México 1970, del autoritarismo a la alegría

El primer Mundial para la zona de la Confederación de Norteamérica, Centroamérica y el Caribe de Fútbol (CONCACAF), fue en uno de los países más icónicos y exóticos en ese momento del planeta con sus culturas prehispánicas: Maya y Azteca, la Copa del Mundo llegaba a todo el globo terráqueo con las primeras transmisiones en directo a color vía satélite, y donde tambien se descubriría que México atravesaba por uno de los cánceres que tenía en ese momento la sociedad a nivel mundial, la dictadura y el autoritarismo, dictadura de un partido político en el gobierno central y federal, así transcurrió México 1970 entre la represión y la alegría del fútbol con una selección anfitriona cálida, el partido del siglo entre Alemania e Italia, la decepción del campeón defensor Inglaterra por sus actitudes extra cancha y una Brasil con el Jogo Bonito del 'O Rei Pelé' que se coronaron en el nuevo e icónico estadio Azteca.

Para la Copa del Mundo de México 1970, se inscribieron 75 selecciones buscando 14 boletos con México e Inglaterra automáticamente clasificados, el boicot africano al Mundial de 1966 dio resultado y en esta ocasión la FIFA les otorgó un boleto directo, siendo Marruecos el afortunado en ganarlo y convirtiéndose en el segundo equipo africano en jugar un Mundial, despues de que Egipto lo hiciera en Italia 1934. En las eliminatorias de CONCACAF sin embargo, sucedería un incidente que acabó en una guerra, la tensión política que había entre El Salvador y Honduras empeoró ante los disturbios vividos durante el partido las selecciones de dichos países jugaron en la eliminatoria lo que ocasionó que llegaran a las armas, la guerra duró 4 días y es conocida como "la guerra del fútbol", ya que realmente el partido fue la gota que derramó el vaso, fallecieron alrededor de 3000 personas en la guerra. Ya en el terreno futbolístico, ambas selecciones tuvieron que jugar un desempate en el estadio Azteca el cual ganó El Salvador.

En Asia, la sorpresa de 1966, Corea del Norte se negó a jugar contra Israel quedando descalificado en el proceso. Las grandes ausencias al Mundial de México fueron Francia, Portugal, Hungría, Argentina y España (estos dos últimos países por problemas de política referente a dictaduras en sus gobiernos).

En México se construyó como parte de la candidatura el estadio Azteca para albergar el Mundial, así como el estadio Cuauhtémoc en Puebla, el estadio Nou Camp en León mientras que el estadio Jalisco de Guadalajara fue ampliado, el estadio Luis Dosal (hoy estadio Nemesio Diez) de Toluca prácticamente no sufrió cambios para el Mundial. Entre los equipos europeos hubo molestia, ya que los partidos para coincidir con el horario televisivo de Europa, se jugarían a mediodía y en la tarde, sumados a la altitud, las selecciones llegaron con más tiempo que de costumbre a México para aclimatarse lo mejor posible.

Una gran controversia se había desatado durante el proceso de la candidatura debido a que México ya había sido electo en 1963 sede de los Juegos Olímpicos de 1968. La FIFA junto con el Comité Olímpico Internacional (COI) analizaron si organizar dos eventos de dicha magnitud en un lapso de dos años no sería perjudicial para la organización de sus respectivas justas.

Sin embargo el máximo organismo del fútbol mundial llegó a la conclusión de que la infraestructura que heredaría la Olimpiada de la Ciudad de México de 1968 iba a ser benéfica para la organización del evento, este hecho aunado a que el comité organizador presentó la maqueta del estadio Azteca aunque quedó entre dicho la estabilidad política y económica de la nación mexicana, ya que en ese momento la balanza no estaba a su favor.

