Concluyó la temporada para todas las secciones del Levante. A pesar de que al Levante Femenino le falta disputar las semifinales de la Copa de la Reina donde aún tiene posibilidades de disputar la final, prácticamente todas las secciones del club han acabado su particular campaña con mejor o peor resultado.

Cabe destacar la permanencia lograda por el primer equipo, que estuvo a punto de alcanzar puestos europeos y superar a su máximo rival, el Valencia CF, en la clasificación y el Levante UDDM, equipo que consiguió ascender por primera vez en su historia a la máxima categoría del fútbol sala español.

El Levante Femenino de Antonio Contreras logró por su parte un más que merecido quinto puesto en una liga dominada por el FC Barcelona. Las granotas consiguieron quedar por delante del Valencia CF en la última jornada de competición. En la cruz de la moneda se encuentra el Levante B, que tras una temporada de altibajos consumó en la penúltima jornada su descenso a Tercera División.

Levante UD

Primera vuelta

La primera vuelta de la liga, o lo que es lo mismo, la primera mitad de campeonato, no pudo empezar peor para los “granotas”.

La primera jornada les tocó visitar el Camp Nou, campo donde pocos equipos logran sacar puntos. El Levante en aquella primera jornada liguera no solo no consiguió puntuar, sino que salió goleado tras perder por siete goles a cero. Caparrós, que se estrenó en el banquillo levantino en aquel fatídico día, llamó a la calma y aseguró que ellos ya habían pasado por el dentista. El siguiente partido no era menos difícil ya que les tocaba recibir al Sevilla en casa en el partido que sería el regreso de Iborra al Ciutat de València. En aquella disputa los valencianos consiguieron su primer punto de la temporada tras conseguir un empate a cero goles.

Tuvimos que esperar hasta la tercera jornada para ver como los hombres dirigidos por Caparrós conseguían la primera victoria de la temporada en su visita a Vallecas donde se impusieron por un gol a dos en una agónica victoria para los azulgranas. Parecía que los valencianos habían encontrado la senda positiva en la liga, pero llegaron tres jornadas donde se consiguieron tres empates consecutivos contra la Real Sociedad, el Almería y el Valladolid, este último partido contra el equipo dirigido por Juan Ignacio Martínez que volvía al banquillo de la que fue su casa.

Tras los empates llegó la segunda victoria de la temporada obtenida contra el Osasuna por la mínima. Tras la visita al Sadar, llegó un partido que no olvidará fácilmente la parroquia “granota”, el partido contra el Real Madrid. Aquel encuentro en el que estuvo a punto de saltar la sorpresa con una victoria contra el Real Madrid que logró remontar en el descuento un dos uno favorable para los valencianos al que dieron la vuelta con un gol de Morata y otro de Cristiano Ronaldo cuando el partido alcanzaba su final. El equipo salió reforzado de aquella derrota `in extremis´ y en los dos partidos siguientes consiguió dos victorias contra el Celta y el Espanyol.

Tras estas dos victorias el equipo cayó en un pozo, la mala racha comenzó con un empate contra el Betis y después con cuatro derrotas contra: Granada, Athletic de Bilbao, Villarreal y Getafe; esta racha negativa abrió un paréntesis con la victoria lograda en casa, por la mínima, contra el Elche, pero después continuaron las derrotas que siguieron con otras dos: en el Calderón contra el Atlético de Madrid y después llegaría el derbi valenciano en el cual se impusieron los “chés” en Mestalla por dos goles a cero con dianas de Piatti y Feghouli.

Con el derbi se dio inició al año dos mil catorce y una semana después el Levante cerró la primera vuelta con una victoria en tierras andaluzas contra el Málaga.

El balance de esta primera vuelta para el Levante fue de seis victorias, cinco empates y ocho derrotas. En estos diecinueve primeros encuentros los hombres de Caparrós consiguieron anotar un total de dieciocho goles y encajaron algo más del doble, veintisiete goles recibieron los de Orriols. Así pues los hombres de Caparrós consiguieron en esta primera mitad un total de veintitrés puntos, algo menos de la mitad con los que conseguiría terminar la campaña en la décima posición de la tabla.

