En la tarde de ayer, la Unión Deportiva Las Palmas hacía oficial la incorporación del defensa central Antolín Alcaraz Viveros, que llega libre tras rescindir su contrato con el Everton inglés, su escuadra la pasada temporada. Pero, ¿quién es Antolín Alcaraz? Este veterano defensa central de origen paraguayo es un jugador rocoso, fuerte en la marca, con un gran juego aéreo e inteligente en conceptos defensivos ejerciendo de líder. Un jugador que, en su país, fue comparado con nombres como Gamarra o Celso Ayala, zagueros que ya se convirtieron, en su momento, en verdaderas estrellas de los guaraníes.

Ficha técnica

Nombre Antolín Alcaraz Viveros
Nacimiento San Roque González de Santa Cruz, Paraguay; 30 de julio de 1982 (33 años). Posee la nacionalidad italiana
Posición Defensa Central
Altura 1'87 metros
Peso 82 kilogramos
Pie

Derecho

Se ha erigido como un central de garantías siendo elegido, en todos los equipos en los que ha jugado con regularidad, como el mejor defensa de la plantilla. En la temporada 2011/2012, en la Premier, fue nombrado como uno de los mejores defensas de toda la liga.

Un albañil que quería jugar al fútbol

Paraguay es el eje sudamericano en cuestiones agrícolas y el distrito de San Roque González es su principal exponente. En esa tierra fértil, necesitada de mano de obra y donde toda la familia arrima el hombro para ayudar a la economía global, se crió el otrora albañil Antolín Alcaraz.

El nuevo defensa central de la UD aprovechó la necesidad de levantar casas para las familias campesinas de la zona y desde los 12 años trabajó incesantemente como ayudante de albañilería. Aportando un pequeño sueldo en casa, forjando su carácter trabajador desde la infancia y consciente de que la vida en San Roque era de todo menos accesible a nuevas oportunidades, Alcaraz se conformaba con poder jugar de vez en cuando partidos entre los amigos de la barriada.

Alcaraz fue albañil antes de que un ojeador lo descubriera.

Cada tarde se acercaba al club de su pueblo natal, el Club Teniente Fariña de Ñemby, hasta que una de ellas se encontró con el hombre adecuado: Carlo Bruni. Bruni vio potencial en el central y lo ayudó a ir a un grande de Argentina, como es el Racing de Avellaneda, a la tierna edad de 17 años. El club argentino no tardó en ofrecerle un alojamiento, ficha para intentar jugar en el primer equipo y un salario muy modesto, que no llegaba a recibir todos los meses.

Un comienzo muy complicado

Sin embargo, La Academia terminó sufriendo una grave crisis de endeudamiento que la obligó a deshacerse de muchos prometedores jugadores. Uno de ellos fue Alcaraz, que no llegó a disputar ni un solo minuto con el primer equipo. El central, que ya había cumplido los 18, fue objeto de ojeo por parte de equipos europeos, algo poco habitual en jugadores paraguayos, y fue la Fiorentina la que, finalmente, le ofreció un contrato. El entonces equipo de Cuarta división italiana, se hizo con él para intentar salir de su bache deportivo, pero lo cierto es que en el club tampoco pudo llegar a disputar algún minuto. Por ello, el central se vio obligado a abandonar el club para intentar encontrar un hueco en otro equipo que le permitiera cumplir su sueño.

Los felices años en el Beira Mar

Tras abandonar la Fiore, Antolín Alcaraz consigue fichar por el modesto Beira Mar portugués, un equipo que se encuentra a mitad de camino entre la primera y la segunda línea del fútbol del país luso. Allí, el jugador paraguayo pudo, al fin, cumplir su sueño de jugar al fútbol y, poco a poco, se fue haciendo un hueco a lo largo de las cuatro temporadas que disputara con el club. Su primer año fue de adaptación y solo jugó 7 partidos en la liga portuguesa, pero al siguiente ya fue un jugador habitual para su entrenador que le usó en 24 partidos en los que marcó un gol, su primera diana como jugador profesional, ante el Alverca el 31 de agosto del 2003.

Con el SC Beira Mar disputó un total de 112 partidos oficiales en los que marcó 5 dianas.

Para la temporada 2004/05, el jugador volvió a disputar 24 partidos y anotó otra diana, esta vez ante el Benfica en la primera jornada de liga. Este curso, el Beira Mar descendió a la Segunda división portuguesa al acabar 18º. Ya en la división inferior, Alcaraz se convirtió en un jugador clave para el ascenso del equipo, disputando un total de 31 encuentros que ayudaron a su equipo a terminar como campeón de la Liga de Honra (Liga de Honor en portugués).

En la última temporada, tras el ascenso a la máxima división del fútbol portugués, Alcaraz fue designado capitán del equipo y logró anotar 3 goles en los 26 partidos que disputó: los dos primeros ante el Estrela Amadora (jornadas 3 y 18) y el tercero ante el Marítimo de Funchal (próximo rival de la UD en esta pretemporada) en la jornada 22. Ese año marcó los mismos tantos que el delantero brasileño Mário Jardel (disputó 12 partidos) y más que un conocido del fútbol español, Andrija Delibasic (jugó en el Mallorca, la Real Sociedad, el Hércules y el Rayo Vallecano), que disputó 11 partidos y anotó solo una diana.

