Tras ser unos de los equipos que más activos estuvo en el mercado, y tras ser una de las futuras de las sensaciones de la Premier League con contrataciones como Benteke o Townsend, entre otros. El equipo no encuentra la formula posible para lograr buenos y fructíferos resultados.

Aparentemente, tan solo viendo nombres como ya los nombrados anteriormente además de Zaha, Cabaye, Wickham, Mandanda y compañía, da la sensación de ser un equipo apetecible de ver, ya que parece un equipo fiable, con calidad, muy compacto y con mucho gol.

Y en todo esto solo hay una cosa certera, el equipo es el quinto conjunto con más goles a favor (21 tantos), para ello invirtieron una gran suma de dinero (30 millones concretamente) por el delantero belga, Christian Benteke, máximo goleador del equipo con cinco tantos. Sin embargo, es el segundo equipo más goleado con 26 tantos en contra, en tan solo 13 jornadas, estando por detrás del Hull City.

Benteke, el suspiro del Crystal Palace, fuente: Premier League

La defensa del Crystal Palace, parece estar más interesada en ir al ataque que en defender, ya que tanto Dann como Tomkins, ambos llevan 3 goles siendo los segundos goleadores del equipo, esto da muestras de ser un equipo poderoso en el juego aéreo, pero luego en defensa está situación cambia. Y esto es un problema, que tu defensa sea más goleadora que tus extremos es algo inverosímil. Y el segundo contratiempo de esto es que nadie atiende las necesidades defensivas, problema de Pardew, ya que es el encargado de situar correctamente a la defensa y al equipo. 

El equipo genera peligro, es lo único positivo. Cuenta con Cabaye el artífice en la sala de máquinas, encargado de filtrar balones por bandas hacia Zaha o Townsend, o enviar en largo para que Benteke amortigue, controle o simplemente deje de cara el balón para un compañero. Esa idea está clara y funciona, de ahí que lleven 21 goles a favor, ya que tener un hombre tan poderoso aéreo y físicamente, como el delantero belga te aporta soluciones y variantes.

Pero sin embargo, el equipo carece de ganas, de ambición, pero sobre todo de picardía. Un equipo tras empezar ganando 0-1, posteriormente ir perdiendo 3-1 y conseguir revertir el marcador hasta el 3-4 hasta el minuto 90, era un partido para sacar grandes conclusiones y alabar la actitud de los chicos. No obstante, en el minuto de descuento no se puede conceder dos goles en dos minutos, ya que aquí se refleja la situación del equipo. Un conjunto poco inteligente, poco pillo y con una gran irregularidad. El equipo da la sensación de romperse siempre en las segundas partes, en torno al minuto 75 de juego debido probablemente a la mal condición física y sobre todo a la mala concentración del equipo. 

Dura derrota del Palace en Gales, fuente: Premier League.

Alan Pardew tiene mucho que mejorar, tan solo se encuentran en la jornada trece, pero cada vez más es más difícil conseguir los tres puntos. La situación es complicada ya que tras empezar la liga con dos derrotas y un empate el equipo estuvo cinco jornadas sin perder, pero tras la dolorosa derrota en casa contra el West Ham el equipo ha encadenado seis derrotas. La única solución que tiene el equipo está en el banquillo, y se trata de Pardew, el encargado de corregir tácticamente al equipo sobre todo aclarar a su defensa los movimientos, y a sus centrocampistas y extremos corregir la forma de basculación y repliegue.

Pardew tiene ante si un gran reto, fuente: Getty images.

Puliendo estos pequeños detalles creará un gran bloque, compacto, férreo y sin fisuras, un equipo con una rápida elaboración de juego y con mucho. Materia hay de sobra y seguro que la situación cambiará. Y el momento para revertir esta situación llega dentro de cuatro días, un partido muy decisivo en casa ante el Southampton, un gran conjunto que viene de ganar al Everton.  

Crystal Palace, fuente: Premier League.

La afición de los Eagles ansían una victoria que cambie esta situación, y seguro que tanto Pardew como los suyos harán todo lo posible para conseguirlo. 

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Sobre el autor
Jose Barrabino
segundo de Bachillerato y futuro periodista deportivo. Apasionado de la Serie A y Premier, fanático del Chelsea en Inglaterra y de Italia en general.