Con el inicio del adiós al Vicente Calderón de fondo durante toda la campaña, el Atleti tendrá que verse las caras en la primera jornada de Liga ante el Deportivo Alavés en territorio colchonero con el objetivo prioritario de empezar la competición con un buen resultado, como viene siendo habitual en las últimas campañas en las que ha estado al frente el Cholo Simeone.
Lograr el primer objetivo de la temporada se perfila como una tarea ardua, ya que el balance histórico entre los dos equipos en sus últimos duelos no es nada favorable para los rojiblancos. Aunque pueda llegar a sorprender a muchos, el Atlético de Madrid ha logrado tan solo una victoria sobre el Alavés en los últimos cinco partidos que han disputado ambos conjuntos.
Un espejismo en un desierto de malos resultados
El primer precedente entre ambos clubes se remonta al campeonato de Liga de 1999, cuando el club madrileño se impuso por la mínima (1-0) al Alavés en el Vicente Calderón. El resultado final no fue nada representativo de los que sucedería en esa misma temporada meses después. El Atlético de Madrid finalizaba penúltimo con 38 puntos y descendía la categoría de plata del fútbol español junto a Betis y Sevilla. Por el contrario, el Alavés terminó en sexta plaza con 61 puntos, a tan solo 8 del que fue campeón, el Deportivo. En el partido de vuelta de la misma temporada, el Alavés se impuso 2-0 en Mendizorroza con goles de Magno y Bejbl. Los colchoneros quedaban de esta forma muy tocados, mientras que los vascos seguían una genial trayectoria que culminaría en una fantástica temporada en el cómputo global.
Tras ello, el siguiente precedente tuvo lugar en el año 2002. Los vitorianos volvieron a repetir marcador (2-0) y se llevaron un nuevo triunfo ante los colchoneros. Los goles de Rubén Navarro e Ilie decantaron la balanza a favor del Alavés. En el partido de vuelta de la misma campaña, disputado en el Vicente Calderón, el Deportivo Alavés volvió a demostrar que no temía al conjunto madrileño y se llevó la victoria a domicilio por 0-1 con un solitario gol de Ilie al poco de empezar la segunda mitad. Nuevamente, para sorpresa de muchos, ambos resultados no fueron significativos en el cómputo final de la competición, ya que los vitorianos finalizaron en puestos de descenso con 35 puntos, mientras que el Atlético de Madrid mantuvo esta vez la categoría al terminar el año en mitad de tabla.
El guión cambia y con ello, el desenlace
La última derrota del Atleti frente al Alavés se produjo en el año 2003, con ese 0-1. Desde ese momento, los madrileños no volvieron a perder en los dos siguientes partidos disputados. El primero se remonta al año 2005, concretamente a la decimoquinta jornada liguera disputada en el Calderón. El marcador dictó tablas (1-1) al final del encuentro. Pese a que los rojiblancos se adelantaron con un gol de Fernando Torres ya avanzada la segunda mitad, los vitorianos respondieron con otro gol a falta de diez minutos y salvaron los muebles en cierto modo.
El segundo asalto tuvo lugar en Mendizorroza durante la trigésimo cuarta jornada de liga. El partido marcó un antes y un después ya que el Atleti fue capaz de vencer por primera y única vez en el siglo XXI al conjunto vasco. El resultado final fue de 0-1, gracias al tanto cosechado por Antonio López. Este fue el último partido disputado entre ambos equipos, ya que en esa temporada, el Alavés perdió nuevamente la categoría y no volvió a encontrarse con el conjunto colchonero ni el Liga ni en Copa del Rey.
Distancias amplias, pero con cautela
Atlético de Madrid y Deportivo Alavés vuelven a cruzar sus caminos diez años después de su última batalla. Los rojiblancos cuentan con una amplia plantilla de enorme calidad y con unas bases ya muy asentadas que buscarán ser perfeccionadas para la consecución de nuevos títulos. Aun teniendo en cuenta el amplio margen entre un recién ascendido como el Alavés y un finalista de Champions League como el Aleti, la prudencia es algo que el equipo madrileño ha de tener en cuenta el próximo domingo cuando dé inicio a una nueva temporada. Como se suele decir, en el fútbol no hay rival pequeño y cualquier equipo tiene opciones, por muy remotas que puedan parecer, de dar la sorpresa al rival en teoría superior. Para evitar disgustos, el Atlético deberá recordar que ya le costó hacerse con los tres puntos en la primera jornada de la pasada campaña ante un recién ascendido como Las Palmas y que la actitud será muy importante para lograr la primera victoria del año y poner punto y final a su mal balance histórico ante el Alavés.