Segunda vuelta

Comenzó el Levante la segunda vuelta del campeonato asentado en la décima posición de la tabla con equidistancia de puntos entre el descenso y la zona europea. Siete eran las unidades que separaban al conjunto granota de ambas zonas. El cuadro azulgrana ostentaba una cifra de 23 en un cuádruple empate poco común con Getafe –un puesto por detrás– Granada y Valencia –noveno y octavo respectivamente–, únicamente resuelto por el goal average general.

Terminaba el período invernal de traspasos y la entidad de Orriols fichó a Nagore, de la AD Alcorcón, a Víctor Casadesús, procedente del Mallorca, e hizo oficial también la inesperada llegada del exvalencianista ‘Momo’ Sissoko desde el París Saint Germain.

No empezó mal el cuadro dirigido por Joaquín Caparrós, que logró un trabajadísimo empate frente al FC Barcelona –líder por aquel entonces– en casa y también consiguió una histórica victoria ante el Sevilla en el Sánchez Pizjuán. Tras esto, el bloque valenciano encadenó cinco jornadas más sin conocer la derrota, haciendo también un buen papel en la Copa de S.M. el Rey al eliminar al Rayo Vallecano y plantar cara de nuevo al equipo culé (pese a que el resultado de la eliminatoria no fue fiel reflejo del juego desplegado por los de Orriols. La pegada de los catalanes pudo más).

Las cosas cambiaron a partir de la jornada 27, cuando el Levante cayó derrotado en el Santiago Bernabéu y se metió de lleno en una racha de hasta cuatro partidos sin ganar, incluida la derrota en casa contra un Betis que era colista y se encaminaba a toda prisa hacia el descenso.

A partir de aquí, vino una racha un tanto irregular en la que los de Caparrós cosecharían varios empates y alguna victoria, y en la que también caerían ante Athletic Club o Villarreal –con un gol en el último minuto en El Madrigal–. Fue este un momento extraño, pues el equipo granota llevaba varias jornadas rozando el objetivo de la permanencia matemática pero no llegaba a materializarlo. Ésta se conseguiría sin siquiera tener que jugar el día 3 de mayo, gracias a la derrota de Osasuna frente al Celta de Vigo en El Sadar.

Al día siguiente empezaba el colofón a otra temporada histórica. El Levante recibía en casa al flamante líder, el mejor Atlético de Madrid de toda la historia, que podía proclamarse campeón en el Ciutat de València si ganaba y si los resultados de Barça y Real Madrid le eran favorables. Pero el conjunto local aguó la fiesta a los del ‘Cholo’ Simeone y les hizo esperar, poniendo máxima emoción a un campeonato atípico. El cuadro azulgrana venció por 2-0 a los colchoneros.

El mismo resultado se repetiría la semana siguiente, también en el Ciutat, frente al Valencia. Era el derbi más igualado de la historia, el conjunto ‘ché’ llegaba a la penúltima jornada sólo un punto por delante de los granotas, ostentando la octava plaza. Nadie apostaba por una victoria local después del desgaste del encuentro anterior y de haber celebrado otra permanencia histórica. Sin embargo, los orriolenses salieron hipermotivados contra los de Pizzi, que fueron al final quienes menos ideas y fuerza mostraron.

El Levante se puso dos puntos por delante de los blanquinegros a falta de sólo una jornada para el final de liga; aunque con el goal average directo empatado y el general virtualmente perdido, lo que les obligaba a ganar al Málaga en La Rosaleda en la última fecha del curso, algo que al final no se logró.

El bloque azulgrana dependía de sí mismo para coronarse rey de la capital del Turia. Solamente tenía que vencer al conjunto boquerón en su casa, pero los de Bernd Schuster no quisieron desaprovechar la oportunidad de despedirse de su afición con una victoria, pese a no jugarse nada. 1-0 para los locales y a los granota les tocaba esperar al día siguiente para saber el resultado de los valencianistas. No hubo sorpresas. El Valencia se impuso al Celta en Mestalla y los de Caparrós perdieron una oportunidad histórica de quedar por una vez en la vida por delante del eterno rival, algo que sin duda hubiera ilusionado enormemente a la afición.

