Manchester United y Leicester City se veían las caras en la 36º jornada de la Premier League. Duelo de la parte alta de la clasificación entre dos equipos que si no pasa nada raro estarán el año que viene en la Champions League.
El Manchester United afrontaba el encuentro sin mucha preocupación, con un equipo totalmente nuevo al visto la pasada jornada ante el Aston Villa, de cara a dar descanso a jugadores importantes de cara a la final de la Europa League.
El Leicester por su parte, tenía una oportunidad de oro de sacar los tres puntos ante un rival muy complicado como el Manchester United, y consolidarse en estos puestos de Champions League tan codiciados esta temporada.
Intercambio de golpes en la primera mitad
El balón echaba a rodar con los de Solskjaer iniciando la primera posesión del encuentro. Sin embargo, poco le duraría la pelota al conjunto mancuniano, que acabaría cediendo ante un Leicester que entró mejor al partido.
Tal fue el gran comienzo de los de Brendan Rodgers que en una jugada que en principio no parecía tener gran peligro terminaría con un centro pasado desde la derecha de Tielemans, para que Luke Thomas se invente un remate de volea fantástico a la escuadra derecha, que ponía el 0-1 en el marcador, y dejaba a de Gea plantado sin nada que hacer.
Este gol parecía que encarrilaba el partido para el Leicester, pero pocos minutos después un balón al espacio para Diallo sería servido para un Greenwood, que con una diagonal se hace espacio para disparar con pierna derecha, y poner el balón ajustado al poste izquierdo de la meta de Schmeichel que no pudo llegar al que era el gol del empate.
Después de este intercambio de golpes, el ritmo del partido comenzaría a bajar, y tan solo dos acciones de Tielemans que terminaron con disparos, crearían cierto peligro a la portería rival.
Soyuncu pone por delante a un Leicester superior
La segunda mitad comenzaría con los foxes dominando de nuevo el encuentro como ya sucedería en la primera parte, pero con más ocasiones que no terminaban de coger puerta.
El primer aviso serio sería a través del nigeriano Kelechi Iheanacho, que se haría espacio para rematar dentro del área, pero su disparo esquinado a la derecha de la portería sería interceptado por un David de Gea que desviaba la ocasión del delantero.
Finalmente el Leicester encontraría el gol a la salida de un córner, con un centro medido de Albrighton para la llegada de Soyuncu, que se impondría a todos los defensores del United y pondría el 1-2 con un potente cabezazo al fondo de la red.
Solskjaer trataría reaccionar dando entrada a tres hombres importantes como Bruno Fernandes, Cavani y Rashford. El delantero uruguayo se haría notar en los primeros minutos, pero en su primera aparición caería en fuera de juego.
Maddison, otro jugador que entró en la segunda mitad, exhibiría su buen disparo desde la frontal, pero su remate en esta ocasión se marcharía por poco a la derecha de la portería.
Ya en los minutos finales, el United se volcaría en busca del empate, y Rashford la tendría en el descuento a través de un centro colgado al área que el inglés cabecearía sin mucha precisión a la izquierda de la portería.
Los locales lo seguirían intentando, pero el empuje sería insuficiente para sacar al menos un punto de Old Trafford. Finalmente victoria del Leicester 1-2, que pone un poco más cerca la Champions a los de Brendan Rodgers, a falta de dos jornadas del final. El United ya clasificado deberá aprovecho estos partidos finales para confeccionar el once de cara a la final de la Europa League.