La goleada ante Arabia Saudita había dejado muy buena sensaciones sobre el seleccionado ruso, pero la diferencia de aquel partido inicial se lo adjudicó al flojo nivel del seleccionado saudí. Sin embargo, Rusia se encargó de demostrar que su nivel no era casualidad y se despachó de Egipto, quedando a un paso y medio de los octavos y dejando virtualmente eliminado al equipo africano.

Mucho entusiasmo, cero gol

El primer tiempo tuvo al entusiasmo como principal protagonista en un estadio de San Petersburgo repleto y con un clima más mundialista que lo mostrado en el partido inicial de la selección local. Ambos equipos apostaron a la velocidad y al contragolpe, obligando a un juego dinámico de ida y vuelta, con muchos espacios hasta tres cuartos de cancha en donde el repliego de las dos selecciones se hacía fuerte.

Las llegadas de Rusia se generaron por el costado izquierdo. Por allí se generaron la mayoría de los ataques y de aproximaciones, sin embargo, los contantes centros desde la izquierda por parte de Golovin y Cheryshev en búsqueda de Dzyuba, la referencia rusa en el área, hicieron muy monótonos los avances y obligaron a que el nueve entrara en una batalla constante con la dupla central Hegazi - Fathi en cada envío aéreo.

La Egipto de Héctor Cúper, que tuvo el regreso de Salah, mostró algunas falencias defensivas que lo hicieron sufrir más de la cuenta ante un seleccionado local que generó más por insistencia que por juego. Lo mejor de los africanos llegó por parte del propio jugar del Liverpool y de la mano de Trezeguet, y justamente en ellos estuvieron las ocasiones más claras de los egipcios. Sin embargo, la puntería no estuvo precisa y ambas ocasiones se fueron cerca del arco defendido por Akinfeev.

Salah marcó de penal pero no tuvo un gran partido | Foto: Getty Images.
Salah marcó de penal pero no tuvo un gran partido | Foto: Getty Images.

La suerte y los goles

Lo que le faltó a la primera mitad llegó en el complemento. Cuando apenas había pasado dos minutos del segundo tiempo Roman Zobnin, de gran partido, se animó a rematar desde afuera. Su disparo, potente pero poco direccionado, encontró a Fathy, quien en el intento de despejar el remate terminó enviando la pelota a su propio arco.

Si Uruguay gana ante Arabia, Rusia quedará clasificada y Egipto eliminado.

Ese primer gol fue el inicio de la aplanadora rusa. Primero fue Denis Cheryshev, el 'Man of the Match' ante Arabia Saudita, quien esturó la ventaja a dos tras una gran jugada Mario Fernandes. Después llegó el turno de otras de la figuras del encuentro, Dzyuba. El nueve, que había peleado en las alturas durante todo el primer tiempo, finalemente tuvo su chance y tras un gran control en el área y una mejor definición puso el tercero del local.

Egipto intentó revivir su sueño mundialista, pero el descuento de Salah desde los doce pasos -el VAR volvió a ser protagonista- no alcanzó a evitar quedar al borde de la eliminación y dejó a Rusia a un paso de los octavos de final.

Cheryshev volvió a marcar y llegó a los tres goles | Foto: Getty Images.
Cheryshev volvió a marcar y llegó a los tres goles | Foto: Getty Images.

Los goles del Rusia 3-1 Egipto