A nueve fechas para el final de la competición regular, los equipos de la zona baja del grupo III de la Segunda División B parecen estar en un momento notable y no hay nada decidido. Todos quieren quedarse, pero cuatro (o tal vez cinco) tendrán que despedir la categoría. El noveno, el CD Ebro, con treinta y nueve unidades, solo tiene siete por encima del descenso, estando más cerca del descenso que de la promoción de ascenso. Nadie da nada por hecho por la zona flácida, pues habrá espectáculo y sufrimiento hasta el final en la zona del este de la península.

Demasiados milagros para encarecer la salvación (Agustí Bernad)

La lucha por el descenso suele ser una de las peleas en que más equipos terminan viéndose implicados y que mayor agonía provoca a los aficionados y seguidores del club que se encuentra en esa pelea. Partidos de infarto, siempre con la radio pagada al oído -aunque las nuevas tecnologías han avanzado con las aplicaciones para dispositivos de telefonía- y sin disfrutar del partido hasta que el colegiado señale un final que certifica la salvación matemática del equipo.

El fútbol en la Segunda B es totalmente impredecible, pero en las últimas jornadas esa dificultad para otorgar el favoritismo a un equipo se acrecienta. Equipos de la zona baja sorprenden a los gallos que pelean por el playoff y clubes que a cinco jornadas del final parecen descendidos terminan por dar guerra hasta lograr la salvación. Difícil es de olvidar ese Atlético Levante al que Toni Aparicio cogió como colista y al que dejó con la salvación ya lograda.

Rachas positivas pero engañosas

Sin embargo, el Grupo III de la Segunda División B está experimentando una situación que parece llevar la salvación a un precio muy caro. Este hecho se debe, en parte, a la figura de un Deportivo Aragón que solamente ha logrado trece puntos y que parece ser equipo de Tercera División. Los malos resultados del equipo de César Laínez han llevado a que varios clubes de la zona baja hayan logrado hacer un seis de seis ante el filial zaragocista y hayan logrado más puntos de los que son habituales a estas alturas de la temporada.

Pero el haber jugado ya los dos partidos ante el Deportivo Aragón significa que ya ese equipo no volverá a jugar contra ellos y que por tanto ese equipo tendrá un calendario más complicado. Un caso claro es el de un Olot que ya ha jugado los dos partidos ante los aragoneses y que ahora afronta una recta final con encuentros ante varios equipos de la zona alta, destacando entre esos choques el tramo final de los últimos cuatro partidos en que los gerundenses visitarán Lleida y Mallorca y recibirán a Elche y Valencia Mestalla.

"Los equipos sacarán puntos ante rivales complicados, pero necesitan una muy buena racha para encarecer la salvación"

Los calendarios de varios equipos se endurecerán, pero los equipos que aún deben jugar ante el Deportivo Aragón tienen otro hándicap: varios de los partidos de este tramo final son choques directos. Se trata de partidos entre equipos de la zona baja en que solamente un equipo se puede llevar los tres puntos o en que se puede dar un reparto de puntos, esos choques harán que el ritmo de puntos logrados por varios equipos de la zona baja se reduzca y la puntuación final de varios equipos quede más baja de lo que parece.

Otro factor para tener en cuenta será la lucha por los playoffs y la Copa del Rey, pues hay más equipos de lo normal metidos en esa pelea y ese hecho se traducirá en que menos equipos desconectarán en las jornadas finales para que clubes de la zona baja puedan lograr un buen botín.

Ocho equipos para cuatro plazas

La pelea por la salvación está actualmente conformada por Atlético Baleares, Penya Deportiva, Formentera, Olot, Llagostera, Alcoyano, Sabadell y Peralada. Todos ellos están o dentro del descenso o a un máximo de cuatro puntos de la decimosexta posición, por lo que actualmente están en esa encarnizada pelea por no descender que se dará en las nueve últimas jornadas.

