Las malas noticias no abandonan a la Selección Española. Tras el positivo de Sergio Busquets la incertidumbre se instaló en la Ciudad Deportiva de Las Rozas, pudiendo aumentar los positivos y perjudicar al equipo.

Todos los futbolistas y miembros del cuerpo técnico se realizaron en la mañana de ayer, martes, un test PCR para descartar nuevos contagios. La Federación comunicó a última hora del día lo que nadie quería escuchar, un nuevo positivo, en este caso el afectado es Diego Llorente, futbolista del Leeds United.

Así lo ha anunciado: 

"La RFEF lamenta comunicar que el defensa central Diego Llorente ha resultado positivo en los últimos test PRC realizados esta mañana en la concentración de la selección nacional en Las Rozas".

La situación es ahora mismo de extrema delicadeza, un nuevo positivo supondría que se considerase un brote, por lo que los confinamientos a los jugadores afectados y sus contactos directos aumentarían, así como se imposibilitaría entrenar en grupo.

Los positivos podrían poner en riesgo el debut de la Selección del próximo martes ante Suecia, que también ha informado de que dos de sus futbolistas, Kulusevski y Svanberg, han sido contagiados y deberán guardar cuarentena.

El Presidente de la RFEF, Luis Rubiales, también se pronunció acerca del positivo de Sergio Busquets tras el duelo ante Lituania, avisando de que debíamos estar preparados porque “pueden venir más positivos, es probable que ocurra”. En esos momentos la situación de Llorente no se conocía, por lo que Luis Rubiales tenía razón.

La Selección Española está preparada para suplir futbolísticamente a Diego Llorente, y es que ahora se convierte en clave la burbuja paralela que ha establecido Luis Enrique. Quien parte como favorito para suplir el hueco del madrileño es el campeón de la Europa League con el Villareal, Raúl Albiol, quien forma parte de la burbuja paralela.

Esta burbuja, formada por el propio Albiol, junto a Brais Méndez, Rodrigo Moreno, Kepa Arrizabalaga, Pablo Fornals y Carlos Soler, es la que debería (debería porque es la lógica, podría ser cualquier futbolista que disfrute de sus vacaciones) suplir las posibles ausencias que se generen por coronavirus de aquí al sábado, día límite para ofrecer la convocatoria oficial y definitiva. Desde ese momento, solo podrán ser cambiados, en casos de causa mayor, los porteros.