Sonríen los aficionados de Brooklyn Nets, pero mucho más sonríen los de Golden State Warriors, y la razón no es otra que el regreso a las canchas de Kyrie Irving y de Klay Thompson, dos de las piezas capitales de cada equipo. Se trata de dos historias completamente diferentes, pues mientras el base pondría punto y final a un culebrón que se ha alargado demasiado, el escolta por su parte conseguiría vencer un calvario terrible con las lesiones.
941 días después
Parece que se acabó la espera, los niños sonríen, Steve Kerr celebra y Curry da saltos de alegría, por fin regresa la otra mitad de los “Splash Brothers”, vuelve Klay Thompson. Afirma Adrian Wojnawoski (ESPN), que los Warriors se muestran confiados sobre que el escolta pueda regresar la madrugada del domingo al lunes, donde el conjunto de San Francisco se mide a Cleveland.
Hay que remontarse hasta 2019 para ver al jugador de ahora 31 años en un partido oficial, concretamente a ese sexto partido de las Finales, con los Warriors midiéndose frente a los Toronto Raptors en un encuentro donde los de Canadá consiguieron el anillo. Allí Klay sufrió una rotura en el ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda, una de las peores lesiones para este tipo de jugadores
El esfuerzo psicológico de Thompson no fue nada sencillo, y es que cuando parecía que por fin dejaba atrás la pesadilla, lesión en el tendón de Aquiles en el verano de 2020, lo que le mantiene hasta el día de hoy en recuperación, sumando un total de más de dos años y casi siete meses donde el estadounidense no ha dejado de trabajar y de esforzarse al máximo para acompañar a los suyos, y donde los Warriors perdieron la hegemonía que tenían hasta el momento.
Habrá perdido facultades Klay y le costará sin duda recuperar ese tono físico tan necesario para la NBA, pero lo que parece que no se le escapa es su gran capacidad para tirar de tres, uno de sus mayores atributos y el aspecto por el que, junto con su defensa, más ha destacado. Se le pudo ver el otro día en el calentamiento como anotaba 24 triples seguidos, casi nada.
Victoria parcial contra las vacunas
El otro gran regreso no es otro que el de Kyrie Irving, con bastante menos dramatismo pero con una gran historia detrás, y lo que es peor, mucha polémica. El base norteamericano ha sido desde principio de la pandemia un fiel negacionista de muchos de los aspectos relacionados con el covid, la pandemia y las vacunas, lo que le ha llevado a no vacunarse y a no poder disputar los partidos en Nueva York.
Los Nets decidieron apartarle, con el mánager general y el propietario del equipo orgullosos de su situación, sin embargo el nivel del equipo ha obligado al club a dar media vuelta en sus decisiones y permitir la entrada en la dinámica del grupo a un jugador tan importante como es Irving.
Van segundos en el Este con un partido de diferencia sobre Chicago, sin embargo el equipo está acusando la falta de creatividad y está abusando de un Kevin Durant que promedia más de 37 minutos con 33 años. Joe Tsai, propietario del equipo, ha afirmado que lo que quiere es ganar el campeonato y ser práctico, por lo que la entrada de Kyrie se antoja fundamental para tal objetivo, pudiendo volver a conformar uno de los Big Threes más temidos junto con Durant y Harden.
No ha sido tampoco fácil el periodo desde la decisión hasta la práctica, y es que una vez que el base cumplió los protocolos sanitarios a mediados de diciembre dio positivo en una de las pruebas realizadas y tuvo que parar todo el proceso. Sin embargo, y ya con todos los obstáculos conseguidos será el miércoles el día elegido para que Kyrie Irving debute, 35 partidos tarde, con los Brooklyn Nets.