La temporada ha sido, totalmente, de luces y sombras para el Barcelona. Tras cerrar un año complicado tras la dura marcha de Neymar y la llegada de numerosos fichajes, la plantilla azulgrana arrancaba con ansias un curso que mucho podía deparar.

Tras el Mundial de Rusia, donde la gran parte de los futbolistas se encontraron, Valverde volvió a estar al mando de la plantilla e hicieron de Tánger la primera parada oficial. Aunque los finalistas de la Copa del Mundo se habían incorporado pocos días antes de la final, como Rakitic o Dembélé, el Barcelona plantó cara al Sevilla y levantó la Supercopa de España ganando por 2-1.

Era la primera vez que se jugaba la competición a partido único, algo que agradecieron los futbolistas debido a la exigencia siendo el mes de Agosto. Tuvo que disputarse lejos tanto del Camp Nou como del Sánchez Pizjuán, pues las directivas no se pusieron de acuerdo en encontrar un estadio "neutral". Pablo Sarabia hizo el primero a los 9 minutos, poniendo contra las cuerdas a los catalanes, aunque Piqué recortó distancias antes del descanso y dio tranquilidad y pausa al partido.

La hegemonía en Liga Santander

El cansancio empezaba a hacer mella entre los futbolistas, a sabiendas que acababan de arrancar la temporada. El calor se acentuaba pero Dembélé, que volvía a la titularidad, puso el definitivo 2-1 en el 76', para después sentarse al banquillo y brindar minutos a Arturo Vidal. El equipo levantaba el primer título del curso avisando a la afición que, ahora sí, querían brindar todas las alegrías que debían.

El estreno en el Camp Nou no se demoró demasiado, y es que la Liga Santander dio el pistoletazo de salida el 18 de Agosto recibiendo al Alavés, que se marchó de la Ciudad Condal con el 3-0 en el marcador. El Barcelona empezaba con buen pie en la competición, colocándose rápidamente en las posiciones de cabeza y dejando entrever que eran claros candidatos a revalidar el título de campeones.

El Barcelona, campeón de Liga 2018/19 | Foto: Noelia Déniz - VAVEL
El Barcelona, campeón de Liga 2018/19 | Foto: Noelia Déniz - VAVEL

Y así fue, tras la 35ª jornada, los de Valverde se proclamaron campeones de la Liga Santander 2018/19 al vencer, en casa, al Levante por 1-0. Debido a la irregularidad de sus máximos perseguidores (Atlético de Madrid y Real Madrid) los azulgranas terminaron haciendo buenos los 87 puntos conseguidos para imponerse en el campeonato doméstico. El balance total fue de 26 victorias, 9 empates y únicamente 3 derrotas (Leganés, Betis y Celta de Vigo). Una carrera de fondo que el equipo superó con nota, demostrando una vez más que eran firmes, concisos y muy superiores a los rivales, a los que sólo les quedó aplaudir.

Anfield marcó el punto de inflexión

Las expectativas seguían creciendo en la Ciudad Condal viendo que el equipo mantenía la hegemonía en Liga y que llegaba a la Final de Copa del Rey con contundencia, sin ceder ni un sólo resultado en contra. En Europa la Champions League volvía a ser la delicia soñada por el vestuario, que le debía a los socios una buena imagen tras la terrible eliminación en manos de la Roma el curso anterior. La fase de grupos fue asequible y claramente favorable a los catalanes, que no se dejaron intimidar por Tottenham, PSV Eindhoven o Inter de Milán.

El Liverpool vuelve a dejar 'KO' al Barcelona

Ya en fases más avanzadas, ni Olympique de Lyon ni Manchester United pudieron tomar la palabra ante los culés, que perseguían su sueño con uñas y dientes, defendiendo el fortín a capa y espada. El miedo entró en el cuerpo cuando se supo que el gran Liverpool era el rival en semifinales, el último obstáculo a superar para poder disputar una nueva final, 4 años después. Aunque la felicidad se desbordase con el 3-0 favorable en el Camp Nou en el partido de ida, era necesaria mucha precaución al pisar el césped de Anfield.

Los jugadores salieron confiados de que ya tenían asegurada una plaza en el Wanda Metropolitano, sede de la cita final, y al paso de los minutos los 'reds' fueron pintando al óleo un cuadro desastroso. El equipo abajó los brazos y se marchó a casa con el 4-0 en contra, certificando la eliminación, de nuevo, de la máxima competición europea. Fue un duro trago para todos y, ya con la Liga ganada, muchos dieron por terminada la temporada.

Adiós a un 'doblete' curativo

Sin embargo, con la necesidad de superar el bache de la Champions League, la plantilla quiso mostrar su unidad en el vestuario y, mediante las palabras de Leo Messi, aseguraron que irían en busca del último título en juego. La Final de Copa del Rey estaba muy cerca y el Valencia, que también había dejado escapar la Europa League, tenía las medidas tomadas al Barcelona.

Ambos equipos se citaron en el Benito Villamarín el pasado 25 de Mayo. Con las bajas de Luis Suárez, Ter Stegen o Dembélé por lesión, a los azulgranas sólo les quedaba el orgullo y la experiencia para intentar salvar la temporada con un nuevo 'doblete'. Los de Valverde arrancaron correctamente el partido, pero el conjunto 'che' aprovechó sus oportunidades y puso el 0-2 antes del descanso. Aunque Messi recortó distancias, ya no hubo reacción y el Valencia se proclamó campeón de la Copa del Rey, dejando más hundido al equipo culé.

La temporada dijo 'hasta aquí' y toda la plantilla se marchó de vacaciones. Tiempo para descansar, recuperar fuerzas y, sobre todo, pensar en lo sucedió. En los 'por qué' de los golpes, en qué ha faltado hacer para volver a reinar en el mundo del fútbol. Quizás será el momento de decir 'adiós' a algunos jugadores y dar la bienvenida a aire fresco, aunque eso lo dictaminará el nuevo curso que está a punto de volver a empezar.