México estaba viviendo en 1970 su primera fuerte devaluación económica frente al dólar norteamericano, además de las divisas europeas y asiáticas, consecuencia de las elecciones para el nuevo presidente de la República Mexicana, aunado a la corrupción y el comienzo de la llamada 'Guerra Sucia', la cual llevó a uno de los primeros episodios negros de la nación Mexica en la era moderna, la matanza de estudiantes de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y del Instituto Politécnico Nacional (IPN), además de miembros de sindicatos y miembros de la sociedad civil, el 2 de Octubre de 1968, días previos a la inauguración de los Juegos Olímpicos de México 1968. El presidente en turno Gustavo Díaz Ordaz y su partido político en el poder, el PRI (Partido Revolucionario Institucional), quienes encabezaban una dictadura partidista en México, son señalados de ser los autores intelectuales y materiales de la matanza de Octubre de 1968, tras un mitin en la explanada central de la urbanización y unidad habitacional de la colonia Tlatelolco en la Ciudad de México.

Estos hechos fueron considerados por los órganos deportivos internacionales (FIFA y COI) y hasta por la misma ONU, como actos de barbarie y crímenes de lesa humanidad, por lo cual la candidatura de la Copa del Mundo de 1970 estuvo en riesgo, siendo Guillermo Cañedo presidente de la Federación Mexicana de Fútbol (FMF) y el presidente de la televisora, Telesistema Mexicano 'Televisa' (televisora oficial de las transmisiones del Mundial para FIFA), Emilio Azcárraga Milmo, (ambos miembros del comité organizador) quienes se encargarían de convencer a FIFA de no retirarles la sede del Mundial, que también buscaban por parte de la misma CONCACAF, EE.UU. y otros miembros de la Confederación Sudamericana de Fútbol, CONMEBOL: Argentina y Colombia.

Durante la inauguración del Mundial en el mítico estadio Azteca, fue opacada por una rechifla y un abucheo al unísono por parte del público nacional e internacional al momento que el mismo presidente Díaz Ordaz declaraba inaugurada la Copa del Mundo México de 1970 ante los ojos del mundo. La vox populi le gritaba al mandatario frases como: "¡Chango, bájate de la penca!", mientras daba su discurso inaugural, una lluvia de insultos y abucheos en diferentes idiomas se escucharon desde las gradas del llamado "Coloso de Santa Úrsula" (sobrenombre del estadio Azteca, por su ubicación en la localidad que se encuentra en la Ciudad de México). 105 mil personas buscaron una catarsis por lo acontecido el 2 de octubre de 1968, el mismo Gustavo Díaz Ordaz quien no era fanático al fútbol, no volvió a aparecer en público durante la justa mundialista, según sus asesores, FIFA pidió que "no se presentara más el presidente en los estadios, para no generar polémica" durante la realización del Mundial.

El presidente de la República Mexicana accedió, debido a que la derrama económica por turismo sería millonaria para el gobierno central y federal, asimismo se buscaba bajar la inflación que había generado la primera fuerte devaluación que sufría el peso mexicano en esos momentos. Díaz Ordaz solo apareció de nueva cuenta en la final del Mundial para entregar la Copa Jules Rimet, al nuevo Campeón del Mundo, Brasil.

Historias del Mundial

Este fue el primer Mundial transmitido por televisión a color a todo el mundo vía satelital con la nueva tecnología de vídeo y grabación 'Technicolor', que empleó la televisora mexicana Telesistema Mexicano 'Televisa'. También este fue el primer Mundial donde se utilizarían las tarjetas para amonestar y expulsar jugadores como propuesta del inglés y leyenda arbitral Ken Aston, para que el público y demás jugadores llevaran el control, el primer jugador que vio la tarjeta amarilla fue el soviético Asatiani en el partido inaugural ante México, la tarjeta roja esperaría 4 años para ser mostrada en una Copa del Mundo, ya que no hubo expulsados en México 70, así mismo este fue el primer Mundial en el que se permitía sustituir jugadores durante el partido, permitiéndose dos por encuentro, el primer cambio también fue soviético, Serebryianov saliendo de cambio por Puzach.

