Luego de 4 partidos donde Racing no supo lo que era la victoria, el equipo de Gago finalmente logró dar un paso hacia adelante y llevarse los 3 puntos Tucumán. ¿Dio un paso adelante en funcionamiento? No exactamente, pero en Avellaneda se espera que este triunfo sea el puntapié inicial para que La Academia encaré de la mejor manera los últimos 5 partidos. 

Racing golpeó en momentos fundamentales que hicieron que la balanza se incline para su lado. La energía con la que salieron al segundo tiempo fue suficiente para quebrar a un Atlético Tucumán desganado y sin idea alguna.

Si alguien llegó tarde a ver el encuentro tranquilamente se le puede decir que no se perdió nada los primeros 45 minutos. Una primera etapa realmente para el olvido. Imprecisión y displicencia quizás serían las dos palabras que la podrían definir. Racing no pudo plasmar la idea de Gago, salir desde abajo con Nery Domínguez, mientras que el local desde el comienzo tuvo un plan de juego poco ambicioso, esperando algún error del rival para salir con transiciones rápidas. El problema fue que ese error nunca llegó por la lentitud que tuvo La Academia y el partido en general. 

Ninguno de los terminaron de meterse de lleno en el encuentro. Apenas algo más de Racing que intentó, erróneamente, tener la pelota y a partir de ahí buscar a Matías Rojas en el medio. Por otro lado, la amplitud de Mena y Pillud nunca se notó porque pocas veces les llegó la pelota. El planteamiento que quiso imponer Gago con la línea de 5, o de 3 cuando el visitante atacó, definitivamente no funcionó.

Echeverría pitó el final del primer tiempo y realmente no hubo nada a destacar. Apenas algunos contrataques de Atlético Tucumán y un remate de Rojas que tapó Luchetti sin problemas. Muy pobre partido de ambos equipos. 

El segundo tiempo comenzó con un panorama poco alentador, aunque había algo que destacar. Al equipo de Gago se lo notaba con más hambre, los futbolistas corrían mas, el equipo tuvo mayor intensidad. Por el lado del Decano todo siguió igual, un equipo sin ideas y con poca precisión de cara al arco rival. Esa es la explicación del resultado.

Racing aprovechó su llegada a los trece del complemento y Correa selló el 0-1 parcial. La Academia no deslumbró por su buen juego y funcionamiento colectivo, pero la intención de pararse un poco mas adelante le alcanzó para incomodar a un avaro Atlético Tucumán y ganar el partido. 

 

 

El equipo local si ya con el 0-0 no tenía ideas, tras el gol académico el desconcierto fue aún mayor. Y todo terminó de cerrase apenas tres minutos después del primer tanto. Racing recuperó, y se encontró con una defensa mal parada. Rojas intentó tirar un centro y le termino saliendo un golazo al segundo palo del arquero. Media Avellaneda festejó lo que ya se olía como un partido liquidado.

 

 

 

Atlético Tucumán fue un desconcierto luego del primer tanto. Racing se lo hizo saber con el segundo y Chancalay casi marca el tercero, pero el palo se lo negó. Eugenio Mena fue el mejor jugador del visitante, solido en defensa y un arma fundamental en ofensiva.

Echeverría pitó el final y Gago y compañía, con puño cerrado, festejaron su primera victoria en el banco de La Academia.

Racing debía ganar para meterse en las zona de Copa Sudamericana. Con esta victoria superó por un punto al Defensa y Justicia de Beccacece que lo había superado parcialmente con su victoria el día de ayer. La próxima parada será ante Colón en el Cilindro, y será otra final más de las 5 que tiene La Acadé si quiere jugar en un certamen internacional el año que viene.