Con un gol prematuro de Erwin Saavedra desde el punto penal (minuto 10) y que alzó al equipo boliviano en el marcador 1-0, con un difícil y apretado primer tiempo, la Selección de Paraguay en su debut, se llevó la victoria con un gol de Alejandro Romero (Minuto 62) y doblete de Ángel Romero (minuto 65 y 80).

Aunque los albirrojos en la primera parte sufrieron las complicaciones de una defensa boliviana organizada y estructurada, y por más que insistieron y combinaron distintas herramientas tácticas, para tratar de llegar a la portería contraria de cualquier forma posible, no lograron convertir hasta ese momento un primer tanto, ante esa situación Berizzo aseguró que se debió a fallas en la ejecución final de cada jugada: “Nos faltaba eficacia en el primer tiempo, en la segunda parte se ajustó la definición". 

Teniendo en cuenta que los primeros minutos resultaron ser complejos para los guaraníes, especialmente para generar espacios y desorganizar a la defensa boliviana, Berizzo explicó que la paciencia fue esencial para resolver el juego a su favor y desorientar a los jugadores bolivianos: “Tuvimos paciencia para abrir la defensa rival”.

Debido a las constantes críticas que ha recibido el argentino por la manera en que el equipo paraguayo se ha desenvuelto con la formación que utiliza (4-2-3-1), el estratega no perdió la oportunidad para hablar sobre la versatilidad de la misma y recordar que es un sistema que maneja porque lo conoce muy bien y se adapta a lo que busca con la selección: “El esquema no tiene que ver con los nombres".

Asimismo, durante la rueda de prensa también expresó cuál fue su análisis del juego, de las acciones y de las situaciones de gol. Comentó que acorde al buen resultado que obtuvo en la pasada noche de este lunes ante Bolivia, espera que Paraguay continúe consolidando su idea de juego, acompañada de una filosofía donde los jugadores tienen convicción y fe de sus cualidades como grupo: “Demostraron que creen en lo que hacen".

Finalmente, Eduardo Berizzo dijo que esta victoria ofrece una visión de lo que puede hacer y desarrollar la selección durante el torneo, ya que desde la Copa América 2007, celebrada en Venezuela, Paraguay no ganaba un partido de debut, ni tampoco se colocaba puntero del grupo.