Adidas y el debut de los balones oficiales, la marca se convierte en el sponsor técnico y deportivo de FIFA

El primero fue la inclusión de la marca deportiva alemana Adidas como principal patrocinante de la FIFA, la cual incluía la mayor parte de las selecciones nacionales, incluyendo a la anfitriona México, además de la indumentaria de los árbitros y la ropa casual de los directivos y dirigentes de FIFA.

Este Mundial fue primero en el que la firma Adidas producía un balón con caracteristicas peculiares y tecnología, situación que permanece hasta nuestros días. El primer balón fue llamado 'Telstar', hecho de cuero con 32 piezas, pentágonos negros y hexágonos blancos pensando en ayudar al espectador en televisión a distinguir el esférico, el diseño que hoy es el tradicional al referirse a una pelota de fútbol. Dicho diseño se conservó para el siguiente Mundial de Alemania 1974.

Juanito, la segunda mascota de la historia en Mundiales con polémica

El personaje representaba a un niño mexicano regordete, con un sombrero tradicional y la casaca de la selección de fútbol de México. El nombre 'Juanito' es un diminutivo de Juan, un nombre muy común en los países de habla hispana.

La polémica comenzó cuando se exhibía a Juanito, mostrando una apariencia de obesidad, contrario a lo que representa al deporte y al fútbol, FIFA no vio con buenos ojos en un principio a la mascota, considerando una posible mala imagen, pero Guillermo Cañedo, presidente del comité organizador del Mundial y de la Federación Mexicana de Fútbol, se encargo de convencer a los directivos de FIFA.

Juanito fue creado por el publicista Juan González Martínez, quien trabajaba en un agencia mexicana de publicidad del entonces presidente del equipo mexicano de primera división, Atlante, Fernando González.

Pico, la mascota hippie que quedó descartada por "revolucionaria"

El Comité Organizador se dio a la tarea de crear a su mascota y para ello eligió al famoso diseñador estadounidense Lance Wayman, uno de los artífices de la identidad gráfica de los Juegos Olímpicos de México 1968, y creador tanto del logo del Metro de la Ciudad de México, como de los íconos de las estaciones de sus primeras líneas.

El resultado fue 'Pico', un águila ataviada con el uniforme de la Selección Mexicana, y surge de un huevo con forma de balón.

Su actitud desparpajada y aire de modernidad en cierta forma seguían la línea visual trazada desde las Olimpiadas de México 68. La imagen de Pico se añadió a la papelería oficial y publicidad relacionada con el Campeonato Mundial de México 1970.

Pico y Juanito eran diametralmente opuestos. Mientras que el segundo apelaba al estereotipo con el que aún identificaban a México en el mundo, Pico se desmarcaba del ambiente campirano y apuntaba hacia el 'México Contemporáneo', donde la cultura hippie con el cabello largo, la psicodelía, el rock y la rebeldía comenzaban a permear en varios segmentos de la población mexicana, asimismo Pico no gustaría como imagen al gobierno mexicano que en ese entonces apostaba por lo tradicional y conservador.

El juego inaugural con ideología Socialista y Fascista

El partido inaugural tenía un cierto significado político para el presidente mexicano Gustavo Díaz Ordaz, quien 2 años atrás reprimió con brutal dureza las manifestaciones sociales y estudiantiles previo a los Juegos Olímpicos de México 1968, el rival de México era la Unión Soviética, un país que representaba la ideología socialista-comunista que tanto odiaba Díaz Ordaz, tras comulgar con la ideología de extrema derecha.

El Tri, en una de sus primeras importantes actuaciones en Mundiales

México empató a cero (0-0) con los soviéticos, en el segundo partido enfrentaron a El Salvador, un rival más de CONCACAF, que tuvo polémica incluida, ya que el arbitraje del egipcio Ali Kandil fue realmente de escándalo, el primer gol se generó en un tiro libre que Kandil primero había marcado favorable a El Salvador, con los salvadoreños despistados México cobró y en la jugada el 'Cabo' Valdivia anotó el primero, los salvadoreños reclamaron a Kandil y le patearon el balón en sus narices negándose a jugar, el medio tiempo aparentemente calmó las aguas pero Valdivia volvió a marcar, entonces los salvadoreños ante el mal arbitraje comenzaron a patear a los mexicanos hasta cansarse, México ganó 4-0.

