Defensa y Justicia consiguió la Recopa Sudamericana por ser fiel a su propuesta de juego. Puede estar desordenado en el fondo y sufrir llegadas, pero de tres cuartos de cancha hacia adelante, tiene un horizonte y lastima. En la ida frente a Palmeiras, en el estadio Norberto Tomaghello, en la primera etapa creó situaciones pero no pudo concretarlas en la red y luego en un contragolpe Rony con una gran definición marcó el 1 a 0. Injusta esa desventaja puede ser pero el Halcón no pierde su manera de jugar e insiste. Por esa búsqueda encuentra en su línea de ataque a Braian Romero, quien en cada pelota que tiene en el área la transforma en gol y así las hazañas son posibles.

Indudablemente alguna dificultad siempre surge cuando en un tiro libre, padece la gran pegada de Gustavo Scarpa. Sin embargo, los dirigidos por Sebastián Beccacece siguen peleando y algún golpe puede dar como esa conquista de Walter Bou, que el árbitro  Andrés José Rojas Noguera y el VAR decidieron invalidarlo. Esa injusticia igualmente no le torció el brazo. Todo lo contrario, le dio más empuje para buscar la victoria en tierras brasileñas. Con la ilusión de ganar fue al estadio Nacional Mane Garrincha y planteó la formula que tan buenos dividendos le dio. El juego de Enzo Fernández, más las proyecciones de Matías Rodríguez y Marcelo Benítez,  fueron los motores para que Francisco Pizzini, Bou y Romero se movieran por el frente de de ataque y compliquen a la formación local.

Sin embargo, el conjunto orientado por Abel Ferreira aprovechó las debilidades defensivas de la visita y por una falta de Fernando Meza encontró la llave del partido. A pesar del tanto de penal de  Raphael Veiga, Defensa y Justicia no se apartó de su objetivo y continuó con su postura. Por ello salió ganando porque en una clara oportunidad, Romero sacó a revalidar su papel de héroe y convirtió la ansiada igualdad.

La postura de no perder la calma cuando se fallan las posibilidades de peligro más los contraataques que sufre en su zona defensiva, es saludable porque la ilusión no desaparece. A su vez se fortalece cuando crea nuevas jugadas. Por esa ambición no se entrega hasta el último minuto y cuando hay un resquicio muy difícil de perforar, aparece un futbolista como Benítez para sacar un potente misil y anotar el 2 a 1 final.  La hazaña en parte estaba alcanzada pero faltaba un impulso más en el tiempo suplementario.

La expulsión de Romero y la atajada de Ezequiel Unsain en el penal ante Gómez le dieron tintes dramáticos al espectáculo. No obstante la actitud de jugar este duelo no cambió y así con esa energía llegó la instancia decisiva: la ronda de penales. Los tiros de Adonis Frias, Miguel Merentiel, Eugenio Isnaldo y Fernández fueron muy bien ejecutados y por ello el claro triunfo estaba al caer. Dos malas ejecuciones de Palmeiras le dieron la ocasión de levantar el ansiado trofeo. La conquista de la Recopa Sudamericana fue un gran logro porque Defensa y Justicia tuvo un plan que no modificó ante las dificultades, por ello la tendrá bien guardada en sus vitrinas.

VAVEL Logo
Sobre el autor