Se la jugaba el Real Madrid, que debía ganar si quería verse en la siguiente ronda de la Champions League, sobre todo tras el triunfo del PSG que no dio opción al WFC Zhytlobud-1 Kharkiv y goleó seis a cero.

No repitió Toril el once que eligió ante la Villarreal, pues decidió salir al ataque, con Møller y Athenea en los costados y Asllani y Esther como delanteras referencia. Era el primer partido de Champions para la delantera sueca, que ya está plenamente recuperada de su lesión y con más ganas que nunca, como ha podido demostrar en la noche de hoy.

Un campo impracticable

Partido muy difícil para el Real Madrid, no tanto por el rival, al que ya goleó en la ida, sino por el estado del campo y por las situaciones atmosféricas, con una nevada incesante que dificultaba el juego y el movimiento del balón, obligaba a las jugadoras a un fútbol menos atrevido e invitaba a los errores.

Precisamente por un error vino el primer gol blanco, tras un inicio asediante del Madrid que culminó en el minuto nueve con un córner. Kenti recibió el balón y con un pase raso lo puso al corazón del área. Las defensoras islandesas se durmieron, pero Asllani no, aprovechando la ocasión y adelantándose a todo el mundo para marcar su primer gol de la temporada. No cambió el guion del partido y en el minuto 38, un penalti algo infantil cometido sobre Asllani sirvió para que la goleadora se anotara un segundo tanto, engañado a la portera y reivindicándose todavía un poco más.

No tiró a puerta el Breiðablik en toda la primera mitad, y aunque se animó con algún disparo en la segunda, apenas pudo crear peligro sobre la portería defendida por Misa. Con unas condiciones de campo muy adversas, con el banderín bailando por el viento, volvió Cardona, que también debuta en esta Champions League. El partido murió con un gol de Claudia Zornoza, que aprovecha un rechace para anotarse un tanto y certificar el pase del Real Madrid.

El Real Madrid femenino ya se ha clasificado a los cuartos de final, una ronda donde se verá las caras con los mejores equipos de Europa, y para la que ya ha recuperado prácticamente a todos sus efectivos, que tendrán que sumar y mucho si el equipo blanco quiere aspirar todavía a más. Alberto Toril desde el banquillo querrá seguir ganando tras esta histórica clasificación, y ha conseguido enchufar a Asllani, que si consigue entenderse a la perfección con Esther pueden convertirse en una de las duplas más letales. Espera el Barça el domingo, el momento de la verdad.