Ante Bélgica, México ganó 1-0 con gol de penal del 'Halcón' Peña, los aztecas por primera vez pasaron la primera ronda pero quedaron segundos de grupo por diferencia de goles con la Unión Soviética, obligándolos a salir del Azteca para enfrentar a Italia en Toluca en cuartos, aunque 'La Calaca' González dio esperanzas al Tri con un gol al minuto 13, la squadra azurra remontó y dejó el marcador 4-1 para acabar con el sueño mexicano.

Los británicos, campeones defensores que decepcionaron al pueblo azteca

Inglaterra no hizo nuevos aficionados en su viaje a México, previo al Mundial durante una gira en Colombia, el capitán inglés Booby Moore fue acusado de robar un brazalete en la tienda del hotel donde se hospedaba el 'Equipo de la Rosa', lo que obligó a Moore a retrasarse para llegar a Guadalajara, donde jugaría Inglaterra.

El público de Guadalajara (mejor conocido, como los 'tapatíos') que había esperado a los ingleses con ansias pronto se decepcionaron de lo cerrado de los dirigidos por Sir Alf Ramsey que además era recordado por sus despectivas declaraciones respecto a la Selección Mexicana en 1966, la cosa se puso peor cuando los ingleses se habían traído su propia agua para beber desde el Reino Unido cuando llegaron a México, tomándolo como insulto. Ramsey se quejó amargamente de las instalaciones en las que tendría que entrenar y jugar Inglaterra además de la ciudad. Cuando perdieron su segundo juego de primera ronda ante Brasil, el público de Guadalajara en el estadio Jalisco festejó gritando al unísono "Inglaterra ya se va", dado que la derrota significaría que Inglaterra tendría que ir a León para jugar en cuartos.

En el tercer duelo ante Checoslovaquia, Inglaterra se vio forzada a cambiar de uniforme ya que los checos jugarían de blanco, en lugar de usar el tradicional uniforme rojo de visitante, Inglaterra consternado por el calor salió a jugar en un uniforme azul celeste que hicieron especialmente para México 70, Inglaterra ganó, pero tanto el entrenador y la TV se dieron cuenta del error de jugar de celeste al no distinguirse de manera clara, por lo que no volvieron a usarlo en el Mundial.

Cariocas y su Jogo Bonito

Brasil para este Mundial llegó con Pelé como su gran figura pero a su lado jugadores como Jairzinho, Rivelino, Carlos Alberto, Tostao, Gerson y Clodoaldo en la que muchos consideran la mejor equipo de la historia del fútbol.

Tras masacrar 4-1 a los checoslovacos, en el segundo duelo enfrentaron al campeón del mundo Inglaterra, en uno de los mejores partidos de esa Copa del Mundo jugado en el estadio Jalisco bajo intenso calor al ser jugado a medio día, el partido vio la llamada 'atajada del siglo' cuando Pelé remató de cabeza picado que en cualquier otra situación hubiera sido gol, Pelé incluso había iniciado el festejo pero el portero inglés Gordon Banks de manera increíble sacó el balón en la raya aún con el bote, provocando la ovación del público tapatío ante la tremenda atajada.

Brasil como fuese ganó en una gran jugada colectiva que Jairzinho culminó definiendo soberbiamente sobre la salida de Banks dándole la victoria a los amazónicos por 1-0, en un partido que continúo unos minutos más de lo esperado, ya que el árbitro israelí Abraham Klein había pitado el final pero nadie escuchó el silbatazo, continuando el partido unos momentos más. Brasil ganó el grupo 3 derrotando a Rumania.