No obstante, el público levantinista quedó satisfecho por saber que el equipo continuará como mínimo una temporada más en la máxima categoría del fútbol español, que se hizo un buen papel en Copa, que se ha dado una buena imagen en general y que se ha plantado cara a los grandes y en los partidos trascendentales. Además, otro éxito añadido fue el nombramiento de Keylor Navas como mejor portero del campeonato por la propia Liga BBVA pocos días después del final del curso, un reconocimiento al trabajo del meta costarricense, que ha sido pieza clave en la plantilla azulgrana así como en el trabajo y los resultados logrados.

Levante UD B

El Levante B, equipo que disputó la promoción de ascenso la campaña pasada, no corrió la misma suerte esta temporada y tras dos años consecutivos jugando en la división de bronce del fútbol español cayó a Tercera División ocupando el 18º puesto. El equipo de José Gómez no se rindió en ningún momento excepto en el que fue matemáticamente imposible salvar la categoría.

La temporada comenzó con la marcha de jugadores que habían tenido un gran peso la campaña anterior. Tal vez esta fuera una de las razones por las cuales el rendimiento del club no ha sido el suficiente para mantenerse en Segunda B. Jugadores como Garabato, portero titular, que se marchó al Salamanca, Coronado, Marín, Fali, Moyano, Ortuño y Provencio junto a los cedidos Roger, máximo goleador granota, Morales, uno de los mejores jugadores de la campaña pasada e Iván López formaban parte de la columna vertebral que consiguió jugar la promoción de ascenso a Segunda División. En su lugar llegaron jugadores como Leandro, Álvaro López, Aquino, Calderón, Carlos Expósito, Chuso, Leandro, Marcelo, Polaco y Roberto Camarasa que reforzaron la dañada plantilla granota.

Primera vuelta

El 24 de Agosto empezó la Liga y no pudo hacerlo de peor manera, casi fue el preludio de lo que íbamos a ver durante el resto de la temporada; el Elche Ilicitano venció por 1 – 5 a los granotas en Buñol. Un recién ascendido había superado con experiencia a un equipo que había ocupado puestos altos en la clasificación la campaña pasada. A esta derrota se le sumó otra en Villarreal por 2 – 1. El primer punto se sumó en casa ante el Huracán, con un empate a uno. Los granotas creaban un buen juego pero no acertaban de cara a portería, a ello cabe sumar los errores defensivos que condenaban al equipo a no sumar victorias. La sequía de victorias siguió en Lleida, donde el equipo cayó por 3 – 0, y en Buñol, donde el conjunto azulgrana sumó un nuevo empate ante el AE Prat. De esta forma, tras los primeros 5 partidos de liga el Levante sumaba dos de quince puntos posibles, ocupando la 19ª posición, solo sumando un mejor registro que el Ontiyet.

La primera victoria no llegó hasta la 9ª jornada. Hasta entonces los granotas sumaron una derrota (ante el Espanyol) y dos empates (ante el Sant Andreu y L´ Hospitalet). El 1 – 0 ante el Atlético Baleares en Buñol, acababa con una racha de nueve partidos sin conocer la victoria. Parecía que este sería el punto de inflexión granota, que el equipo comenzaría a remontar y volver a regodearse con la victoria y de hecho el equipo sumó mejores resultados: perdió ante el Ontinyent por 2 – 0, pero durante los siguientes 4 encuentros no conocieron la derrota. Empataron ante el Olimpic y el Alcoyano, ambos jugando como local, y logró vencer como visitante al Valencia Mestalla (1 -2) y a la UE Olot (3 – 4 en un partido muy emocionante para el aficionado). Tras esta gran racha de resultados los granotas conseguían salir del descenso ocupando la 15ª posición y dando esperanzas de divisar brotes verdes.

Final de la primera vuelta e inicio de la segunda

Pero estos brotes volvieron a ocupar su lugar bajo tierra tras 4 derrotas consecutivas frente a Badalona, Nàstic, Reus y el líder Llagostera. La irregularidad marcaba la trayectoria del equipo, dando altibajos intercalando victorias y derrotas: El último partido de la primera vuelta se solventó con un 2 – 0 al Constancia, y la segunda vuelta comenzó con una derrota visitante al Elche Ilictano por 3 - 1 y una victoria al Villarreal B, en casa, también por 3 – 1 esta vez a favor de los granotas. Otra mala racha de derrotas asoló al club sumando 4 consecutivas. Los conjuntos beneficiados fueron Huracán, Lleida, AE Prat y Espanyol. De esta forma los de José Gómez ocupaban la 18ª posición con 21 puntos al término de la 25ª jornada.

