Una goleada histórica, un campeón en apuros y unos martillos europeos

La Premier League no descansa, y esta vez fue el turno de la 22º jornada del calendario de la temporada 2020/21. Esto nos dio la ocasión de ver partidos históricos, o duelos por seguir en la cabeza de la clasificación.

Entre semana para ver goleadas

El primer partido del día fue Sheffield United contra West Bromwich Albion, en Bramall Lane. Los locales, ansiosos por alcanzar la victoria y asomar la cabeza desde el pozo que es la última posición, comenzaron mal, muy mal. Phillips adelantó al conjunto de Sam Allardyce, sin embargo, Bogle primero y Sharp después, pusieron el definitivo 2-1. De esta forma, los ‘blades’ suman 11 puntos, aunque lejos de la marca de la salvación, mientras que los ‘baggies’ pierden ritmo en su lucha, también por no caer a segunda.

A la misma hora tuvo lugar el Wolves contra Arsenal. Los de Mikel Arteta saltaron al campo con ganas de comerse a los lobos, y se demostró con un tiro que golpeó el travesaño. No obstante, no fue hasta el minuto 33 cuando se materializó su dominio, con el gol de Pépé, tras dos caños. Todo iba bien para los ‘gunners’, pero la roja de David Luiz y el gol de Rúben Neves, trastocaron los planes. Con el empate, los de naranja fueron mejores y alcanzaron el segundo tanto solo cuatro minutos después. Con este gol, la ventaja fue insalvable, y más con otra expulsión, la de Leno, con lo que los tres puntos se quedaron en el Molineux Stadium.

Minutos después se disputó el Newcastle contra Crystal Palace en el norte del país. Las urracas se adelantaron a los dos minutos, con un tanto de Shelvey, pero los de la capital respondieron algo después. En el minuto 21, Riedewald batió al recientemente renovado Vicente Guaita, y cuatro minutos después, fue Cahill quien repitió. Con esto, las águilas ganaron el duelo de ornitología.

Al mismo tiempo se producía un hecho histórico en Old Trafford. El Manchester United le endosó la mayor goleada de la historia de la Premier League al Southampton, igualando lo mismo que hicieron al Ipswich Town y al Leicester City, precisamente, contra el mismo rival. Wan-Bissaka abrió la lata, a lo que le siguió Rashford, Bednarek en propia meta y Cavani para el 4-0 en el primer tiempo. En la segunda parte, fue Martial, por dos ocasiones, McTominay, Bruno Fernandes, de penalti, cómo sino, y Daniel James para cerrar este histórico partido, desequilibrado desde el minuto 2 con la expulsión de Jankewitz.

Pero la lucha por la liga no se quedó ahí, pues al día siguiente, el Manchester City superó al Burnley en Turf Moor. El partido fue un monólogo de los de Pep Guardiola, con un 75% de posesión. Gabriel Jesus y Sterling fueron los goleadores de la tarde para poner a los suyos con 3 puntos de ventaja sobre su más inmediato perseguidor, el otro Manchester, con un partido menos.

A este encuentro se le sumó el de otro de los candidatos por cosas grandes. El Leicester City visitó al Fulham y fue un viaje algo movido, pues los londinenses propusieron el juego, mientras que los zorros pusieron los goles. Iheanacho y Justin colocaron el definitivo 0-2 antes de la finalización del primer tiempo y pusieron a su conjunto con 42 puntos, tercero en la tabla.

En mitad de la jornada se programó el Leeds United contra Everton en Elland Road. Fue un partido divertido, con ocasiones para ambos, sin embargo, la propuesta de Bielsa le salió mal y los de Ancelotti se pusieron 0-2 arriba antes de acabar la primera parte. Los ‘whites’ intentaron la remontada, pero todo se quedó en el único tanto de Rapinha.

Un partido catastrófico para el campeón

La noche del miércoles se cerró con dos partidos. El primero fue el Aston Villa contra West Ham United, en el debut de Lingard con los de Londres. Tras una primera mitad con poco fútbol, los ‘hammers’ tomaron el control con los goles de Soucek y del flamente fichaje inglés, pero los villanos contrarrestaron en el minuto 81 con el tanto de Watkins. Para cerrar su estreno soñado, Lingard firmó su doblete batiendo a Emiliano Martínez y darle los tres puntos a los de David Moyes, que se quedan quintos con 38 puntos.

El segundo choque fue el del Liverpool contra el Brighton en Anfield. Los locales tuvieron las ocasiones en el inicio del partido, sin embargo, ninguno de los 11 disparos sorprendió a Sánchez. Alzate, ya en el segundo tiempo, marcó el gol de la victoria para las gaviotas y dejan a los ‘reds’ a 7 puntos del liderato con un partido más, por lo que la liga se les puso cuesta arriba.

El último duelo de la jornada era el Tottenham Hotspur contra el Chelsea. Otro de los infinitos derbis de la Premier League, pero con un ambiente especial por estar los dos conjuntos peleando por la cabeza. El monólogo de los 'blues' no les bastó para un resultado holgado, pues el tanto de penalti de Jorginho fue la única razón por la que los de Tuchel se llevaron la victoria. Los de Mourinho no estuvieron a la altura, ni en posesión (58-42), ni en tiros (18-7).