Bombarderos germanos

En el grupo 4 que se jugaba en León, estaba iniciando a destacar por el conjunto de Alemania Federal un delantero de 24 años de edad que encontraba facilidad para dañar las defensas rivales: Gerd Müller.

El apodado "Bombardero" en tres partidos de la primera ronda anotó siete goles, encontrando la red en una ocasión ante Marruecos y anotando tripletes contra las selecciones de Bulgaria y Perú, dándole el grupo con marca perfecta a los germanos que para la ronda de cuartos de final se ganaron el derecho de quedarse en León pero además, les tocaba un rival al que querían cobrarle viejas deudas: Inglaterra. Una anécdota de la selección alemana es que al ir al hotel de concentración para ir a entrenar y de regreso, veterano de cuatro Mundiales Karl Heinz Schnellinger le pidió permiso al técnico Helmut Schon de ir corriendo detrás del camión a manera de acondicionamiento.

Revancha de la final del Mundial en 1966

La revancha de la final de 1966 que se dio en cuartos de final entre Inglaterra y Alemania fue uno solo de los épicos partidos que se vieron por canchas mexicanas en 1970, pero los ingleses sufrieron la baja previo al partido de Gordon Banks, que sufrió la coloquialmente llamada en México la "Venganza de Moctezuma", sufriendo una tremenda enfermedad estomacal que todavía hay quienes creen en Inglaterra que fue "envenenado" en el hotel de León y entonces sería el turno del arquero suplente Peter Moretti.

En la charla técnica Sir Alf Ramsey le dijo a sus dirigidos "los alemanes no nos ganan nunca, ni en el fútbol ni en la guerra han podido", y todo parecía verdad cuando Alan Mullery puso adelante al Equipo de la Rosa al minuto al 31 y Martin Peters a pase de Hurst (ambos anotaron en la final del 66) puso el 2-0 favorable a los ingleses al 49, sin embargo los teutones nunca se dieron por vencidos fieles a su tradición, y el 'Kaiser' Franz Beckenbauer acercó a los alemanes al 68 de larga distancia con un disparo raso, el mismo Beckenbauer más tarde diría que de haber estado Gordon Banks en el arco inglés eso no hubiera sido gol.

A ocho minutos del final, el veterano de cuatro Mundiales y capitán alemán Uwe Seeler remató de cabeza estando de espaldas a la portería un balón que salió bombeado y clareó a Bonetti para empatar el partido en uno de los mejores goles de cabeza anotados en un Mundial, forzando el tiempo extra, en el cual Gerd Muller puso cifras definitivas anotando su octavo gol en la Copa, la venganza se había consumado y Alemania por fin, había derrotado a Inglaterra.

Gordon Banks en el hotel de concentración se había dormido tras el segundo gol de Peters para reposar, pensando en que el juego estaba definido, pero cuando regresaron del estadio sus compañeros, Booby Moore le dio el resultado final ante la sorpresa de Banks.

El himno más largo del Mundial

Durante el duelo de cuartos de final en el Azteca entre Uruguay y la Unión Soviética, durante la ceremonia de los himnos y tras haber sido interpretado el himno soviético, el himno de Uruguay fue interpretado en su versión larga, mientras eso sucedió los soviéticos en algún momento creyeron que había terminado el himno y rompieron fila pero al darse cuenta que el himno continuaba, un par de jugadores soviéticos tuvieron que quedarse quietos en el centro de la cancha mientras acababa el himno en una curiosa anécdota. Tras el 0-0 en el tiempo regular y a tres minutos de terminar el tiempo extra, Víctor Espárrago anotó un gol polémico dado que parecía que antes del centro que rematara el uruguayo el balón había salido, pero el gol se mantuvo.

El partido del siglo XX

El 17 de junio se midieron en la cancha del Azteca dos de las potencias europeas, que sin imaginarlo, disputaron uno de los partidos más emotivos de la historia de los Mundiales. El Alemania vs Italia fue un cumulo de emociones y entrega total a lo largo de 120 minutos.