Otra victoria más como visitante ante el Sant Andreu por 0 – 1 daba esperanzas al equipo, utilizando como argumento que aún quedaba liga por delante y que nada se podía descartar. El descenso estaba en un puño, y así lo estuvo durante toda la temporada. La afición granota comenzó a volcarse con el equipo y el club comenzó a proporcionar medios para trasladarse a Buñol o a los diferentes desplazamientos para apoyar al equipo. Dos derrotas más ante L´Hospitalet y Atlético Baleares continuaron hundiendo al equipo, que esperaba con ansia que sus rivales no sumaran puntos para mantener la distancia con la permanencia. Los siguientes 5 encuentros se podrían calificar como luces y sombras: los granotas vencieron al Ontiyent como local, pero salieron derrotados ante el Olimpic. Uno de los partidos más cruciales fue el que el Levante disputó ante el Valencia Mestalla, equipo que marcaba la permanencia. La victoria ante el vecino dio mucha esperanza a los granotas, que a pesar de sumar otra derrota más ante el Alcoyano seguían acariciando los puestos de fuera del descenso. De esta forma los granotas finalizaban la 32ª jornada en la 17ª posición a tan solo dos puntos de la salvación.

Los siguientes cuatro partidos fueron un absoluto desastre. El equipo dirigido por José Gómez necesitaba sumar victorias urgentemente, sin embargo solo fue capaz de sumar dos de doce puntos posibles. Dos empates, ante Olot y Badalona, y las derrotas dramáticas ante Nástic y Reus dejaban al equipo a un paso del descenso matemático. Era una situación más que delicada ya que los granotas eran 19º y necesitaba que todos sus rivales perdieran los dos partidos para poder jugar la promoción de descenso. Una carambola muy poco probable, pero posible y éste era el clavo ardiendo al que se agarraban los granotas.

Finalmente el descenso se consumó en casa con un empate ante el Llagostera que hacía imposible matemáticamente la salvación. Los jugadores recibieron muchos ánimos, tanto por parte de la afición, como por muchos de los exjugadores del equipo. El último partido ante el Constancia fue el más duro y triste de la temporada ya que lo jugaban dos equipos ya descendidos a Tercera División. Aun así el Levante se llevó la última victoria de la temporada despidiéndose así de la Segunda División B.

El equipo acabo la liga 18º con 36 puntos sumando 9 victorias, 9 empates y 20 derrotas. El máximo goleador fue Andy, con 11 goles, seguido de Higón, Galán y Rubén Fonte con 5.

De esta forma el Levante B descendió a Tercera División, pero no se despiden definitivamente de Segunda B, más bien se puede considerar un hasta pronto ya que tanto la afición como los jugadores tienen claro el poder y talento que tiene la cantera granota y seguro que dentro de un año volverán a estar pelando por subir a Segunda B de nuevo. Una temporada de luces y sombras que es mejor olvidar y comenzar a pensar en la que viene para formar un proyecto competitivo que sea capaz de devolver al Levante al sitio que realmente merece.

Celebración de un gol del Levante B frente al Alcoyano | Foto: Carla Cortés.

Levante UD Femenino

El Levante Femenino logró un merecido quinto puesto tras una soberbia temporada en la que el equipo rindió a un gran nivel. Los fichajes funcionaron muy bien y encajaron en el equipo dando alegrías a los aficionados levantinistas que se acercaron a Nazaret.

En primer lugar cabe destacar las altas y las bajas que el equipo tuvo a principios de temporada. Bernauer, Iris Domínguez y Sandra Castelló abandonaron la entidad granota buscando más suerte en otros equipos. Olga García (Barcelona), Guti (Barcelona) Leti (Atlético) fueron las incorporaciones al equipo, jugadores de primer nivel que sin duda fueron cruciales para firmar la gran temporada que hizo el conjunto dirigido por Antonio Contreras.

La temporada comenzó de forma fantástica para las granotas: en las primeras siete jornadas el equipo sumó 19 de 21 puntos posibles, todo un escándalo, además de mantenerse invicta. Con 8 victorias (frente a Granada (4 – 1), Espanyol (0 – 2), Oviedo (0 – 1), Prainsa (2 – 1), Las Planas (0 – 1) y Valencia Femenino, el máximo rival (2 – 3) y un empate (frente al Rayo (0 – 0)).

