Suecia vuelve a meterse en instancias definitorias. Desde la última vez han pasado 24 años, allí en los Estados Unidos. En ese momento la principal cualidad era el ataque y la generación de ahora se basa en la defensa, aprovechando al máximo la altura de sus protagonistas. Con la lista de convocados surgieron nombres de promeas que hoy en día son leyendas, como Henrik Larsson, Jesper Blomqvist y Patrick Andersson.

Henrik Larsson formó parte de la convocatoria

Había llegado el 19 de junio. El combinado sueco se encontraba en el grupo B junto a Senegal, Rusia y una poderosa Brasil. Aunque la situación inició comprometedora con la igualdad ante los senegaleses (2-2), determinación y anotaciones fueron las claves para que Suecia se repusiera ganando a Rusia (3-1). Cerró la primera fase enfrentando a la Canarinha (1-1), donde consiguió clasificar a los octavos de final sin perder un partido en la primea ronda.

Primera llave eliminatoria. La débil Araba Saudita había conseguido salir vivo de su grupo. Suecia era el claro candidato en este encuentro, y todo se desenvolvió con normalidad. El gol de Dahlin al inicio y el doblete de Kennet Andersson le dieron el pase a cuartos de final.

La última vez

Dos candidatos al título eran los protagonistas en una de las llaves de cuartos. Rumania, como el rival de Suecia en este Mundial de Rusia 2018, llegaba fuerte tras haber relegado al anfitrión al tercer puesto y ganarle a Argentina en octavos de final.

Corrían 77 minutos en el reloj y el colegiado pitó falta a favor de Suecia cerca de área rival. Mild y Schwarz se colocaron erguidos frente al balón previo a una notable jugada preparada. El segundo amagó y el primero colocó un pase por la derecha de la barrera para Brolin, quien remató y abrió el marcador.

Momento del tiro libre | Foto: Victor Hugo Morales
Momento del tiro libre | Foto: Victor Hugo Morales

Todo parecía favorable para Suecia, pero la valentía que tuvo Rumania en la fase de grupos apareció nuevamente. Salió a buscar la igualdad y la consiguió dos minutos antes del final. Un nuevo tiro libre. Hagi remató y tras una serie de rebotes, Raducioiu la cazó adentro del área y la mandó contra el fondo de la red. El partido se tornaba emocionante y el alargue era inminente. 

Nuevamente Raducioiu se convirtió en depredador y se inventó un remate a pocos minutos del final del primer tiempo agregado. Y al minuto 115, cuando San Francisco ya cantaba quien sería el semifinalista, apareció Kenneth Andersson con su habilidad aérea innata para igualar otra vez el marcador. Suecia se ponía en carrera y forzaba la tanda de penaltis. 

Momento justo del cabezazo de Andersson | Foto: Victor Hugo Morales
Momento justo del cabezazo de Andersson | Foto: Victor Hugo Morales

Los penaltis siempre son algo ilógico que puede darle alegría al peor equipo del mundo y tristeza a los mejores. La incertidumbre es un sentimiento que cualquier jugador profesional vive a flor de piel en el momento de patear desde los doce pasos.

Rumania Penal Penal Suecia
Tanda de penaltis entre Rumania y Suecia
Raducioiu Gol Erró Mild
Hagi Gol Gol Andersson
Lupescu Gol Gol Brolin
Petrescu Erró Gol Ingesson
Dumitrescu Gol Gol Nilsson
Belodedici Erró Gol Larsson

Esta vez, Suecia se impuso a pesar de iniciar abajo con el penal errado de Mild. Rumania se desinfló en los últimos y entregó una clasificación que se volvió histórica para los suecos a lo largo de los años. ¿Podría el combinado dirigido por Andersson igualar lo que hicieron sus héroes pasados? Aunque esta vez, en frente se encuentra una joven y renovada selección inglesa, la cual buscará con ganas la segunda Copa del Mundo.