La reciente derrota del Villarreal ante el Manchester United ha dejado muy tocado al equipo y a la afición. Muchos contaban con la victoria en casa. Existía la posibilidad de que si se lograba vencer a los ingleses en el Estadio de la Cerámica habría opciones de pasar a la siguiente ronda, contando con la nueva incorporación de Carrick pocos días antes del encuentro después de la destitución de Solskjær, se pensaba que este duro mazazo haría que fuese más fácil ganar, sin embargo, ahora le tocará al conjunto groguet jugársela en Bérgamo.

Gracias al empate del Atalanta ante el Young Boys, donde quedaron 3-3, resolviéndose todo en los últimos minutos, ha hecho que el Villarreal tenga asegurada la tercera plaza en el Grupo F, es decir, la clasificación a la Europa League en caso de no pasar a la siguiente ronda en Champions.

En caso de que se gane o empate contra el Atalanta, el conjunto dirigido por el técnico vasco estaría clasificado para los octavos de final de la Champions League, algo histórico que no pasa en el Madrigal desde hace varios años.

Si no se diera esta última opción, regresarían a una competición donde es el vigente campeón tras ganar la última edición enfrentándose al United.

El partido se disputaría el 8 de diciembre en la ciudad italiana, donde ya existe una baja fija para el encuentro, la de Yermey Pino, puesto que recibió una amarilla y estará sancionado por acumulación de amonestaciones. El equipo llegaba con muchas incógnitas al encuentro donde al final se resolvieron y pudimos ver sobre el campo a Danjuma y Capoue, jugadores que se perdieron el último partido de LaLiga.

Estas son las opciones de los de Unai Emery para clasificarse, una última batalla decisiva si quieren continuar esta aventura europea y repetir la hazaña de Manuel Pellegrini llegando a rondas finales de la competición 

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