La primera derrota no llego hasta la octava jornada donde las granotas encajaron un 0 – 4 en casa. A este partido le siguió una racha de malos resultados que impidieron al Levante mantener un coliderato de ensueño. Pasaron 5 jornadas hasta que el equipo blaugrana volviera a conocer a que sabía la victoria: derrotas frente a Barça, Sporting y Sevilla junto a empates contra At. de Madrid y San Gabriel relevaron al equipo a la 6ª posición.

Con Enero llegaron dos victorias más, frente a Granada y Espanyol, un empate frente a la Real y una nueva derrota frente al Rayo. Con estos resultados comenzó la segunda vuelta a la que le siguieron otras dos victorias (frente a Oviedo y Prainsa) y una más que inesperada derrota ante el colista, el Levante Las planas.

Los últimos meses estuvieron plagados de altibajos para el equipo. En primer lugar llegaron cuatro partidos consecutivos sin conocer la victoria, una derrota ante el Athletic y tres empates frente a Valencia, Barcelona y Atleti, equipos que encabezaban la tabla y que en esos instantes de temporada se encontraban delante de las granotas.

Llegaron cinco jornadas consecutivas puntuando, las últimas de liga. Se cosecharon tres victorias (frente Sevilla, Sporting y San Gabriel) y dos empates (frente a Collerense y Real Sociedad). De esta forma el conjunto de Antonio Contreras acabó la liga 5ª por delante de su máximo rival, el Valencia CF y a tan solo tres puntos de la tercera posición.

Por último cabe destacar que las granotas están clasificadas para jugar la semifinal de la Copa de la Reina tras haberse clasificado ante el Sporting por un global de 2 – 1 (1 – 0, 2 – 0).

Levante UDDM

El Levante UDDM firmó una excelente campaña que le permitió ascender por primera vez en su historia a la máxima categoría del futbol sala español. La afición estuvo volcada con el equipo, sobre todo en los partidos finales donde se certificó el ascenso matemáticamente.

El equipo dirigido por José Esrich finalizó la liga con unos números de récord, nada más y nada menos que 55 puntos que le permitieron ser campeones de liga y ascender de forma directa a Primera División.

A título hay que añadirle el pichichi cosechado por Jordi Lledó tras anotar un total de 28 goles en 24 partidos. El 7 del equipo sumó su segundo pichichi a sus 31 años. También añadir el Zamora a nivel colectivo tras ser el equipo menos goleado de la categoría, toda una proeza.

Este es el resumen de toda la temporada granota. Por parte del primer equipo se pensará en una plantilla con nuevas incorporaciones que sigan manteniendo al equipo en Primera División. Joaquín Caparrós no encabezará el proyecto y lo más probable es que jugadores como Pape Diop o Keylor Navas abandonen la entidad tras una gran temporada dejan dinero en las arcas del club. Tanto Catalán como Salvador deberán esforzarse al máximo para encontrar un entrenador y jugadores de garantías que hagan grande al Levante UD.

Por su parte el Levante UDDM deberá adaptarse a una nueva categoría donde se verá las caras con equipos fuertes que le dificultaran su permanencia en Primera División. El pabellón del Cabanyal se quedará pequeño para recibir a equipos como el Pozo Murcia o el FC Barcelona y seguro que los jugadores afrontarán los partidos con la máxima ilusión y ganas.

El Levante Femenino volverá a luchar otra temporada más por seguir en los puestos de cabeza e incluso luchar por las posiciones más altas a pesar del dominio que ha impuesto el FC Barcelona. Las jugadoras de Antonio Contreras están muy preparadas tanto síquica como psicológicamente para afrontar la temporada 2014/2015 con la misma garra que ha tenido esta campaña. Nazaret disfrutará del juego de la sección más exitosa de todo el levantinismo. Ellas encabezan el verdadero orgullo granota.

Por último el Levante B volverá a Tercera División y preparará un equipo que sea capaz de ascender de nuevo a Segunda B. El equipo a pesar de estar tocado se repondrá y buscará hacer todo lo posible para ilusionar a la parroquia granota poniendo todo el empuje por su parte y también buscando su hueco en el primer equipo.

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