Alberto de Jesús Benítez Flórez, o también llamado el Tigre, fue un delantero argentino, que se ganó el corazón de la hinchada caleña, ya que, durante su estancia en el conjunto azucarero, el argentino anotó un total de 136 goles, siendo el segundo goleador histórico del equipo, y solo siendo superado por Jorge Ramírez Gallego.

La romántica historia entre el artillero y el conjunto caleño inició en el año 1975, cuando el Deportivo Cali realizó la compra del delantero al equipo con el que debutó, Banfield de Argentina, por un valor de 5.000 dólares. En el Deportivo Cali, desde que llegó demostró su capacidad goleadora, a pesar de que siempre jugó como extremo izquierdo, ya que tenia la capacidad de pisar de buena manera el área y sus potentes remates llegaban fácilmente al fondo de la red.

El Tigre Benítez también fue uno de los artífices de la primera final de Copa Libertadores que tuvo el Deportivo Cali, al mando de Carlos Salvador Bilardo, y completando el tridente ofensivo con Ángel María Torres y Néstor Scotta, que fue una de las delanteras mas temidas en dicho torneo para el año 1978, logrando vencer equipos de gran trayectoria internacional.

También se destacó por marcarle en repetidas ocasiones al rival de patio, el América de Cali, ya que sus defensas no podían seguirle el paso a la potencia con la que jugaba el artillero. Una de sus especialidades, era desbordar por la banda izquierda, hasta llegar a última línea, y realizar centros perfectos, que sus compañeros podían concretar de buena manera. Rápido, potente, con una zurda prodigiosa y gran capacidad de remate, tanto de cabeza como con sus pies, reflejaban la magnífica técnica del Tigre.

El romance concluyó en el año 1982 cuando se despidió de los azucareros, llegando a la cifra de 293 partidos y 136 goles, con un promedio de un gol cada 193 minutos en cancha. Benítez falleció el 20 de septiembre de 2016 por complicaciones en su enfermedad, a la edad de 65 años. Siempre será recordado por la hinchada azucarera, como el flaco con pinta de rockero, que se ‘comía’ la banda izquierda, ese, el famoso Tigre Benítez.