Llega la temporada de las clásicas más pavés y con ello el duelo de todos los años entre Tom Boonen y Fabian Cancellara, que este año no se podrá disfrutar. El belga se cayó en la primera etapa de la París-Niza y sufrió una luxación de la clavícula izquierda, lo que le apartará de la carretera algo más de un mes. No obstante y a pesar de la baja del corredor del Etixx, entre los dos suman 21 títulos en el Tour de Flandes, París-Roubaix y E3 Harelbeke. La primera cita del año será la E3 Harelbeke, que se celebrará el 27 de marzo. Tanto el Tour de Flandes como la París-Roubaix se disputarán en abril, la primera el cinco y la segunda el doce de ese mes.

Otra inoportuna lesión

Tom Boonen acumula ya dos años en blanco en estas clásicas nombradas anteriormente. Las lesiones le están impidiendo aumentar su palmarés. El belga no está teniendo suerte con las caídas y esta temporada volverá a perderse las tres grandes citas sobre el pavés. A pesar de estos malos años, el belga ostenta todos los récords en estas tres carreras. Suma en su palmarés cuatro París-Roubaix (2005, 2008, 2009 y 2012), tres Tour de Flandes (2005, 2006 y 2012) y cinco E3 Harelbeke (2004, 2005, 2006, 2007 y 2012).

El 2012 fue el mejor año en la vida del corredor belga. Boonen consiguió cuatro clásicas de Primavera (París-Roubaix, Tour de Flandes, Gante-Wevelgem y E3 Harelbeke). Estos han sido los últimos logros del ciclista del Etixx-Quick Step. La sequía dura ya tres años y por culpa de una nueva caída, estas pruebas tendrán que esperar hasta 2016 para ver al belga sobre sus carreteras.

Boonen ostenta el mayor número de títulos en las cuatro clásicas citadas. En París-Roubaix comparte dicho escalafón con su compatriota Roger de Vlaeminck. En el Tour de Flandes hasta seis corredores han vencido en tres ocasiones (Fabian Cancellara, Achiel Buysse, Fiorenzo Magni, Eric Leman, Johan Museeuw y el propio Boonen). En E3 Harelbeke, el belga es el máximo galardonado con cinco títulos. Por último, en la Gante-Wevelgem otros cuatro corredores igualan la cifra de Boonen de cuatro trofeos: Mario Cipollini, Eddy Merckx, Rik Van Looy y Robert Van Eenaeme.

Con la mira en Flandes

El ciclista suizo defiende el título conseguido en 2013 y 2014 en el Tour de Flandes. En la presente edición, Cancellara tendrá un rival menos, ya que Boonen causará baja por lesión. En 2015, el helvético ya suma una victoria, la conseguida en el Tour de Omán, en una jornada loca. Además de centrar la mirada en Flandes, dónde buscará su cuarto título, tras los cosechados en 2010, 2013 y 2014, Cancellara también tratará de pelear por la victoria en la París-Roubaix y en E3 Harelbeke. En su palmarés cuenta con tres París-Roubaix (2006, 2010 y 2013) y otras tres E3 Harelbeke (2010, 2011 y 2013).

Foto: Bikerace

En 2014, estuvo cerca de repetir los éxitos en París-Roubaix y Tour de Flandes, aunque finalmente solo pudo reafirmar su título en Flandes y subir al tercer cajón del podio en Roubaix. El 2013 fue su mejor temporada en las clásicas de Primavera. Consiguió subir a los más alto en las tres grandes conocidas por todos los amantes del ciclismo. A su palmarés se le une la Milan-San Remo de 2008.

Fabian Cancellara se encuentra a una victoria en el Tour de Flandes de convertirse en el jugador más galardonado en la prueba belga. Acabaría con la historia de otros cinco corredores, que actualmente tienen tres títulos en esa prueba, al igual que el corredor helvético.

El duelo

Hasta en cinco ocasiones se ha repetido un enfrentamiento por la victoria entre Tom Boonen y Fabian Cancellara. De momento, el vencedor de dichos duelos es el suizo, que se ha llevado tres de ellos. El primero data de 2006 en París-Roubaix, dónde el corredor suizo se imponía al belga, que se tomaría la revancha en esa misma prueba en 2008. El mismo caso ocurría en la E3 Harelbeke, cuando en 2007 Boonen vencía por delante del helvético. En 2010, Cancellara le pagaría con la misma moneda. Por su parte, en el Tour de Flandes el vencedor es Cancellara, que en 2010 le arrebató el título a Boonen.

El ataque de Fabian Cancellara a Boonen en el Tour de Flandes de 2010 es uno de los grandes momentos del ciclismo moderno. El suizo atacó en un tramo de pavés sentado, dejando completamente roto a su rival, que a falta de 15 km para la meta no pudo reponerse. Fue una de las muestras de magia del helvético en este tipo de carreras.