Dicen que los sueños, sueños son. Sin embargo, en la NBA, la competición más mágica del mundo, los anhelos de los niños pueden llegar a hacerse realidad. Esto ocurrió con un pequeño nacido en la ciudad de Akron, y cuyo nombre se ha dado a conocer en todo el planeta.
Aquel chico de Ohio cumple 36 años y es el rey por méritos propios de la NBA. LeBron Raymone James sigue sumando primaveras como puntos en las canchas de todo el país. Durante una de las campañas más atípicas de la historia ha logrado que una de las cuestiones más improbables salga a escena. Nadie pensaba que alguien podría plantear que fuese mejor que Michael Jordan, una divinidad del baloncesto, el GOAT. No obstante, ‘King James’ ya le superó en puntos anotados, y se acerca a ritmo vertiginoso a la marca de otro de los mitos, Kareem Abdul-Jabbar y sus 38.387 puntos.
No es lo único que ha conseguido con su titánico esfuerzo, y es que ya suma un total de 4 anillos de campeón de la NBA, el último de ellos con una pandemia de por medio y una burbuja en Orlando. Allí pudo batir en la final a Miami Heat, aunque más que batir lo que hizo fue arrasar. Esto le sirvió para levantar un trofeo de MVP de las Finales una vez más, y ya son cuatro las que lo ha hecho.
El rey no solo sabe competir en Play-Off, época del calendario donde todas las defensas son más serias, sino que su mentalidad de ganador le impide darse por vencido en temporada regular, donde ha sido nombrado en otras cuatro ocasiones el mejor jugador de la liga. Por delante solo tiene a nombres como Russell, Jordan (5 cada uno) y Abdul-Jabbar (6), con lo que no resulta imposible pensar en LeBron como el que más tenga, y eso que lleva desde la campaña 2012-2013 sin serlo, pero con dos anillos ganados desde entonces.
‘The Kid from Akron’, como suele lucir en sus prendas en diversas ocasiones, fue nombrado ROY en el 2004, un presagio de lo que iba a ser. Un ciclón que pasaría por la liga destrozando récord tras récord, con una dedicación en cuerpo y alma al baloncesto. Su estado físico es más que envidiable, pues los rumores indican que gasta algo más de un millón de dólares en cuidar su cuerpo ante posibles lesiones, una de las claves de su trayectoria. Baños en hielo, ‘Taco Tuesday’ y una copa de vino para cenar mientras disfruta de un encuentro de la NFL son un ‘must’ en el día a día de LeBron James.
La leyenda aún no está completa debido a que las estrellas alcanzan su cénit una vez retirados y se observa con una perspectiva lo que han conseguido, y sin duda que el 23 de los Lakers estará en el olimpo que merece. Pero no solo será recordado como deportista de élite, ya que su compromiso con las clases sociales menos favorecidas es incuestionable. Su proyecto ‘I Promise’ sigue creciendo y da la oportunidad a cientos de niños de su ciudad natal a poder estudiar. Es por esto que ‘es más que un atleta’, otro de sus lemas más famosos y del que se puede sentir más orgulloso.
La vida de LeBron James no se entiende sin el baloncesto, y el baloncesto no se entiende sin LeBron James. Es una relación de 18 años que vive uno de sus momentos más intensos, con una celebración del anillo muy reciente y muchos acontecimientos de una enorme envergadura aún por delante. Quién sabe si dentro de poco será el máximo anotador, si ganará otro campeonato, o si compartirá vestuario con su hijo Bronnie en la NBA. Este último es uno de los sueños de LeBron, y ya hemos visto que, a pesar de que los sueños, sueños son, hay veces que se cumplen.