El Bournemouth encara una nueva temporada en la Premier League con la inquietud característica en cuanto a la planificación deportiva se refiere. Acostumbra ser una entidad que acoge suele adquirir jugadores en forma de cesión y desembolsando dinero por aquellos que pueden ofrecer un rendimiento inmediato.
No es un equipo considerado por tener jugadores que sobresalgan y que permitan minimizar las carencias del equipo. De hecho, la virtud principal de los de Eddie Howe se basa en el poder del colectivo para afrontar las diversas situaciones que se le han presentado. Si hay que destacar a alguien, atendiendo a conocimiento del club y experiencia en el fútbol inglés, ese sería Callum Wilson.
El extremo permanece en el Bournemouth desde 2014 y es uno de las caras reconocidas del mismo. En su debut por aquel año, anotó veinte goles para ayudar a la institución en lo que significaría el ascenso a la Premier League. Acumula muchos partidos en la liga y eso le ha permitido aparecer en momentos cruciales en los que estaba en juego la salvación del equipo en la categoría. Ha experimentado un ligero descenso en su carrera cuando tuvo una lesión de larga duración en 2017. No obstante, en Bournemouth siguen disfrutando de un jugador veloz que puede adaptarse a diferentes posiciones del frente de ataque, desempeñándose en zonas que le sitúen en un costado o como referencia ofensiva.
La plantilla tiene una media de edad ligeramente superior a los 26 años, dato que refleja la juventud que atesoran numerosos futbolistas. Entre ellos resaltan los centrales Nathan Aké, el recién llegado este verano Diego Rico y el atacante ex del Liverpool Jordon Ibe. El primero es un defensa ágil en el corte y con capacidades óptimas para tener la pelota en los pies. El que fuera canterano del Chelsea, tras diferentes cesiones, ha conseguido asentarse en un proyecto que le permita crecer futbolísticamente. El español es un fichaje interesante haciendo referencia a sus últimas prestaciones. Ha sido una de las claves en el crecimiento del Leganés durante estos años. Con gran criterio para vencer disputas individuales, puede adaptarse a diferentes posiciones de la línea defensiva, pudiendo jugar tanto de central como de lateral izquierdo. Jordon Ibe busca dar el impulso necesario que se corresponda a sus notables apariciones en el Liverpool. Tiene argumentos para ello, siendo un jugador eléctrico con facilidad en el uno contra uno y resolutivo al pisar el área contraria.
Toda esta juventud se acentúa con la que puede ser una de las revelaciones esta temporada. Llegado en este mercado estival procedente del Sheffield United, David Brooks adquiere el cartel de futbolista a seguir durante este curso. El galés de 20 años se siente cómodo jugando en un rol de medio más adelantado, pudiendo jugar como interior o detrás de un punta al que poder nutrirle de balones.
Esta frescura de edades también se ve contrarrestada por la veteranía que presenta el conjunto cherrie, particularmente en dos sectores opuestos como son la portería y la delantera. Begovic y Boruc cuentan con una notable experiencia bajo los palos que les permite complementar y ayudar a la plantilla para mantener la calma en diferentes momentos de la temporada. De igual forma Defoe, todo un clásico del fútbol inglés que está dando los últimos pasos de su carrera, pero que sigue acostumbrando a marcar goles en situaciones de máxima urgencia.
El Bournemouth inicia otra temporada más en la élite profesional. A priori siempre se encuentra en las quinielas para pelear los puestos de descenso, pero los de Eddie Howe pretenden seguir en la misma línea ofrecida en los últimos años. Hacerse fuerte en el acogedor Vitality Stadium obteniendo resultados positivos y ser competitivos fuera del mismo. No han variado en exceso las piezas que componen su estructura básica, por lo que no es descartable que el Bournemouth concluya este curso de la misma forma que el anterior.