El conjunto azulgrana ha vuelto a ponerse el peto este jueves para reanudar los entrenamientos tras la dura derrota en el Sánchez Pizjuán ante el Sevilla CF. Los azulgranas perdieron por 0-2 en la ida de semifinales de Copa del Rey.

Asimismo, el equipo ha realizad un entreno enfocado a recuperar fuerzas para enfrentarse este finde semana al Deportivo Alavés, rival en la Liga Santander. A los azulgranas les esperan grandes partidos y no hay tiempo para lamentaciones. El próximo martes 16 de febrero el Barça recibe al PSG en el Camp Nou en la ida de octavos de final de la Champions League. Entre la competición doméstica y la máxima competición europea el Barcelona buscará recuperar sensaciones para olvidarse de lo ocurrido en la capital andaluza.

La sesión de recuperación se ha llevado a cabo en la Ciutat Esportiva Joan Gamper y ha estado liderada por un serio Ronald Koeman que lamentó en rueda de prensa la derrota del equipo alegando sobre todo que no detectó graves problemas en la defensa. Sobre el césped del Gamper también se ha podido ver a jugadores del B como Ilaix Moriba, Álex Collado y Konrad de la Fuente.

El técnico holandés cambió la pareja de centrales tras el infortunio de la lesión de Araujo, apostando por Mingueza y Umtiti. Además, explicó en la posterior rueda de prensa que Lenglet no sufría ninguna molestia simplemente decidió jugar con el francés y el canterano en el eje de la defensa.

La derrota del Barça estuvo condicionada por un posible penalti de Suso a Jordi Alba. Un agarrón que comenzó fuera del área se fue sucediendo hasta terminar con una carga dentro de ella. El árbitro, en este caso Mateu Lahoz vio de forma clara una falta fuera del área.

El Barcelona se ejercitará el próximo viernes por la mañana de cara al encuentro frente al Deportivo Alavés del sábado 13 de febrero que se disputará a las 21:00 horas en el Camp Nou.