Impresionante partido iban a dejar dos equipos de la Premier League como son el Tottenham Hotspur contra el Southampton. Este miércoles día 21 de abril se jugó la jornada número 33, pero en este caso se debían jugar partidos entre semana por culpa del apretado calendario.
Cambio en la banca local
El despido del portugués José Mourinho ha hecho saltar las alarmas en el conjunto londinense. A esto se le suma la lesión del delantero inglés Harry Kane que fue el salvador de los lilywhites en su último partido frente al Everton.
El sustituto del luso será un conocido en el estadio de los locales, Ryan Mason será el encargado de dirigir a los blancos en lo que resta de temporada. El joven de 29 años fue fichado por el Tottenham en el año 2016, pero un golpe con el gran Gary Cahill lo dejó apartado de los terrenos de juego para toda su vida, los médicos dijeron que fue un milagro que todavía siguiese viviendo.
En cuanto a la racha del Tottenham deberían conseguir los tres puntos para ascender en la tabla, momentáneamente hasta que el Liverpool juegue su correspondiente encuentro. En los últimos cinco partidos los spurs han ganado solamente uno y eso no son buenas noticias y los aleja de sus objetivos principales de la temporada.
En busca de la salvación
La situación del Southampton no es muy diferente y se encuentran bajo la presión de conseguir puntos para mantenerse en esta primera división inglesa un año más.
Ralph Hasenhüttl es un técnico con experiencia y mucha sabiduría en el mundo de este deporte, pero a pesar de esto la racha de su equipo no es la deseada por todos, de sus últimos cinco encuentros han conseguido seis puntos de dos victorias, pero han visto la derrota en los tres restantes.
Las lesiones han hecho posible la entrada de jugadores no muy habituales como Gareth Bale, el galés que está pasando por un momento de forma muy bueno quiere ayudar a su equipo a ganar los puntos necesarios para lograr sus objetivos y sobre todo anotar goles que le den la confianza que necesita.
Sufre el nuevo Tottenham
Empezaba el partido y las oportunidades más claras eran para el Southampton, pero las intervenciones del guardameta francés Hugo Lloris impidieron que el balón entrase en la portería. Poco después Gareth Bale se acercaba con mucho peligro a la portería defendida por Alex McCarthy.
Media hora de juego exacta fue la necesaria para que Danny Ings anotará el primer gol del encuentro y para poner por delante en el marcador a los visitantes. Un remate de cabeza imposible para Lloris a la salida de un saque de esquina fue suficiente para que el balón terminase dentro de las redes.
La tuvo Lucas Moura antes del descanso, pero mandó la pelota fuera del terreno de juego sin peligro para la portería de Alex McCarthy. Las bajas en el conjunto local estaba pasando factura y los llevó al descanso por debajo en el electrónico.
Algunas posesiones infernales a favor del Southampton desmontaban la defensa del Tottenham y conseguían entrar al área local sin problema, pero excepto en la situación del gol, la defensa despejaba los balones e intentaban rápidamente salir al contraataque. En cambio los goles no llegaron para los chicos de Ryan Mason.
Remontada en el último suspiro
Empezaba la segunda mitad y el brasileño Lucas Moura recibió un golpe en su pierna izquierda que lo dejó tocado, pero finalmente pudo volver al terreno de juego. El Tottenham salió con mucha fuerza e intentaba acercarse poco a poco a la portería rival para poner las tablas en el marcador, pero le fue imposible en los 10 primeros minutos del segundo periodo.
Tantos intentos hicieron posible el empate del Tottenham por medio de Gareth Bale, el galés mandaba la pelota entre los tres palos y ponía así las tablas en el electrónico. Los ataques después del empate no cesaban, ya que el Tottenham necesitaba los puntos para mantener vivos sus objetivos.
La entrada de Harry Winks y las internadas de los laterales cocinaron el segundo tanto de los lilywhites, Sergio Reguilón ponía una pelota que recibía el coreano Heung Min Son y acababa mandando la bola dentro de la portería, pero muy poco después fue anulado por posición antirreglamentaria de Lucas Moura, ya que impedía la visión del guardameta.
Minuto 88 de partido y el VAR revisaba una jugada que finalmente acabó en penalti. El colegiado señaló el punto fatídico tras la revisión de sus asistentes en el VAR. La patada que recibió el jugador de los spurs fue en el interior del área y Heung Min Son fue el encargado de materializar la ocasión desde los 11 metros en gol.
Finalmente la victoria se la llevó el Tottenham Hotspur con una épica remontada en los últimos instantes del encuentro y siguen hacia delante en su búsqueda de los puestos europeos. Sin embargo las cosas para el Southampton se complican y ahora es el Fulham quien tiene la oportunidad de salir del descenso y acercar un poco más al equipo de Southampton a los puestos de descenso.