Formado indistintamente en las categorías inferiores del Atlético de Madrid, Rayo Vallecano y Real Madrid, Marcos Moraga despuntó en La Fábrica hace escasas temporadas gracias a sus 41 goles en un mismo curso, estadística facilitada por ADN Blanco. En la misma línea y con ficha en el Juvenil C esta campaña, el delantero madrileño contaba con papeletas para abandonar la disciplina de la escuadra merengue, movimiento que finalmente se ha realizado y que el propio jugador ha comunicado a través de su cuenta de Instagram, mostrándose agradecido después de un ciclo formativo notable en el que se ha forjado como profesional y también como persona.

El ariete de 16 años aterrizó en la disciplina del equipo vikingo en 2014, portando la vitola de efectivo determinante y diferencial a medio plazo. Sin embargo y obviando sus buenos números en la temporada 14/15, su aportación ha pasado desapercibida y no ha cumplido con las expectativas fijadas en una primera instancia. Seis cursos después de su retorno a La Fábrica, Marcos Moraga concluye su aventura en el Real Madrid, persiguiendo la premisa de desembarcar en un nuevo proyecto que le asegure minutos, protagonismo y una participación activa que contribuya a su correcto desarrollo como futbolista profesional. Atendiendo a sus anteriores destinos, se espera que el ex-jugador del conjunto merengue recale en algún equipo de la capital española. 

Pese a prescindir de los servicios de Marcos Moraga, el Juvenil C de Roberto Rodríguez continúa contando con delanteros de la talla de David Pecellín, Abraham Nobrega o Álvaro Daniel Rodríguez Muñoz, flamante fichaje blanco, procedente de del Girona. En líneas generales y después de no inscribir al atacante de 16 años, el filial vikingo ha logrado confeccionar un grupo en el que prevalezca el gen ganador, al igual que la confianza y las ganas para mejorar partido tras partido.