Tras el partido de vuelta en el estadio Manuel Murillo Toro por la Copa Aguila 2019, Atlético Nacional logró un empate amargo que lo dejó fuera de competencia a pesar de mostrar una idea de juego más clara que el primer partido de la llave. Aunque se destacó al equipo en el primer tiempo e individualidades como las de Vladimir Hernández, Brayan Rovira y Daniel Bocanegra, nuestros lectores escogieron a Jarlan Barrera como el mejor jugador del equipo en esta jornada.

El volante llegó este semestre como incógnita al plantel tras su paso por Club Tigres de México y Rosario Central, equipos donde no mostró el manejo de juego y la lucidez que había mostrado en el Junior de Barranquilla. Sin embargo, el cuerpo técnico le ha dado todo el aval para ser una de las estrellas de Nacional, bajo el mando de Juan Carlos Osorio se ha destacado en todos los partidos jugados este semestre, participa directa o indirectamente en las jugadas de gol y por sus pies pasa el juego ofensivo verdolaga.

Hoy por hoy su titularidad es indiscutible, sin embargo encaja en cualquier tramo del partido según lo disponga el DT con su sistema rotativo, Jarlan ha sido un 7 o más en sus encuentros disputados y la figura que conecta los pases de mitad de cancha hacia adelante. Su visión de juego, calidad con el balón, explosividad en el último cuarto de cancha y la efectividad en pase gol e incluso anotando, son la razón de reconocer que es el cerebro de un equipo que todavía está trabajando para consolidad su idea en la cancha.

En el partido contra Tolima fue indispensable para encontrar espacios en medio de una defensa sólida y organizada, encaró y muchas veces generó el peligro necesario para ir deteriorando la barrera hasta encontrar el gol al minuto 40 que nace tras un gran pase de Barcos y remata el samario de borde externo, siendo determinante para irse al camerino con el empate que aseguraba penales hasta ese momento.

A pesar del bajón futbolístico que sufrió Nacional en el segundo tiempo y el empate que dejó por fuera al equipo paisa de este torneo, el 7 se destaca por seguir intentando atacar en las pocas ocasiones que Nacional tuvo el balón, aunque de una manera más desorganizada y con el tiempo en contra, lo cual se notó en el afán del equipo por remontar la serie y finalmente quedar eliminados.

No hay dudas que es "el diferente", el tipo de jugador que gusta en la institución y representa la idea de juego de Atlético Nacional, potenciado con la batuta de un cuerpo técnico experimentado, demostrando que esos jugadores que cada día son más escasos y generalmente llevan la 10 todavía existen y en este caso: "El balón siempre al 7".