Corría la temporada 2001/02 cuando el Málaga CF hizo oficial el fichaje de Clever Marcelo Romero Silva para afrontar su tercera temporada en Primera División. El año 2002 no pasó desapercibido para el club. A la dimisión voluntaria de Puche, entonces presidente de la entidad, se sumaron las bajas de Basti, Rufete, Movilla, Martín Rivas, Ismael, y Agostinho, entre otros cuantos más.

Los problemas financieros con Hacienda, fueron el detonante clave a la hora de que Puche y su hijo presentaran su dimisión en todos los cargos que los vinculaban al club. El sistema judicial, presionaba al Málaga CF con sus investigaciones, hasta tal punto que se sembró el temor de la continuidad del equipo cuando Antonio Asensio, empresario y dueño de varios clubes de fútbol en España, entre ellos el Málaga, falleció ese mismo año. Había muchas dudas. Nadie quería hacerse con las riendas del club, hasta que Serafín Roldán Freire, el máximo accionista de la entidad se autoproclamó presidente tras realizar una exhaustiva búsqueda de candidatos a ostentar la presidencia del club, viendo que nadie quería ejercer esa responsabilidad.

En cuanto a lo deportivo, a pesar de los problemas, el equipo cuajó una temporada aparentemente discreta. Tras realizar una pretemporada bastante floja, el equipo hizo un inicio de Liga poco efectivo. El entrenador, Joaquín Peiró, tuvo que ingeniárselas para diseñar un sistema de juego dotado de equilibrio y solidez defensiva, ya que la incorporación de nuevos jugadores en la plantilla hacía muy difícil el entendimiento entre ellos. El equipo seguía en construcción y como en todas las obras los cimientos son esenciales, por lo que el periodo de adaptación de los nuevos jugadores no había hecho más que empezar. Las nuevas incorporaciones tenían calidad, y así lo entendió la afición que arropó en todo momento las decisiones de su entrenador.

Temporada 2003/04, Marcelo Romero (segundo empezando por la izquierda) posa agachado junto a sus compañeros de equipo. Fotografía: SUR

El fichaje de Marcelo Romero (apodado el 'Gato') fue la gran apuesta del entrenador, ya que con su fichaje los blanquiazules cambiaron su sistema de juego por completo. La táctica ofensiva de jugar utilizando las bandas, con extremos rápidos como Agostinho y Rufete, se sustituyó progresivamente por un planteamiento de más contención defensiva, dotando de gran solidez y equilibrio la zona del medio campo, para asfixiar la salida de balón del rival.

La temporada se enderezó finalmente, y el club acabó cerrando el año satisfactoriamente con la décima posición en la tabla de clasificados con un total de 53 puntos, 13 partidos ganados, 14 empatados y 11 perdidos, y encajando el mismo número de goles que a favor (un total de 44). Además, La Rosaleda, con motivo de su 60 aniversario, emprendió obras para dotar al estadio de más localidades, mediante la ampliación y remodelación en la grada de fondo, y se estrenó también un nuevo video marcador.

Seis temporadas como jugador al servicio del Málaga CF

Antes de su paso por la entidad de Martiricos, Marcelo ‘Gato’ Romero, comenzó su carrera profesional en otros clubes. Debutó en el Defensor Sporting de Uruguay en el año 1994, hasta que en 1996 firmó por el Peñarol, club uruguayo en el que militó hasta 2001. En el mercado estival de 2001 fue fichado por el Málaga CF. En el equipo blanquiazul jugó durante seis temporadas, en las que coincidió con su compatriota Darío Silva.

El 27 de agosto de agosto de 2002 en un partido frente al Villarreal, el Málaga y Romero consiguieron su primer título. La Intertoto. El partido no exento de tangana acabó con empate a uno, pero el global de la eliminatoria favorecía a los blanquiazules. Romero, conseguiría ese día el único título como jugador vistiendo la elástica blanquiazul.

Sus números durante las seis temporadas con el Málaga se recogen en el siguiente gráfico:

Gráfico estadístico de los partidos jugados por 'Gato' Romero. Fotografía: VAVEL.com

En la temporada 2008 abandonó el club para jugar en el Lucena FC, poniendo punto y final a su carrera como jugador del Málaga CF. La labor de el 'Gato' Romero como centrocampista organizador fue esencial para los blanquiazules. Su gran manejo de balón y capacidad de contención, dotó al equipo de gran solidez defensiva y equilibrio. Y al ser un buen conductor de balón, el equipo registraba un índice de posesión de balón bastante elevado, en comparación a temporadas precedentes cuando únicamente se buscaba la profundidad por las bandas.

El ‘Gato’ entrenador

Una llamada del Málaga CF convenció a Marcelo Romero para que regresara al conjunto blanquiazul, desde que se despidiera como jugador en la temporada 2008 para recalar en las filas del Lucena CF.

Comenzó como monitor de fútbol en categorías base, de hecho fue en la temporada 2011/12, tras sacarse los pertinentes papeles que le acreditan oficialmente como entrenador (tras completar el nivel 3) cuando ejerció como tal en el Alhaurín de la Torre CF en la categoría juvenil en primera provincial. Su evolución como tal fue en continúa progresión. Sus amplios conocimientos sobre fútbol y su capacidad para diseñar estrategias y tácticas futbolísticas, hicieron que meses después, concretamente en octubre pasó a ejercer como entrenador de la primera plantilla del Alhaurín CF, que pertenecía al grupo IX de la Tercera División.

El 24 de junio de 2014, el exjugador del Málaga pasó a convertirse en segundo entrenador del equipo y agradeció al club la oportunidad de ostentar un cargo en la que fuera hace unos años su casa. “Es una gran oportunidad que me ha dado Mario (Husillos). Es como estar en casa. Es un momento que no voy a olvidar nunca”, precisaba en una entrevista publicada por el club, pocos días después de su llegada al equipo.

En referencia a los problemas que atravesaba el club en 2002 cuando paralelamente se produjo su llegada y el año del descenso a Segunda División en 2006, añadió también en la entrevista que el Málaga CF es un equipo fuerte y que esa vitalidad y sustento se produce por el apoyo incondicional de su afición tanto en los buenos como en los malos momentos. “A este Málaga lo ha mantenido su afición. Nosotros tenemos ganas e ilusión para darle a los seguidores lo que quieren”, eran algunas de las palabras que el uruguayo subrayo en dicha entrevista.

La iniciativa del club era clara. Con su fichaje la entidad busca transmitir conocimientos futbolísticos y disciplina a la cantera, y en este sentido ‘Gato’ Romero, a sus 37 años, es todo un conocedor en la materia. Pese a tener poca experiencia como entrenador, los miembros y cuerpo técnico del club consideran que Marcelo desde su propia experiencia y personalidad puede realizar un excelente trabajo ayudando al técnico navarro, Javi Gracia.

A día de hoy, Romero se siente muy cómodo en su puesto, y aunque el club no pasa por su mejor momento, el uruguayo cree en el club y cree que la situación se revertirá a corto plazo. El trabajo y el esfuerzo da frutos, por eso en este sentido Marcelo afirma: “Puedo aportar mi experiencia en el vestuario. Quiero transmitir las ganas a los jóvenes”, apuntaba en otra entrevista.

Para saber un poco más sobre la labor de Marcelo Romero como segundo entrenador del Málaga, veáse el siguiente vídeo.