Temporada de dudas en la portería rojiblanca, en la que finalmente, y como ha pasado estos últimos años, se ha acabado imponiendo el gallego Roberto como titular para los momentos decisivos. Oier gozó de su oportunidad, saliendo en el once de inicio en buena parte de la temporada, y Stole Dimitrievski hizo su debut en la máxima categoría.

Roberto Fernández

Roberto Fernández, corazón y alma del Granada CF desde que llegara a sus filas procedente de Osasuna en la temporada 10/11, en la que se convirtió sin lugar a dudas en uno de los héroes del ascenso a Primera División. Desde entonces, el de Chantada no lo ha tenido fácil ningún año, temporada tras temporada se le ha buscado competencia intentando dejarlo en el banquillo, y temporada tras temporada ha terminado siendo el portero titular del equipo, cuando éste más necesitaba la figura de un líder sobre el terreno de juego.

Este año no ha sido distinto al resto. En verano llegó al club Oier Olazábal, aunque una lesión en pretemporada hizo que Roberto se postulase como titular. No ocurrió en la primera jornada, en la que por sanción no pudo jugar y tuvo que hacerlo el tercer portero, habitual del filial, Stole Dimitrievski. No obstante, a partir de la segunda jornada, el gallego sería el indiscutible bajo los palos.

Foto: Antonio L. Juárez

Roberto fue titular desde la jornada 2 hasta la jornada 15. En estos catorce partidos, el guardameta mantuvo su portería a cero en cuatro en ocasiones, ante Villarreal, Athletic, Celta y Almería. No obstante, en los diez encuentros restantes encajó 24 goles. Especialmente duras fueron las goleadas ante FC Barcelona (6-0), Real Madrid (0-4) y Sevilla (5-1).

La mala racha de resultados del equipo, y algunos fallos graves del cancerbero, hicieron que Caparrós optara por dejarlo en el banquillo en la jornada 16 ante el Getafe, situación que se repetiría hasta la jornada 30. En este periodo, Roberto simplemente jugó la eliminatoria de Copa del Rey ante el Sevilla, en la que encajó seis goles en los 180’ minutos de eliminatoria, dos en Los Cármenes y cuatro en el Sánchez Pizjuán.

Ya con Abel Resino en el banquillo, y viendo que la racha de resultados no mejoraba, Roberto volvió a la titularidad en Los Cármenes frente al Celta de Vigo. Dolorosa vuelta bajo los palos, ya que en un partido en el que los granadinos se jugaban gran parte de sus opciones de permanencia, se dejaron escapar los tres puntos en el descuento. No obstante, el carácter competitivo de Roberto le mantendría en la portería rojiblanca hasta final de temporada.

En esta última fase del curso, donde el equipo se jugaba la vida, el portero tiró de carácter para mantener al equipo creyendo hasta el último momento en la salvación. En los nueve últimos partidos, hay que diferenciar entre los que van de la jornada 30 a la 34. Cinco partidos en los que el Granada cosecha dos empates (Celta y Sevilla) y tres derrotas (Almería, Valencia y Espanyol), encajando en total 11 goles. El partido ante los pericos supuso la destitución de Abel y la llegada de Sandoval. Roberto continuó con la confianza del nuevo míster, y los últimos cuatro partidos de Liga, con el portero gallego bajo los palos, el Granada ganó tres partidos y empató uno, manteniendo la portería a cero en tres de ellos y encajando tan solo un gol ante el Getafe.

Roberto Fernández, no podía despedirse de otra manera del Granada CF. Cinco años de alegría y de sufrimiento, un ascenso a Primera, cuatro temporadas consecutivas en la máxima categoría y el equipo salvado para seguir disputando el curso que viene la mejor Liga del mundo. Roberto lo ha dado todo por este equipo, y la afición siempre se lo ha reconocido. Un pedazo de historia viva del club nazarí que se va con el orgullo del trabajo bien hecho y con el cariño y el reconocimiento de todos.

Oier Olazábal

Oier Olazábal, llegó en el mercado de verano al Granada CF procedente del Barcelona para disputarle el puesto en la portería a Roberto. El bagaje del portero vasco en Primera División era de solo un partido disputado, en la temporada 08/09 ante el Mallorca. Esa inexperiencia era la losa más grande que arrastraba el portero, que pese a hacer muy buenas temporadas en el filial culé, nunca tuvo la confianza de los entrenadores del primer equipo para dar el salto a la élite.

Foto: Antonio L. Juárez | VAVEL

A pesar de perfilarse como una opción clara a la titularidad, y teniendo en cuenta que Roberto no podía jugar la primera jornada de Liga ante el Deportivo por sanción, una inoportuna lesión le hizo no poder empezar la temporada bajo los palos. En Copa del Rey jugó la eliminatoria ante el Córdoba, encajando un gol en los dos partidos. Aun así, el portero no dejó de esforzarse y luchar por tener su oportunidad. Esta llegó en la jornada 16, Joaquín Caparrós decidió otorgarle la titularidad ante el Getafe, y el irunés se hizo con el puesto durante quince jornadas consecutivas.

El cancerbero intercaló durante estas jornadas buenas actuaciones con otras no tan buenas, que le hicieron estar continuamente en el punto de mira, especialmente de la afición, que llegó a pitarle en ocasiones, aunque para ser justos, bien es cierto que los resultados del equipo no acompañaban. Oier consiguió mantener la portería a cero en cuatro encuentros (Elche, Athletic, Málaga y Eibar), en los diez restantes, encajó 27 goles. El partido que marcó su vuelta a la suplencia fue el del Bernabéu, en el que el Granada encajó la vergonzante cifre de nueve goles ante el Real Madrid.

Foto: Antonio L. Juárez

A partir de entonces, Oier volvió a la suplencia devolviendo la titularidad a Roberto. Un año con más sombras que luces para el canterano del Barça, que la temporada que viene tendrá que tratar de ganarse la confianza del técnico que llegue al equipo nazarí, y que tras la marcha de Roberto, aún no sabemos que competencia tendrá para ocupar el puesto bajo los palos de portería granadina.

Stole Dimitrievski

Stole Dimitrievski, portero macedonio del filial granadino, lleva dos años a un alto nivel en el equipo de Segunda B. La temporada pasada, pese a ir convocado con el primer equipo en más de una ocasión, no había tenido la oportunidad de debutar en la Primera División. Sin embargo, y cuando menos se podía esperar, el jugador se vio en la tesitura de tener que debutar como titular en el primer partido de la temporada, en Los Cármenes ante el Deportivo de La Coruña.

Foto: Antonio L. Juárez

La sanción que arrastraba Roberto por acumulación de tarjetas desde la temporada anterior, y la lesión de Oier, hicieron que Caparrós optara por él para defender la portería del Granada ante el Depor. Pese a no tener una actuación brillante, el equipo ganó el partido por 2-1, por lo que el jugador puede presumir de tener un 100% de victorias en su haber.

Tras este partido, con la vuelta de Roberto y la recuperación de Oier, Dimitrievski volvió a ponerse bajo las órdenes de Joseba Aguado en el Granada CF B, donde ha estado a punto de clasificarse junto a sus compañeros para el play-off de ascenso a Segunda División. Un portero con futuro, que no sabemos si la próxima temporada terminará de dar el salto al primer equipo.