Después de unas semanas de trabajo muy intensas preparando el partido contra el Manchester United, los rojiblancos han recogido lo sembrado. Un partido muy sólido en defensa, con múltiples ayudas desde el primero al último de los jugadores en el campo, desquició a un Manchester United que no encontró manera alguna de superar la línea defensiva propuesta por Simeone. 

Desde Jan Oblak, hasta el propio Cholo desde el banquillo, mantuvieron la intensidad hasta el pitido final. El centro del campo volvió a ser el de un Atlético de Madrid mejor estructurado, y la delantera formada por Joao Félix y Antoine Griezmann trabajó sin cesar para ayudar al equipo en las labores defensivas. A partir de aquí, el análisis pormenorizado y las aportaciones individuales de cada jugador.

Jan Oblak pone el cerrojo 

El guardameta del Atlético de Madrid firmó una actuación más que sólida bajo los tres palos de la portería de Old Trafford. Su primera parte es una prueba de la intensidad y de la concentración con la que Diego Pablo Simeone inyecta a los jugadores antes de salir al campo: dos paradas clave con el 0-0 en el marcador y una más al borde del descanso tras un tiro de Bruno Fernandes.

Fotogalería Atlético de Madrid
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El esloveno no tuvo tanto trabajo como la noche de Anfield de hace dos años. Si bien es cierto que el Manchester fue de más a menos, la jerarquía de Oblak en el área pequeña fue muy necesaria para repeler el planteamiento que propusieron los ingleses para remontar: los centros laterales. Con la entrada de Cavani y Rashford, así como la de Mátic, los "reds devils" buscaron generar peligro a un Oblak que salía de su portería para alcanzar esos balones aéreos.

Giménez, Reinildo y Sávic, un muro para el United

La línea de tres centrales formada por Giménez, Reinildo y Sávic desquició al Manchester United durante todo el partido. Con el balón, la defensa no arriesgó en exceso a la hora de construir la jugada desde atrás, tuvieron buen criterio para decidir cuando se podía dar un pase en corto para buscar a uno de los mediocentros, y cuando no. 

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Sin el balón, la concentración fue fundamental para lograr el triunfo. Giménez anuló a un Cristiano Ronaldo que tuvo que bajar a recibir la pelota muy lejos de su área de influencia, por lo que no generaba peligro alguno. Reinildo mantuvo una bonita batalla con Elanga de la que salió victorioso, haciendo gala de su gran porcentaje de duelos ganados y de su fortaleza física para ir al choque. Sávic supo leer muy bien el partido y las diferentes situaciones que requerían anticiparse, robando balones y adelantándose a Bruno Fernandes, sin dejarle girarse una vez recibía el esférico y haciéndole retroceder.

Renan Lodi y Marcos Llorente fueron los dueños de los dos carriles

El partido del brasileño y el internacional español era fundamental para ejecutar el plan de Simeone. Replegarse y hacer las ayudas defensivas pertinentes cuando el equipo estaba en bloque bajo defendiendo, y salir rápidamente por las bandas cuando hubiese oportunidad de contrataque. Y así fue, puesto que lo cumplieron a la perfección.

Marcos Llorente anuló a Jadon Sancho en la banda derecha. El ex del Borussia Dortmund no se atrevía a intentar el uno contra uno puesto que lo intentó en un par de ocasiones al inicio del partido con éxito nulo. A partir de ese momento, el interior del United buscaba combinar por el medio o retroceder hacia atrás, lo cual cerró muchas puertas al ataque del Manchester United.

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Renan Lodi hizo lo propio por la banda izquierda. Junto a Reinildo, intentaron frenar a un desatado Elanga, que fue de lo mejor del partido para el conjunto local. A pesar de que el canterano de los red devils percutió por la banda izquierda en varias ocasiones, el carrilero brasileño del Atlético de Madrid también se incorporó con mucho peligro al ataque en transición ofensiva, firmando otro partido para el recuerdo con la camiseta rojiblanca. Un pase de Antoine Griezmann desde la banda derecha lo aprovechaba de la mejor manera Lodi, batiendo a David De Gea de cabeza con un remate picado hacia el suelo. 

Esta jugada es un claro ejemplo de lo que Simeone buscaba con la incorporación al once de Renan Lodi. Su apoyo en las transiciones ofensivas y la manera en la que el brasileño busca la espalda de su rival para poder rematar son dos de las claves de su juego. Reinildo ayuda mucho en este aspecto al ahora carrilero del Atlético de Madrid, puesto que libera defensivamente al jugador para que este no tenga que estar tan centrado en los aspectos defensivos y pueda incorporarse con mayor autonomía.

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Koke, Rodrigo de Paul y Héctor Herrera se redimieron del partido contra el Cádiz CF

Tras un último partido algo deslucido de los tres hombres que sostienen el centro del campo del equipo contra el conjunto gaditano, la columna central del Atlético de Madrid se redimió de sus errores firmando un partido sólido.

Rodrigo de Paul mostró su mejor versión: recuperaciones, visión de juego y ayudas defensivas fueron tres de los aspectos en los que más destacó el argentino. La intensidad y el despliegue físico que mantuvo durante todo el partido también la reprodujo Koke en su juego, que fue nombrado mejor jugador del partido de la noche del martes.

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Héctor Herrera también sorprendió en labores defensivas a pesar de que tuvo una primera media hora algo más deslucida. A sus 31 años sigue manteniendo un gran estado físico que para sorpresa de algunos, soportó 90 minutos de una gran exigencia física. 

Joao Félix y Antoine Griezmann: incansables

La implicación defensiva de la línea más alejada de la portería de Oblak fue admirable. Los dos delanteros hicieron constantes ayudas a los tres mediocentros del Atlético de Madrid, a Marcos Llorente y Renan Lodi, encerrando a los jugadores del United en una baldosa.

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Además, con el balón en los pies, supieron contemporizar y jugar entre líneas cuando el equipo fue más activo ofensivamente. El gol de Renan Lodi llega tras un taconazo de Joao Félix a Griezmann, que este pone con su pierna derecha en el segundo palo para que remate el brasileño.

La afición, el jugador número 12

El desplazamiento de la afición a Manchester, fue, una vez más, el culpable de que el Atlético de Madrid jugase prácticamente como local. Desde fuera del estadio y en las horas previas al partido, fueron más de 3500 rojiblancos los que tiñeron con los colores de su equipo la ciudad condal. 

Una vez ya dentro del campo, los colchoneros silenciaron Old Trafford en múltiples ocasiones con sus cánticos, alentando al equipo y llevándolo en volandas hasta los cuartos de final. EQUIPO, AFICIÓN y rumbo a cuartos de final.

Twitter Rodrigo de Paul
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