Le ha sentado bien al Real Madrid el Di Stéfano este pasado mes de octubre, y es que el equipo blanco no ha perdido ninguno de los tres partidos disputados en la capital española. La mejor noticia es un nuevo triunfo liguero, tres puntos vitales que permiten al equipo salir de los puestos de descenso, mientras David Aznar duerme un poco más relajado.

El mayor mérito recae en Esther González, quien se hizo cargo de la falta de gol del equipo y puso todo su empeño en solucionarlo, con un doblete que da aire a un Real Madrid que en las últimas semanas volvía a un estado de depresión donde los resultados no acompañaban. Le estaba faltando mordiente a las blancas, pero ha llegado la jugadora perfecta para disipar todos estos problemas.

Esther ha sido uno de los fichajes más destacados en este verano, tras firmar una sensacional temporada en el Levante que por poco la convierte en la Pichichi Nacional con 29 goles, solo superada por una Jenni Hermoso que consiguió 31. La granadina de 28 años regresaba así a Madrid tras haber disputado unas cuantas temporadas en el Atlético.

Lesiones incesantes

Si algo está caracterizando la temporada del equipo dirigido por David Aznar son las lesiones, y Esther no ha podido esquivar tampoco el paso por la enfermería, disputando las cuatro primeras jornadas pero perdiéndose las tres siguientes hasta esta, la número 8. Tampoco ha podido debutar en la Women Champions League ni formar parte de las dos victorias que han cosechado las blancas hasta el momento en la máxima competición continental.

La recuperación de la andaluza supone un alivio para una plantilla completamente mermada por estos contratiempo físicos, y es que Esther se encontró allí con varias de sus compañeras que no pueden jugar. Algunas bajas son bastante sensibles al tratarse de titulares indiscutibles, como es el caso de la guardameta Misa, de Ivana o de Athenea del Castillo, que comparten sala del médico con otras como Asllani, Cardona y Malena.

Poco a poco David Aznar va sumando efectivos que le permitan poder tener más opciones a la hora de confeccionar el once titular, y es que el Real Madrid aún está a tiempo de mejorar el desastre liguero que han supuesto estas primeras ocho jornadas, donde el equipo ha estado bailando con el descenso, posiciones de las que han podido huir pero sin mucho lustre, pues no pueden despistarse. Allí a lo lejos asoma un Barcelona ocupando la primera plaza, y opositando sin apenas rival al título liguero, pues este mismo domingo ha pasado sin compasión por encima de una Real Sociedad que aspiraba a recortar distancias desde la segunda posición.

Ha vuelto Esther González, y con ella se espera que vuelvan los goles sin cesar al Di Stéfano. Parece difícil alcanzar la cifra que consiguió la temporada pasada, pero a poco que el equipo funcione mejor puede empezar a marcar sin parar. Ha demostrado que se entiende con una Claudia Zornoza que le ha dado dos asistencias, y que ya suma tres en liga. Gran parte del éxito de esta temporada dependerá de como consigan acoplarse las delanteras, sobre todo Esther con Lorena Navarro y Nahikari García como han jugado frente al Valencia, sin olvidar a una Caroline Møller que parece haber perdido algo de protagonismo, pero quien todavía tiene mucho que decir. Deberá reunir Aznar todas las piezas del rompecabezas, pero con esta recuperación y el parón de selecciones que puede haber venido muy bien al equipo, se empieza a atisbar un pequeño rayo de sol en Madrid, una pequeña luz que tendrán que convertir en un resplandor si quieren aspirar a algo esta temporada: el PSG espera.