Los Wolves recibían al Arsenal de Mikel Arteta. Ambos clubes no pasaban por su mejor momento, nadando por la zona media-baja de la tabla. Los de Nuno llegaban con 23 puntos en 21 jornadas, notando la baja de Raúl Jiménez, el cual ya empezó a entrenar en el gimnasio tras su lesión justamente ante los Gunners el pasado 29 de noviembre. El Arsenal llegaba al encuentro con una buena racha sin perder en Premier desde el 19 de diciembre (desde aquella derrota ante el Everton, son 5 victorias y 2 empates en 7 partidos). 

Los Lobos han tapado la baja de Raúl Jiménez con Willian José, procedente de La Liga Santander. El brasileño estaría en el once titular frente al Arsenal. Un once curioso porque Nuno daba su voto de confianza a Kilman por el lateral izquierdo. Los Wolves salían con Rui Patrício; Semedo, Boly, Coady, Kilman; Neves, Moutinho; Adama, Podence, Neto; Willian José. 

Mientras, el conjunto dirigido por Mikel Arteta estuvo más activo en este período de traspasos. Llegaban cedidos Ødegaard y Mathew Ryan, guardameta del Brighton, y salían los jóvenes Saliba, Willock y Maitland-Niles cedidos mientras que Mustafi y Özil llegaban al Schalke y al Fenerbahçe gratis por la rescisión de su contrato. El noruego volvía a estar en el banquillo, al igual que Aubameyang, mientras que se producía un cambio de última hora al entrar Saka por Martinelli. Fue un día especial para Xhaka, puesto que cumplía su partido número 200 con la camiseta gunner. Así saltaba el Arsenal al terreno de juego: Leno; Bellerín, Holding, David Luiz, Cédric; Thomas, Xhaka; Saka, Smith-Rowe, Pépé; Lacazette. 

Bukayo Saka brilla en el primer tramo

El encuentro comenzó con un susto para los Wolves. Bukayo Saka estuvo a punto de marcar el primer tanto tras un balón largo que aprovechó el joven para estrellar el esférico en el palo cuando habían transcurrido 30 segundos de partido. El primer tramo del duelo estuvo caracterizado por el sosiego de Los Lobos. Así fue anulado lo que hubiese sido el primer gol del Arsenal en el 9' tras un excelente pase de Lacazette de cabeza que aprovechó Bukayo Saka. A la tercera fue la vencida para el joven inglés, pero el tanto fue invalidado por un previo fuera de juego del francés.

Saka tuvo mucho protagonismo en esa banda derecha al superar con facilidad a Kilman, teniendo hasta cuatro ocasiones en las que anotar el gol inicial. El propio Arsenal jugaba con esa tranquilidad debido al bajo estado anímico y físico de los Wolves, todo a raíz de la baja de Raúl Jiménez, el cual tenía una gran conexión con Adama. Esa dependencia se intentaba solventar con la llegada de Willian José, que no tuvo un gran protagonismo en el encuentro. 

Saka estuvo a punto de abrir la lata / Foto: Twitter @Arsenal
Saka estuvo a punto de abrir la lata / Foto: Twitter @Arsenal

Los Wolves despiertan

Cumplidos los primeros 20 minutos, Semedo le dio esa chispa que necesitaban los locales y Neto y Podence empezaron a deslumbrar con su magia por las bandas. No obstante, el Arsenal no bajó el listón y tuvo el segundo palo, esta vez de Nicolás Pépé tras una buena combinación que también acabó fuera de la red defendida por Rui Patrício. Minutos después, el marfileño fue el autor del primer tanto en el 32' tras una magistral jugada. Recupera el balón, y aunque tuvo fortuna en llevarse varios rechaces, se zafó de Semedo y batió con su pierna derecha al cancerbero portugués. 

La reacción de los locales fue enérgica, con ganas de volver a poner las tablas en el marcador, pero se encontraron a una sólida defensa gunner. Sin embargo, la primera parte finalizaba con una tarjeta roja. El Arsenal dejó un hueco clarísimo que estuvo a punto de aprovechar Willian José, pero el brasileño fue arrollado por su compatriota de selección David Luiz. De esta manera empataba Neves el encuentro desde los once metros, dando por finalizada la primera mitad. Ni Lacazette ni Willian José tuvieron oportunidades, puesto que fueron las bandas las que dominaron. Los arietes, eso sí, participaron en ambos tantos. Lacazette le devolvió a Pépé el balón mientras que Willian José provocó el penalti que materializó Rúben Neves. Tanto Pépé y Saka como Neto y Podence fueron los protagonistas de esta primera mitad. 

Pépé, autor del primer tanto del encuentro / Foto: Twitter @premierleague
Pépé, autor del primer tanto del encuentro / Foto: Twitter @premierleague

Misil Moutinho

Gabriel Magalhães entró en la segunda parte por Lacazette para suplir la expulsión de David Luiz. No obstante, se adelantaba definitivamente el Wolverhampton con un misil teledirigido de João Moutinho, que destrozó la escuadra de Leno en el 48'. En cuestión de minutos se le cambió el encuentro al Arsenal, de dominar el choque a ir por detrás en el marcador tras un descuido. El cambio de mentalidad de ambos clubes tras el empate fue el factor clave para cambiar las tornas del encuentro. 

Cumplida la primera hora de juego, Aubameyang volvía a pisar un terreno de juego desde el 18 de enero, sustituyendo a Pépé, autor del primer gol del partido. Sin embargo, la participación del gabonés en el juego no fue óptima, apenas tocando balón debido a la clara superioridad de los locales tras adelantarse en el marcador. Las malas noticias seguían llegando para Arteta. Segunda roja, esta vez de Leno, en una jugada absurda en la que el arquero despeja el esférico con la mano sin querer cuando se encontraba fuera del área. Rúnarsson sustituía a Thomas, por lo que el Wolverhampton tenía la oportunidad de seguir clavando la llaga en la herida del Arsenal, que cerró el encuentro con 9 jugadores. 

El islandés pudo salvar las distancias en lo que sería un asedio de los Wolves. Ataques sin cesar por las bandas con un Pedro Neto imperial que quería su gol, pero se topó con el propio Rúnarsson en dos ocasiones. Casi un 60% de posesión para Los Lobos, en contra de un Arsenal cuyo técnico tiene en su sangre la esencia de la posesión que tantas alegrías ha regalado al fútbol. 

Los Wolves llevaban sin ganar desde el 15 de diciembre / Foto: Twitter @Wolves
Los Wolves llevaban sin ganar desde el 15 de diciembre / Foto: Twitter @Wolves

Ambas partes se presentaron como dos partidos distintos. Una primera mitad en la que Saka y el Arsenal dominaron hasta la roja de David Luiz y una segunda en la que la superioridad de los Wolves puso nervioso a los Gunners. Si el Arsenal hubiese ganado se hubiera colocado en la sexta plaza, mientras que esta derrota los mantiene en la mitad de la tabla, cortando su racha sin perder desde hace un mes y medio. Los Wolves ascienden a la decimotercera posición gracias al error de David Luiz y al cañonazo de Moutinho.