Hoy 5 de mayo el Estadio de La Cartuja cumple 21 años. Allá por 1999 los Reyes de España inauguraron este escenario, ubicado en las orillas del Río Guadalquivir, con un partido de gala entre España y la Croacia de Suker, recién clasificada como tercera en el Mundial de Francia del año anterior. La ciudad de Sevilla pudo disfrutar de un gran triunfo de la Selección Española (3-1) en una noche memorable con remontada incluida.
El seleccionador José Antonio Camacho cedió los honores a jugadores de la talla de Guardiola, Míchel Salgado, Cañizares, Hierro o el mismo Luis Enrique, actual dirigente de la Absoluta. El encuentro, arbitrado por el italiano Collina, comenzó con mal pie para España. Suker adelantó a los balcánicos en el marcador a los 10 minutos del inicio. Pero un fuerte disparo de Engonga en el 34’, inapelable para el guardameta Ladic, colocó la igualada con la que se iría el amistoso al descanso.
En los primeros compases del segundo tiempo, Hierro transformó el penalti provocado por Pedro Munitis y culminó la remontada. En el 84' Dani García puso la guinda al pastel marcando el tercer gol definitivo y sentenciando el partido a favor de España.
Un fortín huérfano
El Estadio de La Cartuja es una construcción colosal, con capacidad para alrededor de 60.000 espectadores que lo coloca entre los recintos deportivos más grandes de España. Sin embargo, lejos de ser uno de los escenarios más populares del deporte nacional, apenas se ha utilizado en sus 21 años de historia.
Ha albergado múltiples competiciones de atletismo, entre ellas el Mundial de la IAAF de 1999 para el que fue construido, se ha adaptado para dos finales de Copa Davis en 2004 y 2011 y ha acogido cuatro encuentros de la Selección Española, dos finales de Copa del Rey y una final de la UEFA. Un amistoso entre España y China en 2012 fue el último evento de fútbol celebrado en La Cartuja.
La principal razón del incumplimiento de las expectativas depositadas en este estadio es la presencia de la pista de atletismo. La lejanía entre las gradas y el césped ha movido los grandes partidos a otros campos totalmente adaptados al fútbol como Mestalla, el Santiago Bernabéu o el Benito Villamarín, ubicado también en la ciudad hispalense.
Es por eso que el vacío del Estadio Olímpico de Sevilla se ha llenado con el ruido de la música en los últimos años. Por ejemplo, con conciertos de Madonna en 2008, AC/DC en 2010 y 2016 y Bruce Springsteen en 2012, aparte de múltiples festivales.
Cambio de rumbo
El desuso del Estadio de La Cartuja pronto llegará a su fin. La Junta de Andalucía consiguió convencer a la RFEF para celebrar la final de las próximas cuatro ediciones de la Copa del Rey en este gran recinto. El acuerdo se hizo oficial el pasado 5 de febrero y, a la espera de una fecha oficial ante la crisis sanitaria de la COVID-19, está previsto que la Real Sociedad y el Athletic de Bilbao reinauguren este estadio entre 2020 y 2021 con su final aplazada.
Sevilla tiene aseguradas cuatro grandes citas de fútbol hasta 2023. Se volverán a colocar las porterías, los balones volverán a rodar y las gradas volverán a gritar gol, tal y como sucedió aquel 5 de mayo de 1999. Por fin, una nueva fiesta del fútbol se divisa sobre el horizonte en el Estadio de La Cartuja.