentes y preocupantes.

Balones cruzados, a las espaldas o al espacio, de pelota parada o en movimiento. Ultimamente no hay forma que varíe el desconcierto para generar una jugada de gol al rival, y en esta imagen repasamos lo que sufrió conceptualmente o tácticamente el Taladro ante Nacional.

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