Después de 28 años, la Selección Argentina levanta la Copa América al vencer por 1 a 0 a Brasil en la final que se disputó en el histórico estadio Maracaná. En este primer tramo del partido, a los dos equipos les costó generar situaciones porque el respeto mutuo les quitó agresividad y claridad. El seleccionado argentino en todos los encuentros anteriores fue muy ambicioso y pasaba a ganar rápidamente. Sin embargo en esta ocasión le costó imponer esta buena cualidad. Mientras tanto los dirigidos por Tite manejaron más la pelota pero no pudo llegar con precisión. Solamente contó con dos remates muy desprolijos.

No obstante Ángel Di María rompió con ese letardo porque aprovechó un pase de Rodrigo De Paul. Ante el desconcierto brasileño el volante argentino quedó solo ante el portero Ederson y convirtió el primer tanto.  Después de la apertura del marcador el conjunto comandado por Neymar continuó sufriendo su falta de ideas mientras que el elenco liderado por Lionel Messi elaboró dos chances de contragolpe. Increíblemente a los 36 minutos el autor del gol asustó al público argentino porque  luego de intentar desestabilizar a la defensa brasileña cayó al suelo por un fuerte dolor en su pie. Finalmente pudo continuar en el campo de juego. En la parte final Brasil tuvo un corner a su favor pero no pudo asestar el golpe final. Con el gran tanto del ex mediocampista de Rosario Central, la formación albiceleste mantuvo su leve ventaja en el cierre del primer tiempo. 

En el complemento la escuadra orientada por Tite había alcanzado el empate pero el juez de línea cobró fuera de juego y el árbitro Esteban Ostojich lo anuló. Luego el arquero Martínez le tapó una nueva posibilidad de gol al equipo brasileño. En este tramo Brasil se mostró con más variantes en ataque y complicó a la defensa albiceleste. Con el correr de los minutos el despliegue argentino fue apagando la energía local. De Paul, Di María y Messi fueron la bandera de esa fuerza de voluntad, tanto para tapar los huecos como para crear contraataques.

No obstante cuando Neymar se tiró atrás como un enlace construyó un buen avance que no terminó bien. Brasil por momentos apretó los pies en el acelerador por la figura del PSG pero no pudo mantener esa superioridad. La Selección Argentina con mucho amor propio defendió con uñas y dientes el marcador. Emiliano Martínez notablemente le sacó el remate de gol a Gabriel Barbosa. Como una gran película Lionel Messi con una buena aparición pudo aumentar las cifras pero el guardameta Ederson le ganó el duelo con astucia. Brasil no se dio por vencido ya que Neymar mostraba el camino. Con la última gota de esfuerzo el combinado albiceleste se las ingenió para hilvanar otra situación. Finalmente con la garra como bandera la Selección Argentina tuvo su premio y consiguió después de 28 años la Copa América