La pandemia aún no está vencida, y es que el coronavirus sigue dando coletazos a pesar de los grandes porcentajes de vacunación alcanzados en España, donde la inmunidad parece casi asegurada. En esta ocasión le ha tocado a Luka Modrić y a Marcelo, que tendrán que guardar la obligatoria cuarentena y perderse los encuentros correspondientes.

Se rompe así una racha desde julio. El Real Madrid había conseguido evitar nuevos contagios en sus jugadores, y ahora la mayor preocupación reside en conocer si más integrantes del equipo han podido tener el suficiente contacto como para propagarse la enfermedad entre ellos, algo que no ha pasado con el equipo de baloncesto, pues desde que Pablo Laso y Tomas Heurtel dieran positivo no se han conocido más casos.

El partido del Cádiz está totalmente descartado para ambos jugadores, y la duda se centra en el partido del 22 de diciembre ante el Athletic, el que supondrá el último partido del año. Si no consiguieran llegar, ya volverían de nuevo en 2022, en el encuentro frente al Getafe.

A nivel futbolístico, la ausencia de Marcelo apenas se notará en el rendimiento del equipo, pues el lateral brasileño, apartado de la rotación, solo ha intervenido en tres partidos esta temporada, uno como titular. A pesar de la lesión de Mendy, Ancelotti decidió no confiar en él para suplir al francés.

Camavinga y Valverde

Lo que a buen recaudo notará Ancelotti será la baja de Modrić, que estaba alcanzando un nivel superlativo como el mostrado frente al Atlético de Madrid. El croata es uno de los jugadores que más minutos acumula a lo largo de la temporada, asentado en un once donde las rotaciones no parecen haber aterrizado.

Esta baja abrirá una nueva oportunidad a dos jugadores como son Camavinga y Valverde, importantes al principio de la temporada pero relegados en cuanto el propio Modrić o Kroos estuvieron listos para jugar. En principio debería ser el uruguayo quien entrara en el once, pero sin descartar al joven francés.