Unos lo tienen más fácil y otros más difícil y, pese a que es muy complicado aventurarse a dar una cifra, es posible que ese dicho que pone a los 45 puntos como el listón para lograr la salvación se quede largo esta temporada. Es el Llagostera el que marca las posiciones de descenso con 32 puntos, lo cual significa que debería lograr quince puntos en nueve jornadas para llegar a esos 45 y eso significaría que los gerundenses lograrían el nueve jornadas la mitad de lo que han logrado en 29.

Es cierto que en las jornadas finales se dan más sorpresas y que en esas últimas jornadas es cuando el orgullo de los jugadores tira del equipo para lograr la salvación. Pero parece bastante complicado que varios equipos de la zona de descenso encadenen varias victorias de forma consecutiva para lograr encarecer el precio de una salvación que hoy en día parece cara, pero que podría abaratarse más de lo que parece con el paso de las jornadas.

La salvación estará cara (Jordi Grifol)

Son nueve las jornadas que quedan por jugar en la Segunda División B y, en lo que al Grupo III respecta, ni por arriba ni por abajo hay nada decidido por el momento. Centrándonos en esa parte más baja de la tabla de la clasificación, bastantes equipos son los que han estado y están implicados en la encarnizada lucha por evitar el descenso, algo que lógicamente todos quieren evitar. Sin embargo, cuatro equipos descenderán seguro y uno se lo tendrá que jugar todo al playoff por el descenso.

Diferentes situaciones para un mismo objetivo

Ahora mismo, por orden de menos puntos a más, en el descenso se encuentran el Deportivo Aragón, la Peña Deportiva, el Atlético Baleares y la SD Formentera, mientras que en el playoff está situado la UE Llagostera. Ahora mismo, el Olot marca la salvación con 33 puntos, una cifra que seguirá aumentando y, al final, el salvarse no será tarea fácil y no se regalará nada.

"Muchos equipos que estaban o siguen abajo están cogiendo dinámicas positivas"

El Deportivo Aragón es el último clasificado con tan sólo trece puntos y habiendo logrado apenas una victoria en los veintinueve encuentros disputados. Obviamente, necesitarían obrar un milagro los de César Laínez para salvarse y prácticamente ya se les da por descendidos, estando a veinte puntos de la salvación.

Por su parte, la Peña Deportiva y el Atlético Baleares tienen 27 puntos y parece que empiezan a cosechar más puntos que en la primera vuelta y, estando a seis puntos de salvarse, no hay que descartarles aún. El Formentera está en un momento bastante bueno y, pese a perder esta semana en el siempre complicado Estadio José Rico Pérez ante el Hércules, llevaban una racha de cuatro encuentros sin perder, que les dejan a dos puntos de la salvación por el momento.

Una entrada de año espectacular para algunos

Por otro lado, el Llagostera, de los equipos implicados en el descenso, está en una dinámica peligrosa pese a ganar este fin de semana ante el Olot, ya que llevaban unas cuantas jornadas sin ganar. El mismo Olot, que ahora mismo estaría salvado, ha sufrido un cambio espectacular y, tras una primera vuelta malísima que le dejaba abonado al descenso, está cuajando una buena segunda vuelta, haciendo de su estadio un auténtico fortín.

Peralada y Badalona han realizado un cambio muy drástico también. El Peralada estuvo toda la primera vuelta y parte de la segunda en puestos de descenso y, ahora, se encuentra en duodécima posición, habiendo realizado un cambio brutal. Muy similar es lo del Badalona, que tras unas jornadas flirteando con el descenso, se encuentra ahora en sexta posición soñando e ilusionándose con unos playoffs de ascenso.

Por lo tanto, parece que la mayoría de equipos que han estado gran parte de la temporada o siguen estando en los puestos más bajos de la tabla de clasificación, están cogiendo una dinámica más positiva y suman más puntos que en la primera vuelta y, además, equipos como el CE Sabadell o el CD Alcoyano que en un principio estaban en una parte más tranquila de la tabla, están acercándose a esos puestos más bajos, con lo que nadie estará tranquilo.

Muchos equipos pues, tendrán nueve finales para evitar el descenso, cuando algunos de estos equipos están empezando a sumar puntos, cosa que los que no hacen, lo miran con cierta preocupación y no es para menos, ya que la salvación se está empezando a poner muy cara.