Si hay algo claro desde los orígenes del fútbol es que este deporte no deja de evolucionar. No tan sólo el número de jugadores, las dimensiones del campo de juego, las normas que rigen los partidos o de la asistencia a los estadios. Esta vez se trata de otro de los detalles que han evolucionado a lo largo de los años y se trata de las equipaciones de fútbol.

Siglo XIX

Cuando se inventó el fútbol en las escuelas secundarias y universidades de Inglaterra a mediados del siglo XIX, los jugadores utilizaban como indumentaria para jugar al fútbol lo primero que tenían a mano.

Cuando se comenzaron a realizar las primeras competiciones de fútbol, los equipos para distinguirse entre sí en los partidos de fútbol no utilizaban una indumentaria como estamos acostumbrados hoy en día. Los equipos se distinguían por la utilización de gorras, bufandas o cintas.

La primera referencia documentada a los colores de los diferentes equipos se encuentra en las Reglas de Sheffield FC que datan de 1857, que decía que cada jugador debía de ponerse una gorra de franela azul y de rojo oscuro, para ser usado un color por cada lado.

El 26 de diciembre de 1860, los dos equipos de la ciudad inglesa de Sheffield, el Sheffield United y el Hallam, disputaron el considerado como primer partido de fútbol oficial de la historia con la regla de vestimentas anteriormente mencionada.

Durante los primeros años, las equipaciones de fútbol se basaban principalmente en una camisa de mangas largas, unos pantalones por debajo de las rodillas que se unían con unos calcetines largos o medias y unas botas de fútbol negras de cuero. Los porteros solían llevar gorras para el sol además de todo lo mencionado anteriormente.

Ya con la creación de la Federación inglesa, la FA Cup Inglesa en la temporada 1871-1872 se exigía que todos los equipos participantes jugaran con las reglas de la FA. Una de sus reglas era que los jugadores de un equipo se distingan claramente de los jugadores del otro equipo. Para ello, cada club debía de tener un uniforme distinto. Es por ello que los primeros uniformes en los equipos de fútbol comenzaron a aparecer alrededor de 1870. Los colores utilizados por los equipos de Inglaterra eran a menudo los de las escuelas públicas y los clubes deportivos dependientes de estas escuelas.

Foto: FIFA.com
Foto: FIFA.com

Principios del siglo XX

Con la llegada de la industria, se cambiaron los materiales que empezaron a utilizarse para elaborar los atuendos. El algodón da paso a telas sintéticas, más ligeras, transpirables y cómodas.

Además de estos cambios, las camisetas varían los colores para irse adaptando a los de cada equipo e incluso se empezaron a ver camisetas con manga corta, nunca antes visto. Es por ello que los uniformes ya empezaron a asemejarse a las actuales. Se implantó el pantalón corto con las medias. Por otra parte, ya eran más comunes las botas con tacos y las espinilleras que eran usadas por todos. Durante esta primera mitad del siglo XX, muchos equipos comenzaron a usar estampados con rayas y varios colores, además ya se empezaron a ver escudos en las camisetas y equipaciones de fútbol con serigrafía para identificar a cada jugador con su número.

Las camisetas de los equipos de fútbol solían tener cuerdas y botones en los cuellos para que fueran un poco más cómodas y para no agobiar a los jugadores.

Años 50

En los años 50 las camisetas dejan de llevar los clásicos cuellos que tienen las camisas de botones. En su lugar, se hacen cuellos de pico, más fáciles de llevar y sin que estorbe la solapa. Aunque no solo cambian las camisetas, pues las botas también empiezan a cambiar su diseño. En lugar de las clásicas botas por encima del tobillo, se empiezan a fabricar con un diseño parecido al actual, dejando libres los tobillos. Además, los primeros tacos intercambiables empiezan a sustituir a los fijos, lo que hace que se conviertan en muy poco tiempo en artículos muy populares y usados por los jugadores.

Foto: RTVE.es
Foto: RTVE.es

Aparición de las marcas

Actualmente es impensable que un equipo no tenga un contrato firmado con una marca deportiva para que diseñe sus uniformes y material para entrenar, pero en la época era una auténtica novedad la inclusión de las marcas en la ropa deportiva. Otro elemento que apareció fue la publicidad en las camisetas. Los grandes equipos empezaron a llevar los distintivos de todo tipo, aparte del símbolo o logotipo de la marca que les vestía

En los años 70 se produjo un gran cambio, las telas sintéticas llegaron al deporte, por lo que las equipaciones de fútbol se volvieron más cómodas y menos pesadas. Se empezaron a usar los cuellos de pico, más usuales en la actualidad junto a los cuellos redondos.

Durante los años 80 se vivió el auge de las marcas deportivas en el fútbol, todas comenzaron a colaborar con los equipos y lo símbolos de estas marcas ya aparecían en las camisetas. Esto esta normalizado ahora, pero en esos tiempos era una novedad que fue creciendo año tras año.

En los años 90 se produjeron los avances en diseño, ya no se fabricaban camisetas clásicas con rayas o lisas, sino que los diseños incluían estampados, combinaciones de rayas, símbolos y detalles identificadores de la marca. La publicidad en el uniforme se asentó como principal fuente de ingresos de los clubes, ya que aportaba mucho dinero a las arcas de los equipos.

Foto: Todocoleccion.net
Foto: Todocoleccion.net

Actualmente

En la actualidad, gracias a que se han empleado nuevos métodos y se han utilizado nuevos materiales gracias a maquinarias punteras, se ha facilitado la fabricación de nuevos tipos de equipaciones deportivas. Las grandes marcas han ido creando camisetas con nuevas tecnologías para los grandes equipos de todo el mundo y han llegado a diseñar uniformes adaptados al cuerpo de cada jugador de un equipo. Un ejemplo claro es la marca que patrocina y viste al F.C. Barcelona que hace camisetas personalizadas a cada miembro de la plantilla, adaptadas a sus figuras después de realizar escáneres 3D a sus cuerpos. Otras tecnologías son Dri-fit o Tech-Fit que se caracterizan por la compresión de la camiseta para la mejora de la acción de los músculos, la absorción de la humedad del cuerpo para que la tela la evapore más rápidamente.