El Betis suma 30 puntos y está muy cerquita de alcanzar posiciones europeas. Con la victoria por la mínima del lunes,  el conjunto verdiblanco sigue sin perder en este 2021 y avanza con paso firme hacia sus objetivos. La cara opuesta de la moneda le corresponde a Osasuna. El conjunto rojillo quería encadenar una buena racha de victorias tras imponerse en el Sadar al conjunto nazarí, pero un imperial Joel y el zarpazo de Borja anularon las aspiraciones de la plantilla dirigida por Jagoba que mereció algo más.

Calleri, un guerrero incansable

El partido arrancó con un gol bien anulado al central bético Víctor Ruíz. A partir de ese momento, Osasuna se puso el mono de trabajo y empezó a ponerle las cosas difíciles a un Betis incapaz. Jagoba que conoce muy bien a Canales y sabe de su potencial, era consciente de que las posibilidades de victorias pasaban por mantener vigilado a la estrella bética. Oier se convirtió en el guardaespaldas de Sergio durante todo el partido y apenas dejaba al cántabro desenvolverse en el terreno de juego. 

El partido se volcaba hacia los intereses navarros. El Betis no encontraba a Canales y estaba perdido. Mientras, Osasuna se sentía muy cómodo sobre el tapete y buscaba el primer gol. Calleri fue un quebradero de cabeza para la zaga bética y a punto estuvo de hacer el 0-1 aprovechando un error grave de Mandi y Emerson. Joel salvó los muebles y el delantero argentino se fue de vacío. 

Osasuna apretaba y el Betis no conseguía generar peligro sobre la portería de Sergio Herrera. El entramado de Jagoba estaba poniendo en serias dificultades a los de Pellegrini. El tesón y la lucha de Calleri estuvieron a punto estuvieron de tener premio, pero era la noche de Joel. Así se llegó al final de la primera parte, con un Betis un tanto incómodo con lo que proponían los rojillos.

El zarpazo de Borja

Pellegrini tenía que darle la vuelta al partido y cambiar el guion del encuentro hasta el momento muy favorable a los de Jagoba. La segunda parte comenzó igual que acabó la primera. Osasuna se volcaba sobre la portería de Joel. Rubén García y Calleri pusieron en problemas a la zaga bética y a punto estuvieron de poner a su equipo por delante del marcador. El Betis se salvaba y en gran parte era gracias a la gran actuación del siempre señalado Joel. 

Las ocasiones falladas por los rojillos minaron la moral de un equipo que veía cómo se esfumaban sus posibilidades. Osasuna se vino abajo y el Betis comenzó a oler sangre. Pellegrini dio más libertad a Canales y el cántabro comenzó a activar el juego de ataque bético. Primero con un gran centro a Loren que sacó en una brillante acción defensiva David García y segundo con un potente disparo que se envenenó tras tocar en un zaguero rojillo y que casi aprovechó Alex Moreno para poner el 1-0 en el marcador. 

Le tocaba sufrir a Osasuna y el Betis dio un paso al frente. Con más posesión y encerrando a un Osasuna que era consciente de que había perdonado demasiado. El Betis tocaba tratando de buscar un resquicio en la zaga navarra, pero se antojaba complicado. El partido parecía destinado al 0-0 hasta que un error posicional de la zaga navarra desató las hostilidades. Tello libre de marca tras el desajuste de Osasuna encontró a un Borja que rompiendo al espacio conectó una vaselina de muchos quilates que superó a Sergio Herrera. Era el 1-0 y todo hacía indicar que el golpe definitivo a Osasuna 

El panda está de dulce y parece que tras un año de sequía vuelve a ser el delantero que todos los béticos esperan. Tras su gol, el Betis supo jugar con la ventaja y apenas dio opciones a un Osasuna que no supo aprovechar sus oportunidades y que finalmente se fue de vacío del Benito Villamarín. 

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