Todo empezó a principios del siglo XXI, cuando un rumano y un argentino se cruzaron en la delantera de un equipo valenciano. Si, la combinación parece extraña, pero lo que surgió de allí es increíble. Los nombres de los que hablamos son Gica Craioveanu, Martín Palermo y el Villarreal.

Entre los dos sumaron 46 goles en tierras castellonenses, formando una de las grandes parejas de la historia del club groguet. Solo las lesiones del argentino acabaron por frenar su progresión en El Madrigal, cuando el Villarreal se asentaba en Primera División, competición en la que debutó en 1998.

El éxito de una melena rubia

José Mari, procedente del Atlético Madrid fue el complemento perfecto para un delantero que había fracasado en el Manchester United. Su llegada vino acompañada de la de un técnico chileno que fue crucial para la historia del Villarreal; sus nombres: Diego Forlán y Manuel Pellegrini.

El primer año de Forlán no pudo ser más impresionante: 25 goles y Bota de Oro compartida con el mismísimo Thierry Henry. Además, Jose Mari también aportó 10 goles al equipo. Por si fuera poco, apareció el mexicano Guille Franco que acabó por quitarle el puesto al sevillano.

Guille Franco y Forlán, una de las primeras grandes parejas de delanteros en El Madrigal | Foto: El Mundo
Guille Franco y Forlán, una de las primeras grandes parejas de delanteros en El Madrigal | Foto: El Mundo

Forlán fue la pieza clave, junto a Juan Román Riquelme, de aquél Villarreal que se plantó en semifinales de la Champions League. El cruel destino llegó cuando Lehmann detuvo un penalti a Riquelme en los últimos minutos de la eliminatoria, que hubiera  valido un billete a los castellonenses para jugar la final de París ante el FC Barcelona.

El uruguayo no paraba de marcar goles y se convirtió en uno de los mejores delanteros del mundo. Y muchos de ellos golazos, pues una de sus especialidades eran los disparos lejanos; su pierna derecha era un cañón que los porteros temían. Finalmente, 23 millones de euros  le hicieron desembarcar a orillas del Manzanares para jugar en el Atlético de Madrid.

Goles con sabor italiano

El fichaje estrella de la temporada 2006-2007 fue Nihat, el delantero turco proveniente de la Real Sociedad. Una grave lesión le dejó sin jugar prácticamente durante toda la temporada.  En la siguiente campaña, y para compensar la marcha de Forlán, Paco Roig invirtió en otro delantero del Manchester United, que actuaba como cedido en el Parma: Giusseppe Rossi.

En su primera temporada, la exquisita zurda del italiano ya se dio a conocer. 11 fueron los goles de Rossi, y Nihat firmó 18 tantos. Otra nueva pareja, que se rompió en la siguiente campaña, cuando el turco pasó 19 partidos sin anotar y acabó marchando fuera de Villarreal.

No obstante, Rossi no se sintió solo, porque llegó un delantero llamado Nilmar. El brasileño y el italiano formaron una de las grandes parejas de la Liga de los últimos años. Mientras el ex del Parma ponía la clase con una zurda de seda, Nilmar se encargaba de atacar todos los espacios con su impresionante velocidad. En su primera temporada juntos firmaron 21 goles.

La mejor temporada de Rossi llegó en la 2010-2011 anotando 18 goles en la competición doméstica. A partir de ahí, las lesiones de rodilla empezaron a romper la carrera del italiano. Después, dos temporadas casi en blanco con un traspaso a la Fiorentina de por medio.

Las últimas perlas

Tras descender a Segunda División, solo una temporada en la división de plata les sirvió para volver al sitio donde se merecen estar: la Liga BBVA. En la delantera, Ikechukwu Uche y Gio Dos Santos volvieron a formar una pareja muy parecida a la de Rossi y Nilmar. La velocidad del nigeriano era importantísima para meterse en los recovecos de las defensas rivales, y la zurda de Dos Santos hacía realidad los sueños de los aficionados con su asombrosa calidad.

Sudamérica siempre ha sido un buen mercado para explotar, y la última perla de la delantera del Villarreal llegó desde Racing de Avellaneda. Luciano Vietto asombró al panorama internacional durante la pasada temporada, siendo un delantero que reúne todas las características para ser un buen delantero centro móvil: velocidad, olfato de gol, movilidad… Al final, 20 millones le valieron su pase al Atlético de Madrid, como hizo Forlán en su momento.

Soldado y Bakambu. Bakambu y Soldado. El soldado Bakambu, incluso. El congoleño es el último gran descubrimiento de la parcela ofensiva del conjunto castellonense. Después de ser fichado del Bursaspor, pocos podían imaginar que su impacto en la Liga BBVA sería tan grande. De momento, suma 10 goles en Liga. A su lado, Roberto Soldado está a falta de gol, pero su trabajo está siendo fundamental para la gran temporada del Villarreal.

Soldado y Bakambu son los dos delanteros del actual Villarreal | Foto: El País
Soldado y Bakambu son los dos delanteros del actual Villarreal | Foto: El País

La solidez táctica del equipo de Marcelino, que sirve para que su equipo esté cuarto en la Liga BBVA, está restando poderío ofensivo a su equipo, pero las parejas de delanteros del Villarreal siempre tendrán un hueco especial en la historia del fútbol español.