Su explosión como jugador

Tras fichar en el verano del 2007 por el Brujas belga, Alcaraz se convirtió en un importante jugador para Paraguay, haciéndose visible por entrar en un conjunto importante de una liga de prestigio y llegando a participar en competiciones continentales a nivel de clubs. En su primera temporada, una lesión le impidió estar durante más de un tercio de la competición liguera. En los diez partidos que disputó, Alcaraz ayudó a su equipo con un gol ante el Sint-Truiden.

En el Brujas, Alcaraz disputó dos competiciones europeas: una UEFA y una Europa League.

Para la segunda temporada, el central, ya recuperado de su lesión, disputó un total de 35 partidos vistiendo la camiseta del club belga. En liga, anotó tres goles en los 29 partidos que disputó: ante el Cercle Brugge, el KV Mechelen y el Zulte Waregem. Disputó, por primera vez en su carrera, partidos de la UEFA (un total de 6), uno de ellos contra el Valencia al que consiguió meterle un gol.

Alcaraz vistiendo la elástica del Brujas belga | Fotografía: AFP

En su última temporada en el Brujas, disputó un total de 43 partidos vistiendo la camiseta del club belga en hasta 5 competiciones diferentes. En liga, anotó un gol en los 24 partidos que disputó ante el Anderlecht, además de repartir dos asistencias. Disputó un total de 7 partidos en la Europa League, volviendo a verse las caras con el Valencia.

La aventura en la Premier

Su gran rendimiento este año hace que el seleccionador paraguayo le convoque para formar parte del equipo que la selección guaraní presenta para el Mundial del 2010 en Sudáfrica. En esa competición demostró una gran calidad, por lo que el Wigan del entrenador español Roberto Martínez le ficharía para la próxima temporada en la Premier League.

En su primera temporada en Inglaterra, Alcaraz juega un total de 38 partidos, entre liga y copa, anotando un gol y repartiendo una asistencia. El gol se lo endosó al Sunderland en la cuarta jornada de liga. Tras un primer gran año, en el que fue capitán, Paraguay volvió a tocar a su puerta para disputar la Copa América del año 2011. Esta sobrecarga de partidos hizo que, en su segunda temporada en el Wigan, su cuerpo dijera basta y se lesionara al principio de la temporada, lo que le dejó en el dique seco durante más de un mes. Aun así, disputó un total de 25 partidos de liga anotando 2 goles, ante el Stoke City y el Blackburn.

Las lesiones han lastrado su progresión como jugador en los últimos años.

En su última temporada en el Wigan, Alcaraz solo jugó 14 encuentros, aunque llegó su primer gran éxito como jugador: la consecución de la FA Cup del 2013. Esta falta de minutos se debió a una grave lesión que le alejó de los terrenos más de cinco meses. Desde este año, a pesar del logro de la copa, Antolín Alcaraz no volvió a jugar igual que antes y su contrato fue rescindido cuando Roberto Martínez (su entrenador en el Wigan) se fue al Everton. Eso sí, el central paraguayo se fue con su míster al equipo de Liverpool.

En el Everton, Alcaraz disputó 21 partidos en los que no anotó ningún gol y viéndose relegado a un papel muy secundario en los hitos del club. Su tiempo en este nuevo equipo inglés se vio marcado por las recurrentes lesiones, que no le han permitido asentarse en el once titular de Roberto Martínez. El último partido que jugó Alcaraz con la camiseta blue fue en la vuelta de octavos de la Europa League, donde su equipo fue vapuleado (5-2) por el Dinamo de Kiev, allá por marzo de este año.

Un pilar en la mejor Paraguay de la historia

Con su selección ha disputado más de 20 partidos como internacional logrando 2 goles (uno en el Mundial de 2010 y otro en la Copa América del 2011). El desconocimiento que sobre él existía en su país era tal que el seleccionador ‘Tata’ Martino no le convocó hasta finales de 2008 (en un amistoso ante Omán) al ignorar de dónde había salido aquél chico. Sin embargo, desde ese momento, Alcaraz se convirtió en un habitual en los esquemas del Tata para los años sucesivos.

Con su selección ha disputado más de 20 partidos como internacional logrando 2 goles.

Disputó cuatro partidos en el Mundial de 2010 en los que marcó un gol a Italia (en ese partido fue seleccionado Hombre del Partido), consiguiendo 1 victoria, 2 empates y 1 derrota (en Cuartos, contra España). Sin duda, este campeonato se convirtió en su explosión como jugador a nivel internacional.

Alcaraz entre Sergio Busquets y Xavi Hernández en el Mundial de Sudáfrica | Fotografía: AFP

En la Copa América del año 2011, fue expulsado en el partido de cuartos de final contra Brasil (que Paraguay ganara en los penales), lo que le impidió estar en las semifinales y en la gran final ante Uruguay (que la selección guaraní perdió por un contundente 3-0).

Como reconocimiento personal, Alcaraz disfruta de un importante reconocimiento, a nivel nacional, que le ha otorgado la Presidencia de la República del Paraguay. Se trata de la Condecoración Especial.

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Sobre el autor
Christian Afonso
Periodismo en la UC3M. Redactor en la sección del Herbalife Gran Canaria. Amante de la verdad y el criterio por encima de todas las ideologías. La radio como medio de vida