Gabriel Jesus (São Paulo, Brasil, 3 de abril de 1997) tiene ante sí el mayor reto de su carrera, participar por primera vez en una Copa del Mundo. Con tan solo 21 años tendrá la responsabilidad de llevar el peso del ataque carioca junto a Neymar. A pesar de que actualmente la fortuna le sonríe, la vida del joven brasileño no ha sido nada sencilla.

Historia inspiradora

Corría el año 2014 cuando Brasil se preparaba para albergar el Mundial de fútbol. El país entero estaba entusiasmado y volcado con la mayor cita de fútbol que existe en todo el planeta. Un joven llamado Gabriel Jesus, que vivía en un barrio humilde como es el de San Pablo, se presentó voluntario para pintar las calles de su ciudad y poder mejorar la imagen de su país. Completamente descalzo y con una brocheta en mano, recorrió São Paulo para poder aportar su granito de arena a la Copa del Mundo. El sueño de este chico, como el de otros muchos, era poder jugar un Mundial alguna vez.

Por aquel entonces Gabriel Jesus ya formaba parte de la productiva cantera del Palmeiras, pero ni mucho menos podía esperar el futuro tan brillante que le esperaba. En la temporada 2014-2015 debutó con el primer equipo de Palmeiras, finalizando la campaña con un total de seis goles en veinte partidos. Gracias a sus buenas actuaciones, los grandes de Europa pusieron sus ojos en el joven delantero. Tras consagrase en la siguiente temporada con diecisiete tantos en sus botas y un campeonato liguero, el Manchester City se hizo con sus servicios.

Conquista de Manchester

El desembarco de Gabriel Jesus en la Premier League tuvo que esperar hasta enero de 2017, cuando debuto con la camiseta citizien en casa frente al Tottenham. Tras un inicio asombroso, con tres goles en tres partidos, el carioca cayó lesionado y estuvo nueve encuentros de baja. A pesar de ello, se recuperó para el tramo final de temporada, y siguió impresionando a propios y extraños con partidos realmente buenos. Sus primeros meses en Manchester acabaron con siete goles y cuatro asistencias en diez partidos.

En la presente campaña el rendimiento de Gabriel Jesus ha sido espectacular. Pese a la gran competencia que tienen en el equipo, con delanteros de la talla del Kun Agüero, el brasileño ha sabido ganarles la partida, y se ha convertido en un fijo en los esquemas de Pep Guardiola. El atacante de la Canarinha ha finalizado esta temporada disputado cuarenta y dos partidos con diecisiete goles y cinco asistencias, siendo uno de los grandes artífices de que el Manchester City haya conquistado la Premier League.

Juegos Olímpicos de Rio de Janeiro

El debut en competición oficial con la selección absoluta de Brasil llegó en el verano de 2016 gracias a los Juegos Olímpicos que se disputaron en su país natal. Gabriel tuvo una presencia importante en aquel campeonato, aportando tres goles en los seis partidos que disputó.

El nuevo Ronaldo Nazario

Se trata de dos futbolistas con características similares. Los dos son delanteros completos, con versatilidad para jugar en cualquier posición del ataque y siempre con una eficacia máxima. Al igual que Ronaldo, Gabriel Jesus poseen grandes recursos técnicos tanto para el regate como para la definición a portería, y tiene una visión del fútbol alegre, vertical y ofensiva. Además, tiende a asociarse con sus compañeros y a participar en el juego de equipo.

La propia leyenda carioca ha afirmado en varios medios de comunicación que Gabriel Jesus le recuerda a él cuando era joven. Un peso pesado de actual selección brasileña, como es Dani Alves que causará baja en el Mundial por lesión, también ha comparado a ambos futbolistas en varias ocasiones.

Aquel adolescente de un barrio humilde, que soñaba con triunfar con la selección de Brasil y jugar un Mundial de fútbol mientras pintaba las calles de su país, ha conseguido cumplir su sueño. Gabriel ya es el presente y futuro futbolístico de la Canarinha.