Dentro de las muchas virtudes de Marcelo Gallardo al frente del Millonario se encuentra su capacidad de administrar lo mejor posible sus recursos, con buen ojo para los refuerzos y gran promoción de juveniles que hoy por hoy confirman parte de la columna vertebral. Ya van cinco años y medio comandando a River, con todo el desgaste que eso implica, pero motivados por nuevos desafíos.

En este 2020, ya sin Exequiel Palacios, vendido a Bayer Leverkusen, el plantel se prepara en San Martín de Los Andes mientras aguarda la vuelta al ruedo oficial, dentro de dos semanas ante Independiente (antes jugará un amistoso ante Nacional, el próximo sábado, en Uruguay). El Muñeco fue claro: la postura de la dirigencia es conservar el patrimonio del Club y no salir a buscar fichajes, dado que la situación económica está lejos de ser la ideal. Con la venta de Palacios (por la cual entrarán cerca de 13 millones de dólares a las arcas), River tratará de conservar al resto de los titulares, cuestión difícil porque desde Inter de Porto Alegre buscan a Ignacio Fernández, una de las figuras del 2019. 

Gallardo cuenta con la misma base desde inicios de 2018, cuando Rodolfo D'Onofrio abrochó las llegadas de Franco Armani, Lucas Pratto (por U$S 14 millones que se siguen pagando) y Juan Fernando Quintero. Ellos, sumado a la camada de mediados de 2017 (Enzo PérezJavier PinolaRafael BorréIgnacio Scocco), implicaron una inversión superior a los 30 millones de dólares (apaciguados por las transferencias de Lucas Salario h Sebastián Driussi). Desde entonces,en Nuñez dejaron de hacer erogaciones tan fuertes y cumplieron con el DT de consolidar un equipo que se conozca de memoria y que ha demostrado estar a la altura: campeones de la Copa Libertadores 2018 y finalistas de la edición 2019, junto a otros cuatro títulos en solo dos años.

La renovación de contratos, meta de la Comisión Directiva: Scocco, Pinola, Enzo Pérez y Leo Ponzio tienen vínculo hasta junio.

De cara a un 2020 donde la Libertadores tendrá otro lugar protagónico, Gallardo piensa también ella Superliga, su deuda pendiente. Para ello, necesita a todos sus soldados en óptimas condiciones, sobre todo a los indispensables: Armani en el arco; Gonzalo Montiel, Lucas Martínez Quarta, Pinola y Milton Casco en defensa; Nicolás De La Cruz, Pérez y Nacho Fernández para el juego del mediocampo; y Matías Suárez junto a Borré en el ataque. En este receso, el Muñeco quiere poner en mejor forma a Quintero y Pratto, elementales en 2018, pero que el año pasado no pudieron mostrar su mejor versión por problemas físicos.

Además de los refuerzos últimos de los cuales se pedirá más; Paulo Díaz era una obsesión de Gallardo, que llegó pero no sé asentó aún, mientras que Jorge Carrascal, que fue comprado, tiene potencial según el cuerpo técnico para brillar, mientras que Robert Rojas y Fabrizio Angileri, piezas de recambio en la última línea, también serán evaluados. Asimismo, juveniles como Julian Álvarez (citado a al Selección Argentina Sub 23) y Cristian Ferreira pueden aportar mucho más si tienen más rodaje.

En suma, el mejor "refuerzo" será mantener a todos los jugadores que viajaron a la Patagonia y sobrevivir al bombardeo del mercado de pases. Y que D'Onofrio consiga la firma para evitar una fuga a mediados de año.