Italia se fue al frente en el marcador con gol de Roberto Boninsegna al minuto 8, pero los alemanes nunca se rindieron y empataron en tiempo agregado gracias a Karl-Heinz Schnellinger. Después llegó la legendaria prórroga, con un toma y daca de goles que finalmente favoreció a los azzurros.

El teutón Gerd Muller logró un doblete en los minutos 94 y 109, mientras que los italianos sellaron su espectacular victoria con tantos de Tarciso Burgnich, Luigi Riva y Gianni Rivera. Fue un partido histórico con la imagen imborrable de Franz Beckenbauer con el hombro inmovilizado; el ‘Kaiser’ salió a jugar con el brazo vendado y en clara desventaja física.

Gianni Rivera, (incompatible en la alineación con Sandro Mazzola, según el técnico Ferruccio Valcareggi), fue quien dio el pase a los italianos a la Final del inolvidable Mundial México 70. Eso ocurrió al minuto 111 de una dura batalla, después de goles a racimo en el tiempo extra, dos de ellos del ‘Bombardero’ Gerd Muller.

Fue una batalla épica ofrecida por dos colosos del fútbol, digna de un escenario mundialista. Italia venció 4-3, aunque la memoria recuerda más un choque de titanes entre teutones y azzurros.
En cuartos de final, los alemanes dejaron la piel para remontar una desventaja de dos goles y dejar fuera en tiempo extra a Inglaterra, su verdugo en la Final cuatro años antes en el estadio de Wembley en Londres.

Por su parte, Italia no tuvo problemas para terminar con las ilusiones mexicanas con un contundente 4-1. Alemania se presentó con leyendas como Franz Beckenbauer, Sepp Maier, Uwe Seeler y Gerd Müller, entre otros. Los italianos mandaron al campo a figuras como Luigi Riva Giacinto Facchetti Sandro Mazzola y Roberto Boninsegna, mientras dejaban en el banquillo a Dino Zoff.

El Coloso de Santa Úrsula tiene una placa conmemorativa sobre este partido con la siguiente frase: El Estadio Azteca, rinde homenaje a las selecciones de: Italia (4) y Alemania (3) protagonistas en el Mundial de 1970, del “Partido del Siglo”.

Pelé y compañía, campeones del mundo

Duelo de estilos se enfrentaban el 21 de junio en el estadio Azteca y bajo el aliento de más de cien mil personas. Por un lado, los cuatro fantásticos cariocas, por el otro, el catenaccio, la solidez defensiva, el oportunismo en el ataque y la posibilidad de ambos de darle a sus países la tan ansiada copa Jules Rimet, ya que, al ser campeones en dos oportunidades, quien triunfara se iba a quedar con el tradicional trofeo.

No hubo dudas en el transcurso del partido. Ganó por demolición 'la verdeamarelha' más allá de que en la primera etapa Pelé pondría la ventaja inicial y Boninsegna firmaría el empate. Ganó por demolición porque se encargó en los últimos veinte minutos gracias a Gerson, Jairzinho y Luiz Alberto de poner cifras definitivas y que la alegría fuera solo brasileña.

La Copa del Mundo México 1970 culminaría con gloria para el fútbol porque ganó el mejor de todos, aquel que arriesgó, aquel que goleó, aquel que gustó y aquel que puso todo el talento a disposición del público presente. El resultado fue lógico, la alegría brasileña, la copa Jules Rimet se despedia de los Mundiales y la cual fue para el conjunto 'verdeamarelho', con la que se quedaron "para siempre" en sus vitrinas y, más allá de que en el año de 1983 sería robada y fundida en dos kilos de oro para ser vendida, mientras que su sucesora, la actual Copa del Mundo de la FIFA, se hizo presente en la siguiente edición del Mundial en Alemania 1974, la cual sigue vigente a nuestros días.