La destitución de Francisco Javier García Pimienta como entrenador del filial azulgrana días atrás sorprendió mucho al barcelonismo, que no entendía ese castigo mayor cuando el Barça B había cerrado una buena temporada. Sin embargo, Joan Laporta tenía un as guardado bajo la manda que ha podido ver la luz este mismo jueves.

A mediodía, el Presidente del Barcelona a comunicado que el nuevo técnico del filial catalán es Sergi Barjuan, que firma hasta el próximo 30 de junio de 2023. Una nueva era para el catalán, que vivirá su tercera etapa en el FC Barcelona tras ser jugador y, más tarde, entrenador del Juvenil B.

Está previsto que la primera vez que pise el césped de la Ciutat Esportiva Joan Gamper sea el próximo 12 de julio, cuando dará arranque la pretemporada para el curso entrante. Hasta la fecha, hay mucho trabajo de despacho para valorar las entradas y salidas del vestuario y definir los objetivos para la temporada.

Un cambio de era

El ex-lateral izquierdo llegó a la entidad culé el verano de 1988 procedente de las categorías inferiores del Granollers para incorporarse al Barça Atlétic en categoría juvenil. Su dedicación y buenhacer le hicieron ir avanzando por todas las categorías inferiores del Club hasta ganarse su hueco en el Primer Equipo que dirigía, entonces, Johan Cruyff.

Tras 386 partidos y habiendo anotado once goles con la camiseta azulgrana, que le permitieron alzarse con nueve títulos, en el 2002 el catalán firmaba con el Atlético de Madrid, donde acabaría retirándose del fútbol profesional. Pocos años después se introdujo en el mundo de los entrenadores, sentándose en el banquillo del Juvenil B del Barcelona (2009-2011).

Desde la fecha, ha podido dirigir al Recreativo de Huelva, al Mallorca y al Zhenjiang Greentown. Una experiencia que habrá curtido su mente y su ambición por lograr los éxitos que espera traer a este Barcelona B. Un equipo que, tras su fallido play-off, volverá a tener como objetivo poder regresar de una vez por todas a Segunda A.