El pasado mes de julio Sergio Busquets cumplía 29 años, aunque se va haciendo mayor, el de Sabadell no lo nota y cada año se supera sobre el campo. Este año 2017 lo cierra una vez más con unos números espectaculares. El pivote del FC Barcelona tan sólo se ha perdido cinco partidos de forma obligada este año, dos de ellos por lesión y los tres restantes por acumulación de tarjetas.

A sus cerca de 30 años nadie piensa en un recambio de Sergio dado su gran rendimiento año tras año, pocos pivotes defensivos existen a la altura de Sergio Busquets.

Año como azulgrana

A pesar de su gran rendimiento individual en su club, este año Sergio sólo ha podido hacerse con la Copa del Rey frente al Alavés. En la pasada edición de la Champions League fueron eliminados por la Juventus en cuartos tras un desastroso partido de ida en el que Busquets no puedo participar por sanción. Además, a finales de verano el Madrid ganó la Supercopa de España al FC Barcelona, con dos victorias en la ida y en la vuelta.

En cuanto a los números, el pivote azulgrana ha logrado 4 asistencias y 1 gol en 2017, todo ello en la Liga Santander. Por otro lado, hay que incluir el alto número de tarjetas (15 amarillas) que recibe dada su posición en el campo. Este dato nos lleva a sacar el siguiente: Sergio Busquets ha recibido en 2017 una amarilla cada 3'4 partidos con el FC Barcelona.

Año con España

Con la camiseta roja de España Sergio Busquets ha disputado este año 2017 un total de ocho encuentros entre amistosos y clasificación para el Mundial de Rusia del próximo verano. Tan sólo se ha perdido dos encuentros, uno de ellos ante Colombia en un amistoso y el otro ante Albania en un partido clasificatorio y que la España de Lopetegui solventó con un fácil 3-0.

Respecto a sus números, con la selección en 2017 Sergio no ha logrado celebrar ningún gol suyo ni ha conseguido dar ninguna asistencia de gol. Eso sí, en cuanto a las amarillas, Sergio ha visto muchas menos que con el Barcelona, con la selección solamente le han mostrado 2 amarillas en cuatro partidos, es decir, una media de una amarilla cada cuatro encuentros.