Ángel Trujillo tuvo que abandonar el terreno de juego en el partido de la última jornada contra el Getafe por un balonazo que sufrió en su ojo derecho tras un disparo de Lafita. En lugar de volver a Valencia con el resto de la expedición levantinista, el central abandonó el Coliseum Alfonso Pérez para trasladarse al Hospital Moncloa de Madrid. Allí fue sometido a distintas pruebas médicas con el fin de evaluar el alcance de la lesión.

Las pruebas médicas determinaron que el jugador granota sufría un desgarro en la retina del ojo derecho, por lo que el futbolista pasó por el quirófano unas horas después en Valencia. Esta compleja operación se inició bajo la premisa de que el jugador había sufrido un desgarro de la retina. Sin embargo, tal y como afirman algunos medios, durante la operación se dieron cuenta de que lo que en realidad tenía era un desprendimiento de retina. De urgencia, Trujillo fue derivado a la Clínica Baviera de Alicante, donde el especialista en oftalmología José María Ruiz Moreno fue el encargado de operarle.

El doctor fue quien completó la reconstrucción de la zona, que presentaba múltiples arrancamientos. El pelotazo que sufrió el central granota le provocó unos daños mayores de los que se detectaron en las pruebas preliminares y deberá estar de baja dos meses como mínimo. Según informan algunos medios, Trujillo deberá permanecer una semana tumbado boca abajo para que la cirugía surta efecto para que se produzca una completa absorción del gas estabilizador que se aplicó en la zona.

El resultado de la intervención fue satisfactorio, pero el jugador del Levante tendrá que esperar a ver cómo evoluciona su ojo, ya que es una lesión muy complicada. La velocidad de reacción del club a la hora de operarle puede haber sido determinante, ya que un desprendimiento de retina puede desembocar en una pérdida definitiva de la visión si no se trata a tiempo. Por ese motivo, la principal preocupación en Orriols es la salud del Trujillo, por lo que puede transcurrir un mes hasta que el futbolista pueda volver a ejercitarse, aunque el tiempo de baja dependerá de la evolución del central. Como mínimo estará dos meses de baja hasta poder volver a competir.

Foto: La Liga.

Más problemas para Alcaraz

Trujillo se había convertido en una pieza fundamental en el once de Lucas Alcaraz, por lo que el técnico granadino deberá recomponer la alineación para el próximo partido contra el Villarreal. Un problema más para el entrenador del Levante, que quizá tenga que cambiar el esquema táctico, ya que Juanfran continúa siendo duda por una contusión costal que sufrió contra el Eibar. De esta manera, solo dispone de Simao Mate y de Zouhair Feddal para que formen en el centro de la zaga.

A estas bajas hay que sumar la lesión que sufrió Verza en el recto anterior del cuádriceps y que le impedirá disputar la próxima jornada. Por su parte, Rubén García es duda por una lesión que afectó a su ligamento parameniscal de su rodilla izquierda.